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Despertaste temprano en la mañana, observaste la gran figura a tu lado que seguía durmiendo placidamente, sonreiste leve y te levantaste con cuidado, no queriendo despertarlo.

Pensaste en preparar algo para desayunar por tu cuenta, después de todo la noche anterior él se encargó de la cena.

Te detuviste en seco en uno de los pasillos, no sabías muy bien hacia donde ir.

El lugar era increiblemente enorme, no pensabas que te ibas a perder tan fácil.

Okay, la cocina estaba en la planta baja, solo busca una escalera que baje.

Fue lo que pensaste y empezaste a caminar buscando una escalera, habias encontrado 3, pero todas iban al el piso superior.

Suspiraste un poco mareada por el lugar, pero no te ibas a rendir.

Un poco más adelante encontraste una puerta semi abierta, observaste dentro.

Era una escalera, solo tenía dirección hacia abajo.

Tal vez sea un camino alternativo.

Se te ocurrió, y empezaste a bajar con confianza, el silencio que había era terrorico, pero no ibas a dejar que te invada el miedo.

Luego de unos momentos empezaste a sentir que estabas bajando demasiado, y cuando estabas a punto de regresar para subir, notaste una luz al final de la escalera.

La curiosidad fue mucho más grande, y decidiste continuar descendiendo.

Habías llegado a un cuarto, estaba iluminado con algunas antorchas, había bastantes muebles cerrados con candado, pero lo que más te llamó la atención fueron los cuadros colgados, eran retratos bellísimos.

Había un total de al menos 15 retratos colgados en perfecto estado, y notaste uno el cual estaba colgado pero estaba destrozado.

Mirando con más detalle cada pintura, a quienes habían retratado era lo que todos llaman 'bestias'.

Admirabas las pinturas, y cada vez te preguntabas más y más como es que alguien podía llamar bestias a criaturas tan hermosas.

Serán sus compañeros? Sus amigos? Sus familiares?

Te preguntabas, pero optaste por dejarlo en la duda.

Por ahora.

Saliste de aquel lugar, cerraste la puerta con cuidado y seguiste tu búsqueda de la cocina.

Después de unas 3 vueltas al mismo piso encontraste la puerta a la escalera de la cocina.

O a una cocina mejor dicho.

Estabas en una cocina, si, pero no era en la que estuvieron ayer.

Te rendiste y empezaste a buscar que había por allí para desayunar.

Encontraste todo lo necesario para un desayuno completo, algo de arroz, huevo, pescado, algo de verduras y té para acompañar.

Le pusiste mucho empeño a la comida, cuando la acabaste la acomodaste bien en la mesa.

Te cruzaste de brazos.

Ahora como hago para llamar a Asahi?...

-"Mm...eso huele muy bien..."

Escuchaste la voz grave bajando las escaleras e ir al comedor, te observó y te dedicó una sonrisa.

-"Sigues aquí"

-"Pensé que habia dejado en claro que no me iría a ningún lado"

-"Me alegra que te quedes" sonrió con un rubor en sus mejillas avergonzado por lo que dijo "No tenías que preparar todo eso-"

-"Shush! Siéntate y a comer" le dijiste

Él te hizo caso, tomó asiento, agradeció por la comida y empezó a comer, se veía feliz.

Lo observaste un momento.

Es mucho más educado que algunos humanos que he conocido.

Pensabas mientras acariciaste su cabello, quitandolo de su rostro, miraste los cuernos que adornaban su cabeza.

Sólo es distinto. Por eso les temen tanto?

-"Hum... Puedes..no mirarme así? Por favor? Me pone nervioso..."

-"Oh- si, lo siento!" te alejaste y empezaste a comer

-"Te enseñaré el lugar, y como puedes hacer para no perderte luego"

Te sentiste avergonzada cuando dijo aquello, pareciera que te hubiese dicho 'no te vuelvas a perder y a dar vueltas'.

-"Por cierto, no necesitas tener mucho cuidado con las cosas de aquí... Puedes sentirte como en tu hogar, si? Puedes entrar donde gustes, sólo... Me gustaría que no se estropee nada...si?" dijo apenado por la petición, como si te estuviese pidiendo mucho

-"Entendido" dijiste sin más y le sonreiste, seguiste comiendo con algo de rapidez, tenías un estómago profundo y de acero

Sentias la mirada sorpendida de Asahi en ti.

-"Qué?" preguntaste con las mejillas llenas

-"Jeje no, nada, solo me recordaste a alguien"

Tragaste y lo observaste, ibas a preguntarle a quien.

Pero no lo hiciste, no lo querías abrumar.

Solo le sonreiste y continuaron comiendo.

Una vez acabaron y ordenaron, comenzó tu recorrido por el lugar para que no te vuelvas a perder.

He's not bad - Asahi x Lectora (Beast AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora