Dedicatorias al viento

Capitulo 2

Dedicatoria 1: te amo, espero algún día encontrarte y estar a tu lado

Lunes 28 de agosto

Walter

-Walter, estoy aquí -dijo ella con una sonrisa protectora, moviendo la mano de un lado para otro, haciendo que pudiera abrir bien los ojos.

- ¿Quién eres? -pregunte.

Era obvio que era una chica y muy bonita, pero, jamás la había visto en mi vida, sin embargo, me transmitía confianza.

-Más adelante me conocerás, pero nunca dejes de insistir...

- ¿Insistir? ¿A que debo insistir? -interrumpí exaltado.

-A todo, tengo que avisarte que tiempos difíciles vendrán. -ella se veía angustiada, ¿por mí?

-No entiendo -dije muy confundido.

- Solo recuerda nunca es tarde, nunca digas jamás y sigue mi consejo, nunca pares de insistir. -se desvaneció

Me dejo ahí parado con la mirada al suelo, y me quede pensando.

- ¿Jamás? - dije en voz alta, aunque no había nadie, no comprendía a lo que se refería.

De pronto siento que alguien susurra mi nombre y me agita un poco; mi mamá, desperté y fue ahí donde caí en cuenta que todo había sido un estúpido sueño que solo me dejo muy desconcertado, aunque en el fondo estoy alegre, digo, ¿que son esos consejos más cursis que me dio? Definitivamente esa persona quien sea que haya sido no sabe dar consejos.

Mi día, bueno pues mi día comienza con mi querida madre levantándome, creo que tengo suerte de que ella me levante y no una ruidosa y molesta alarma.

El día de hoy entro a la preparatoria, a decir verdad, no estaba emocionado de alguna u otra forma sabía que mi vida estaba condenada al fracaso, aun así, trataba de no descuidar mis estudios porque dentro de mí, en alguna parte de mi corazón tenía la esperanza de ese magnífico golpe de suerte, de poder cumplir mis metas y ser, tal vez no exitoso, pero si triunfador.

Mis expectativas eran bajas no pude entrar a la preparatoria que quería porque no teníamos suficiente dinero, así que me toco entrar a una que no me ilusionaba mucho, la verdad, lo único bueno es que entraría mi mejor amigo, Kaleb, el de verdad es inteligente y sus papas apuestan todo por él, pero es como si él no se diera cuenta de que es afortunado de tener una familia que lo apoye y lo ame y no entiendo muy bien porque, lo hemos hablado un par de veces pero no es muy expresivo y prefiere evadir el tema, el cree que no me doy cuenta, pero claro me doy cuenta que su estado de ánimo no es el mejor, si tan solo me digiera que le pasa...

Me levante y cuando me estaba cambiando escuche unos toques en mi ventana, no la suelo abrir pero sentía una necesidad intensa de abrirla, como si mi futuro dependiera de eso así que la abrí, la brisa entro y me golpeo la cara fue un momento muy relajante y como si alguien susurrara en mi oído escuche un: te amo, espero algún día encontrarte y estar a tu lado, mi corazón empezó a latir muy fuerte y de pronto me empecé a sentir feliz, como si supiera que aparte de mi madre había alguien más que me amaba y por alguna razón yo también sentía que amaba a ¿eso? ¿ella? ¿el? no lo sé no lo tenía muy claro solo sé que había alguien que ocupaba un lugar especial en mi corazón y en me estaba esperando en alguna parte de este mundo.

Eso cambio mi día subió mis expectativas y me puso por alguna razón feliz.

Me cepille los dientes y baje a desayunar, mi mamá estaba haciendo unos huevos estrellados, y de pronto llega el ser más horrible y repugnante que he conocido, Adam, lamentablemente Adam es el ser que se supone debo llamar papá, pero no nunca lo he llamado papá y nunca lo hare.