Myers [Fred Weasley]

14) Acuarelas

Ya era navidad y Julia se había levantado bastante pronto.

—Hermione, Ginny vamos— la chica gritaba por toda la habitación— ¡ES NAVIDAD!

—Pareces una niña pequeña y eres la más mayor de aquí— rió Hermione.

—Chica de catorce años con mentalidad de niña de tres— Spencer entró en ese momento en la habitación de las chicas.

—¡Hey!— gritaron las tres a la vez.

—Podríamos estar cambiándonos— se quejó la pelirroja.

—Pero no lo estáis— se defendió el chico.

—¿Entonces se están cambiando o no?— preguntó la voz de Fred detrás del chico la cual llamó la atención de las tres chicas.

—¡Sí!— gritó la pelirroja.

—Ya claro, y le estás haciendo un striptease a Spencer— dijo George.

—Oye pues vuestra hermana tiene buenas tetas— le siguió el juego Spencer.

—Hey, que es nuestra hermana idiota—Fred apartó a el chico.

—Ella no es la única, Julia también está así— dijo Spencer consiguiendo que Fred se pusiera un poco rojo y girara la cabeza hacia la habitación.

—¡OYE!— dijo la pelinegra al ver que Fred la buscó con la mirada.

—Idiota— le susurró el pelirrojo a Spencer.

—Pero entonces hay alguien sin ropa o podemos entrar— dijo George sin acabar de entender cómo estaban las chicas dentro de la habitación.

—No, era broma— dijo Spencer— están todas vestidas.

—A bueno, entonces dejaros de vuestras mierdas y vamos a desayunar— George entró a la habitación de las tres chicas— ¿Quién tiene hambre?

—Yo— dijeron las tres chicas a la vez y se levantaron, Julia fue la última en salir.

—En serio habías mirado si yo estaba...— la chica se puso un poco roja.

—Estaba mirando si mi hermana realmente estaba desnuda o no— se excusó el pelirrojo.

—Si claro, y te confundiste— le dijo Spencer— como son tan parecidas... sobre todo el pelo, eh.

Los seis bajaron a desayunar y al subir no había nadie en la sala común así que se quedaron allí hablando.

—Bueno— dijo Julia— yo tengo algunos regalos que dar...

—Y a qué esperas— le dijo su hermano— por cierto, podríamos decirle a Tim que se venga.

—Vale, pues si queréis voy yo y nos esperamos a abrir los regalos— dijo la pelinegra.

—Vale, ¿quieres que te acompañe?— le dijo Fred.

—Como quieras— contestó la chica—- pero tengo que hacer una parada antes o después.

—Bien, sin problemas— el pelirrojo se levantó y los dos salieron de la sala común.

—Pasemos primero por el despacho del profesor Lupin— dijo la chica con una bolsa en la mano.

—¿El regalo para tu novio?— dijo en tono burlón el chico.

—Ja ja ja, que gracioso que eres Weasley.

—Era broma— le dijo queriendo cortar la tensión pero en realidad ni había tensión, la chica obviamente se lo tomó como una broma.

—Bien, ¿te esperas aquí?— le preguntó la chica.

-Sí, claro.

—Vale, no tardaré— Julia entró al despacho de su profesor— ¿Lupin?