Capitulo 4| La fiesta

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Lo primero que vi fue el techo de la casa, acababa de despertar apenas y recordé algo importante, tengo fiesta mañana y depende de mi madre si puedo ir.

Hice o que tenía que hacer, tome una ducha de 20 minutos  con agua fría para despertar mas rápido, me lave los dientes y salí del baño, no se escuchaba alsolutamente nada aparte de mi escandalo para despertar.

Me dio igual y empeze a cambiar elegí una camisa holgada que decía "OBEY" y unos shorts, lo convine con mis vans grises, después fui al espejo me cepille el cabello y lo seque con el secador me lo deje suelto pero con una pequeña trenza del lado izquierdo de mi cabello.

Toda la vida eh sido una chica que a veces se arregla demasiado,  tengo esa obsesión pero pues me gusta.

Me puse un poco de rimen, brillo de labios y salí de mi habitación, estaba bajando las escaleras cuando escuche que un plato se rompió y me apresure al bajar   las escaleras.

Entre a la cocina y mi mamá estaba cocinando pero se le callo el baso de la mano, me apresure y rejunte los vidrios para que no hubiera accidentes.

-Que callada esta la casa mama- le dije tratando de hacer conversación.

-Hoy la mañana ah estado tranquila como pocas veces pasa- dijo mi madre  mientras servía café -¿Quieres café?- me volteo a ver esperando mi repuesta

-Si por favor- le conteste.

-¿Que harás hoy?- no acostumbras a levantarte temprano.

-Lose, mamá emm me das permiso de salir a una fiesta?- le hice la mejor cara de ternura para que me dijera que si.

-Y ¿porque de vería de dejarte?- me preguntó con un tono incrédulo.

-Ayer me dijiste que limpiara mi cuarto y con todo el dolor de mi corazón  lo hice y yo pienso que tanto esfuerzo merece una pequeña recompensa, en este caso un pequeño permiso para salir a una  fiesta.- le dije respondiendo su pregunta.

-Me encanta tu esfuerzo, como cuanto te tardaste en meter todo el desastre debajo de tu cama?.- me pregunto viéndome a la cara

En ese momento sin querer me ahoge con el café y empeze a toser.

-Tuve un poco de problemas al limpiar mi cuarto pero lo bueno es que lo intente.- le dije con una sonrisa en el rostro.

-Donde es la fiesta y quienes son- pregunto mi mamá.

Estoy segura que me vida que si.- pues tengo planeado ir con la América, nos  invitaron unos amigos de la escuela.- le repondi

-ohh- dijo mi madre sin nada de ánimos.

-Y.. me dejas ir.- estaba segura que me dejaría.

-Pues deja lo pienso… no.- me dijo con un tono incrédulo de nuevo.

-Mamaaaaa! Por que no?.- le pregunte con una cara triste.

-No es cierto puedes ir, solo te quería hacer enojar.- me dijo en un tono burlón.

-¡Perfecto!.- grite.- te amo mami.- le di un beso en la mejilla para después salir corriendo a mi habitación para decirle a América.

Tome mi celular y busque entre mis contactos.

*llamando a América *

-¿Te dejaron ir? Me pregunto en cuanto contesto mi llamada.

-sip- ahora te necesito en mi casa porque me acompañarás al centro comercial bebe.

-Esta bien llegare en 15 minutos porque aun no me cambio.

-Esperare.

-Bueno.

*fin de la llamada telefónica*

Después de eso solamente tome mi bolsa pequeña negra que tiene una cadena de color dorado, le puse mi dinero y baje a la sala.

Me senté en el sofá de la sala y tome mi celular, encendí la televisión y comencé a ver mis mensajes, tenia uno de mi novio diciéndome "buenos días Elizabeth <3" me encanta que me dijera eso todas las mañanas,  le conteste "buenos días Chris <3".

Después de contestar me di cuenta que no había comido nada me levante del sofá para ir a la cocina a ver si había algo rápido que comer.

Mi madre había comprado pan dulce hací que decidí acompañarlo con un licuado de chocolate con plátano.

Puse todo en la licuadora y después de licuarlo lo serví en un vaso de vidrio me senté en la mesa y comencé a comer.

No me había dado cuenta del hambre que tenía hasta que me comí ese hermoso pan dulce, justo cuando me termine todo escuche un auto y al fijarme América estaba esperando afuera.

Tome mis cosa deje una nota donde le avisaba a mi madre que iba al centro comercia y que después llegaba. Abrí la puerta de entrada y América estaba adentro del auto con una gran sonrisa plasmada en su rostro.

Entre al auto y ..

-¿Porque rayos tienes un auto?- pregunte sorprendida

-Mi hermano me lo presto porque le dio flojera llevarnos el.-respondió emocionada.

-Vámonos rápido al centro comercial que no tenemos mucho tiempo para elegir en vestido.

-Wow, ¿iras en vestido? Yo ire en unos jeans y una camisa normal.- respondió segura de si misma.

-pues yo soy lo contrario.- le dije nerviosa

-Bueno pues vámonos ya.- dijo mientras arrancaba el auto

América  no es esa clase de chica fan de los vestidos y accesorios ni del maquillaje, aun así ella siempre ah tenido una cara natural muy linda ella no necesita nada de eso para verse bien y lo sabe.

En cuanto yo? Yo soy súper exagerada para todo siempre he amado arreglarme y sentirme presentable en cualquier ocasión.

Todo el camino al centro comercial fue lo mismo América puso la radio a todo volumen y fuimos cantando hasta que llegamos.

****

Estábamos ya en la fiesta, termine comprando un vestido color negro con flores blancas dibujadas lo todos lados. América fue obligada por mi a ponerse un vestido normal no exagerado ni muy elegante solo era un vestido normal pero no era costumbre mía ver a América en falda mucho menos en vestido.

La fiesta era en un jardín a las afueras del pueblo, había alberca pero nadie entraba, estaba lleno de meseros y había una gran mesa de comida, obviamente América y yo estábamos justo hay en la mesa de la comida.

Después de un rato América se soltó un poco y salimos a bailar, prácticamente eramos como dos gusanos moviéndose en la pista pero era divertido que nadie se diera cuenta oh que no nos prestaran atención.

Pasaron una horas y decidimos regresar a casa. América no traía el auto de su hermano porque el tenia otros planes y saliendo llamamos a un taxi. Fue difícil al parecer muchos taxistas ya no trabajaban a esa hora, fue raro pero encontramos a uno que iba pasando por la calle

Seeking Our DestinyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora