Dragón emperador prismático

21.-Capitulo 20

Issei, Sona y Miyu junto con Ruby y Zafiro estaban dentro de la nueva casa de Sona. No había muebles, por lo que casi todo estaba vacío, excepto su próxima habitación. Así que se estaban reuniendo dentro de la nueva habitación de Sona para hablar de anoche.

"Bien... Ruby, Zafiro, ¿cuánto tiempo tenemos que esperar a que el Gran Maestro venga aquí? Anoche dijiste que después de que todas las siete Tarjetas de Clase estén reunidas, nuestra tarea ha terminado y tuvimos que esperar a Gran Maestro, "Issei comenzó la charla.

"Para ser honesto, Issei-san, no lo sabemos," Ruby flotó alrededor. "Si recuerdas lo que dijimos sobre nuestro viaje aquí, el Gran Maestro probablemente todavía esté luchando contra el dragón gigante, o está perdiendo y tiene que retirarse. Si el Gran Maestro ha derrotado al dragón, ya habría estado aquí".

"Y no podemos contactarlo porque él nos programó para que solo pudiéramos comunicarnos entre nosotros. Entonces la espera puede ser de una hora y hasta un tiempo indefinido", Zafiro continuó la respuesta de su hermana.

"Así que ahí lo tienes, Issei-san. Todavía estarás atrapado con nosotros ~"

Issei solo suspiró al escuchar la explicación.

"Ruby, ¿cómo se destruyó el edificio anoche? No estábamos fuera del Mundo Espejo, ¿verdad? Ciertamente recuerdo que ustedes dos nos transportaron de regreso al mundo real".

"Bien. Eso en realidad no importa ahora que hemos recolectado toda la Tarjeta de Clase. Pero si quieres una explicación, es porque el Mundo Espejo donde la Tarjeta de Clase puede manifestarse se está volviendo cada vez más pequeño hasta que ya no existe. Ya, y la tarjeta de clase se manifestaría en el mundo real en su lugar".

"¿Por qué no dijiste nada al respecto, idiota?" Issei saltó para agarrar el palo flotante, pero Ruby flotó fuera de su alcance.

"Bueno, eso no importaría en absoluto ahora que se han recolectado todas las Tarjetas de Clase, ¿verdad? Como dije, solo te estoy dando una explicación."

"¡Eso no viene al caso!"

Mientras Issei y Ruby jugaban, Sona y Miyu hablaron con Sapphire más sobre el tema del Gran Maestro.

"Entonces, ¿cómo es el Gran Maestro?"

"Es intenso, especialmente en asuntos relacionados con mundos alternativos como las Tarjetas de Clase".

"¡Te tengo!" Issei finalmente atrapó a Ruby, quien lo había estado incitando a que la tomara. El palo rosa finalmente la consiguió simplemente desierto y llamó la atención de los otros tres.

"¡Nooooo! ¡Issei-san! ¿Por favor? ¡Lo siento, lo siento, no lo volveré a hacer! ¡Lo prometo! ¡Por favor no me hagas nada!"

"Hmph," Issei sonrió con suficiencia. "Como soy un tipo tan benevolente, te dejaré ir si prometes no ocultarnos nada importante".

"¡Lo prometo, lo prometo!"

Con eso, Issei liberó a Ruby de su agarre.

"Ise-san se dará cuenta de que la promesa de Ruby es una promesa vacía, ¿verdad?" Sona susurró a Miyu y Zafiro.

"Déjalo aprender esa lección por él mismo. Además, tener tanta fe en los demás es una de las mejores cualidades de Ise", respondió Miyu.

"Eso es cierto, ¿no? Con nosotros dos, ese es un lado lógico de las cosas para equilibrar las tendencias impulsivas de Issei", replicó Sona con una sonrisa cariñosa.

"Tal vez debería ser más impulsiva..." se susurró Miyu, pero Sona la escuchó y instantáneamente la reprendió.

"¡No! ¡Por favor no me dejes lidiar solo con su impulsividad! Ya es bastante malo que mi hermana sea igual, ¡por favor no añadas a nadie más!"