Todos sabemos como es Venezuela, es peligrosa, nunca salía de mi casa pero aun así logre llevarme experiencias malas y traumas. Como no salía no me podía encontrar con nadie por eso fue imposible para mi tener sexo en Venezuela.
Pero llegamos a Europa, otro mundo un poco más seguro, no teníamos miedo.
Entre a la escuela de inmediato y como quedaba un poco lejos, mi papá me compró un teléfono. Estaba feliz porque me podía tomar todas las fotos que quisiera y sin miedo porque era totalmente mío. Pero no fue hasta un año después que me descargue tinder. Tenia 16, si, estaba ilegal en la app pero me sentía segura porque no tenia una advertencia que te intimidara así que segui adelante.
¿Pero que estaba buscando?
Estaba buscando un sugar daddy, porque quería uno y mi situación económica no era tan buena, hablé con muchos hombres y cuando creí haber encontrado a mi sugar daddy de ensueño... en realidad me había topado con él hombre que mas tarde abusaria de mi.
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un millón de hombres
Fiksi Remaja18 años y con una lista de un millón de hombres, tal vez exagero pero... si no los puedo contar es porque probablemente han sido tanto como un millón. Sin magia, sin mentiras, sin ficción (o bueno tal vez un poco). Esta es mi historia, cruda y real.