Te quiero a ti y a todos tus defectos | shigadeku week 2021

Día 4: ❝El día que te conocí❞

NOTA:
Revisé esto muchas veces hasta obtener un resultado satisfactorio, aún así, puede contener algunos errores, ya sea por la extensión del texto o porque es la primera vez que me atrevo a escribir algo así. Si notan algo fuera de lugar, no duden en hacérmelo saber, me gustaría conocer su opinión. Sin nada más que decir, los dejo. Ojalá lo disfruten tanto como yo. ¡Gracias por leer!

P.D. Una disculpa si el final es amargo. Mi corazón se rompió al escribirlo.

.

Día 4:

Mafia

♡

El día que te conocí
Tomura no sabía de desesperación, hasta que conoció a Izuku

.

Las fosas nasales de Kurogiri se dilataron con el pasar de los segundos, mostrando lo furioso que estaba.

—Eres un estúpido.

Shigaraki apretó los puños y tensó su mandíbula.

—No es necesario que lo repitas. Estoy consciente de mi situación.

—¿¡Y qué pretendes hacer!? —preguntó, perdiendo totalmente la compostura que lo caracterizaba.

Shigaraki se acercó hasta su escritorio, tomó un folder transparente y se lo entregó al hombre. Kurogiri se lo arrebató para examinarlo con atención.

—¿Esto qué es?

—Mi plan.

—¿Tu plan? —alzó una ceja y esbozó una sonrisa fingida—. ¿Este es tu plan?

Tomura le quitó el folder y se cruzó de brazos, indignado. De a poco la tensión de la habitación disminuyó.

—Aunque te cueste creerlo, lo es.

—No te creo.

—Me importa una mierda si eres capaz de creerlo o no —resopló—. Lo importante es que ya está y tengo todo para ponerlo en marcha.

—Lo importante… —repitió despacio, acariciando su sien con cansancio—. ¿No eres consciente de la situación en la que estás metido? Porque ni pienses que nosotros estaremos involucrados.

Tomura caminó hasta la mesa y se recargó en ella.

—Lo sé, no soy un niño pequeño.

—Bueno, parece que sigues siendo uno.

Shigaraki rio con amargura.

—Es hora de que deseches esa percepción infantil que tienes de mí, después de lo que hice… Tú más que nadie debería saberlo.

Su tutor repasó en su cabeza la información que Tomura tenía escrita en aquellos documentos. Por más que intentara buscar la lógica al dichoso plan de su hijo, no podía.

O quizá, no quería.

—Te estás metiendo en la boca del lobo.

—Lo sé.

—Los hombres de Overhaul no tardaran en encontrarte.

Shigaraki guardó silencio.

Kurogiri se acercó hasta él y lo estrechó entre sus brazos, como solía hacerlo cuando apenas lo recogieron de las calles. Estaba aterrado.