Verte de nuevo

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Zoe Fernández Gallardo

Me desperté, por lo general lo primero que hago es maldecir mi vida; pero hoy es diferente, hoy podré verlos de nuevo.
Me senté en la cama observando todo mi cuarto, no vería todo eso por 4 días. Mientras pensaba en lo bien que se sentiría volver a verlos, unos encantadores gritos entraron a mi habitación a toda velocidad.
-mami, mami, mami!!!
-mamá,mamá!!
Ambos niños se aventaron a mi cama, les di un beso a cada uno en la frente, para empezar a interrogar a los pequeños.
Zoe: ¿cómo durmieron pequeños?
Alex(4 años): a mi me costó dormir pero al final lo consegui- dijo de forma triunfante haciendo que se dibujara una sonrisa en mi cara.
Andrés(2 años): yo me he dormido apenas me acosté- dijo en pequeño mientras se acurrucaba a un lado de mi.
Zoe: Y...¿dónde está su padre?
Ser: Aquí- dijo mientras salía del baño con el cabello mojado- buenos días cielo- dijo acercándose a mí para darme un beso en la frente- ¿Hoy no tienes náuseas?
Negué con la cabeza, me levanté de la cama, me dirigí al baño, para bañarme y alistarme para mi vuelo, una vez lista tome mi maleta y antes de salir de la habitación un movimiento brusco hizo que me diera la vuelta
Ser: Creíste que te irías sin despedirte
Zoe: No, bueno en realidad sí- contesté algo nerviosa
Ser: ¿Estás segura de viajar? Tienes un mes de embarazo y...
Zoe: Va a ser su cumpleaños número cinco, tengo derecho a estar con ella- dije rápidamente antes de que siguiera
Ser: Está bien- dijo mientras se acercaba lentamente a mí- pero recuerda que... Ya eres mía- beso mi cuello.
Eso era algo que tuve en claro desde que firme ese maldito contrato, yo era suya, malditamente suya.
¿como carajos fui tan estúpida para volver este maldito infierno?

***

Ya estaba en el coche rumbo al aeropuerto, mis dos hijos estaban junto a mi. Ambos niños odiaban que yo viajara cada año, al llegar bajamos del coche y mis hijos me rogaban con lágrimas en la ojos que no me fuera.
Zoe: ya no lloren mis niños- dije mientras los abrazaba- ya saben que mamá va a volver
Alex: pero no es justo- me abrazó más fuerte- ¿Por qué papá no nos deja ir a conocer a nuestra hermana?
Andrés: mami no te vayas
Zoe: mis niños- besé sus cabecitas- les prometo volver pronto- ellos me abrazaron y subieron de nuevo al auto para desaparecer en la oleada de coches.

Juan Pablo Villamil

Me levanté debido a unos brincos que sentía a un lado de mí
Car: papá levántate- dijo feliz- hoy llega mamá- suspiré frustrado
Vi: yo voy princesa- escuche que tocaron la puerta- adelante
Car: Adriana- mi hija bajó de la cama para abrazarla
Adr: hola mi niña- la cargó y besó su coronilla- Villa hoy tienen que ensayar, así que apurate para que no lleguemos tarde
Caro: hoy llega mi mamá- dijo nuevamente
Adr: entonces con mayor razón hay que apurarnos- me volteo a ver- voy a vestir a Carol y espero que tú te arregles y no te quedes horas hablando por teléfono con tu novia
Vi: si está bien- dije rendido- pero ya salgan para que pueda cambiarme- ellas obedecieron y salieron rápidamente de mi cuarto.

.

Cuando termine de arreglarme salí de la habitación y fui a la de mi hija, la cual se encontraba sentada en su camita rosa mientras que Adriana la peinaba, Adri se había convertido en una gran ayuda para mí, siempre me ayudaba con Carol y se lo agradecía mucho, aunque en estos últimos meses no tuvo que preocuparse tanto ya que ahora quién me ayudaba era Dulce, la conocí en un café hace un año y medio, ella se ha comportado de la manera más amable y siempre a cuidado a Carol como si fuera su hija, lamentablemente nunca ha podido conocer a Zoe en persona pero este vez ella consiguió tener estos días libres para poder conocerla, estoy nervioso ya que no sé cómo decirle a Zoe mis planes con Dulce.

Adr: listo princesa- anuncio con una sonrisa- ahora ve a guardar tus cosas para irnos- mi hija obediente tomó algunas cosas y las empezó a guardar en su mochila de Dora la exploradora.
Vi: gracias- Adriana sonrió
Adr: ¿Cómo crees que Zoe lo tome?
Vi: no lo sé- suspiré frustrado- espero que lo tome de la mejor manera
Car: estoy lista- dijo la pequeña mientras me extendía sus brazos para que la cargara
Vi: bien- la tomé en mis brazos- vamos a trabajar.

²Tu Felicidad Será La MíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora