Estrellas.

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El ruido de su zapato tocando repetidas veces el piso era lo único que se podía escuchar. Decir que estaba molesta era quedarse demasiado corto, estaba enojada y su nulo control de su tick en la pierna era una prueba de ello, también estaba el hecho de que escribía de forma muy desprolija, agarraba la lapicera como si estuviese a punto de romperla (ya se podía ver algunas una pequeñas grietas) y que cuando tenía que pararse a pensar la giraba en su mano. Ella no tenía la menor duda, todo lo relacionado a lo administrativo podía ser un dolor de cabeza. Y por más que lo odiase debía llenar varios papeles, debía hacerlo cada vez que trabajaba como heroína.

Todos los héroes después de una misión o una batalla debían llenar papeles, los cuales eran dados por la policía y debían completarse en el menor tiempo posible. Dependiendo de la gravedad del asunto son más o menos preguntas. Para mala suerte de la heroína, esta vez le tocó llenar más de 10 hojas, llenas de preguntas y de ambos lados.

Ya no sabía qué era lo peor. Las miles de preguntas que los periodistas le hicieron apenas terminó la pelea, que eran tantas que no sabía cuál o a quién responderle primero. El tener que quedarse hasta tarde rellenando todo ese papelerías, cuando en realidad sólo quería irse a su casa y comer esa bolsa de papas fritas que había estado guardando para una noche de películas. O el hecho de que el espacio que tenía para responder fuera tan pequeño, especialmente porque su letra era grande y más cuando estaba molesta.

Como ahora. Simplemente cerró un poco sus ojos y mientras respondía su mente divagaba a cómo es que se había metido en una pelea en donde tuvieron que evacuar a tantas personas, y tantos héroes se vieron involucrados.

Todo había empezado a la mañana, cuando la heroína Yari empezó a hacer su típico patrullaje. Lo hacía pensando que sería un día tranquilo, en donde podría patrullar sin ningún problema mientras comiera sus golosinas, hablando un poco con su mejor amiga por algún mensaje, viendo las tiendas de manga, firmando autógrafos de fans y ayudando a personas con sus problemas simples.

Esa era su rutina. La cual tenía mucho sentido, porque Japón era uno de los países con menor tasa de crímenes, y eso se debía a la presencia del símbolo de la paz. Por esa razón no había nada que la hiciera sospechar de que hoy sería un día diferente. Al final sí lo fue, porque el destino quería romper en esa monotonía.

Porque mientras caminaba en busca de su tienda favorita de mangas, vio a una persona actuando de una manera muy sospechosa, primero miraba a todos lados como si tuviera miedo de que alguien lo siguiera, sus ojos estaban abiertos de par en par y sus brazos al igual que sus piernas parecían gelatinas dela tanto que temblaban. Por eso Yari decidió seguirlo, en realidad no sospechaba nada de ese señor, solo quería asegurarse de que no tuviera un ataque de ansiedad o pánico.

O en el peor de los casos ambos .Y esa seguida terminó en algo muy diferente a como se lo imagino. Pues resultó que aquel señor estaba haciendo su primera entrega como vendedor de drogas, y el resultado de ese descubrimiento terminó en un caos. Una pelea en donde se vieron metidos muchos héroes (incluso algunos no eran de la zona y otros no tenían sus trajes), también muchos policías y bomberos, los cuales ayudaron mucho a evacuar a todos los civiles.

Cuando todo parecía haber terminado, cuando todos podían descansar, fue que empezó el infierno para la joven de marrones ojos. Primero fueron los miles de periodistas haciendo preguntas, ella realmente lo odiaba porque tenía un gran problema para tener conversaciones largas con desconocidos, además que su rostro inexpresivo siempre hacía que la gente se sintiera incómoda, sin mencionar que después su hermano le hacía bromas cada vez que salía en algún medio de comunicación.

Realmente lo odiaba, se ponía tan nerviosa que simplemente su voz no salía de su garganta y solo agradecía que su rostro siempre fuese igual, de esa forma sus nervios no se veían.Y continuó con el trabajo que en ese momento estaba haciendo. Los miles de papeles que debía llenar. 

Estrellas. «Hawks x Oc»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora