Carta:

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•Me despido querido Asami•

¿Quieres saber la razón por la cual siempre te pedí una cita?

Hace meses me detectaron una enfermera grabé.

No había salvación.

No había nada que pudieran hacer por mí.

Solo quedaba la espera.

Esperar aquel momento en el que dejaría este mundo para comenzar un viaje al eterno descansó.

Antes de irme lo único que quería era encontrar a mi primer amor.

Quería enamorarme.

Tener mi primera cita.

Tener mi primer beso.

Quería sentir aquellas mariposas en el estómago de las cuales todo el mundo hablaba.

Quería saber que se sentía que alguien aceleré tu corazón con solo una mirada.

Quería saber que se sentía amar a alguien.

Quería saber muchas cosas.

Quería vivir muchas cosas.

Comencé a soñar una vida contigo.

Y no sabes cuánto me reproche a mi mismo.

Era egoísta de mi parte imaginar todo eso aún sabiendo que me iría y no podría vivir nada de eso contigo.

Siempre respete el que quisieras a alguien más.

Yo solo quería un cita.

No te pedía que tú corazón latiera por mi.

Mucho menos pedía que te enamorarás.

Acepte el echo de verte feliz con otra persona.

Lo único que quería era verte feliz.

Lamentó tanto no darte la oportunidad de despedirme de ti como debe de ser.

Pero.

El tiempo ganó.

Mi quería amiga la muerte espero mucho tiempo por mi.

Siento mientras escribo esta carta como me envuelve con sus huesudos brazos.

Siento como su frío esqueletico envuelve mi cálido cuerpo.

Siento como me susurra que es hora de dormir por la eternidad.

Siento como me lleva.

Ya no hay tiempo.

Mi querido Asami.

Oh.

Cómo deseo decirte esas palabras de frente para ver tus hermosas expresiones.

Se feliz mi amado.

Te protegeré.

Seré tu ángel guardián.

Cuidare de ti.

Incluso aún lejos muy lejos de ti.

Siempre te cuidare.

Pd:Gracias por ser mi primer amor

Atte:Misaki


°

°

°

Asami tomo la carta y la llevo a su cara.

Sus sollozos eran amargos.

Le costaba pasar saliva.

¿Cómo podría ser feliz?

Aquella felicidad se fue.

¿Cómo pudo ser tan tonto?

¿Por qué no acepto la cita?

El chico tenía razón.

Solo le pedía una cita.

Era lo único que pedía.

¿Por qué se fijo en el?

¿Por qué tenía que enamorarse de un cabron como el?

Apartó la carta de su cara y rápidamente tomo las tres.

Las guardo en el sobré.

Agarró la botella que estaba a medio tomar.

Se adentro a su departamento.

Fue hasta su pequeño despacho que tenía ahí.

Al entrar vio tres cuadros colgados ahí.

Eran fotos de el con aquella persona.

No lo resistió.

Agarró los tres cuadros y sin cuidado saco las fotos de ahí remplazando las fotos por aquellas cartas.

Las fotos fueran desechas.

Las cartas fueron guardadas con delicadeza.

Una vez que estaban colgadas el hombre suspiró.

Agarró la botellas y tomo directamente de ella.

Tenía que calmar ese dolor.

Ese vacío que le provocaba la ausencia.

La ausencia de una bella voz preguntando siempre lo mismo

¿Quieres salir conmigo?

¿Quieres salir conmigo? (AsamixMisaki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora