¿Fue un error amarte?🥀 [INTENABO]

🥀XVII🥀

Llegó la mañana, el rubio se despertó desorientado y algo despeinado, y cómo no, la noche anterior había tenido algo de acción.

Volteó a ver a su costado, Jack ya no se encontraba

—"Se fue a la comisaria, supongo".— pensó.

Se levantó de la cama, buscaba su ropa prenda por prenda, ya que solo la tiraron a "lo pendejo" anteriormente.

Gustabo buscó una toalla y se metió a darse una ducha en el baño de la habitación, ya habían llegado a esa confianza, aunque Gustabo no necesita confianza de la otra persona para hacer lo que se le plazca en casa ajena.

Se cambió y se puso un poco de la colonia que Jack le había comprado para esas ocasiones en las que el rubio se quedaba a dormir.

Salió de la habitación, más fue su sorpresa al ver al mayor desayunando en la cocina.

—¿No vas a ir a comisaria hoy?—

—Ah si, buenos días, cariño.— Contestó con sarcasmo, haciendo reír a Gustabo.

—Buenos días, viejo.— Dijo acercándose a él y dándole un beso en la mejilla.

–Tú comida está en el microondas, come.— Decía mientras se levantaba para lavar su plato.

Gustabo obedeció y puso su comida en la mesa dispuesto a comerla, olía muy bien, aunque ya no le sorprendía lo bien que cocinada su pareja.

—¿Te puedo hacer una pregunta, Gustabo?.— Habló el mayor detrás de él, mientras lavaba el plato en el cual había comido.

—Claro.— Contestó para luego llevarse el tenedor con comida a la boca.

—¿Estás dispuesto a trabajar como madero?.—

La pregunta hizo que Gustabo se atragantase, la verdad es que solo quería el trabajo para estar más tiempo junto a él... Pero de lo contrario, le asqueaba el trabajo de policía.

—Jack... Sabes que no me siento listo, estoy bien trabajando como chivato por el momento.— Contestó, si bien Gustabo quería estar junto a él, algo le impedía aceptar trabajar para hacer "lo correcto" o tal vez no es algo, si no alguien...

—Que alivio.— Suspiró Jack, recostando los brazos en la isla de la cocina.

—¿Cómo qué "que alivio"?— Preguntó Gustabo, claramente ofendido, hasta dejó de comer y se le fue por completo el hambre.

—Hombre, apenas puedo protegerte ahora, me será más difícil si te metes de madero.—

—No soy un niñito para que me protejas siempre, ¿me crees inútil?.— "Joder, ¿apenas te das cuenta?" Habló una voz en su cabeza.

—No te creo un inútil, te creo un irresponsable.— Habló poniéndose firme en con los brazos cruzados, retandolo.

-"Él no es tu padre, Gustabo"- Habló nuevamente esa voz.
—Tú no eres mi padre, para que me estés hablando de esa manera, gilipollas.— Estaba molesto y esa voz, no ayudaba en nada.

—Gustabo, por dios, solo estoy hablando una realidad.—

—Yo viví en las calles, sobreviví ¿y sabes cómo? Exacto, solo... Sin tu jodida ayuda.— "Termina con este subnormal, Gustabo, tu eres mucho para él".

Pero... No pudo hacerlo, Gustabo no podía ver nada, solo veía oscuridad.

—¡Gustabo, aquí hay mafias peligrosas, y sabes que están detrás de mi!— Habló levantando la voz, los dos estaban molestos.

—¡Por ser un jodido subnormal y toca pollas, fastidias a todo el mundo! "¡AY!, MIRENME SOY JACK CONWAY EL SUPERINTENDENTE, OBEDECEME O TE VAS A LA PUTA CARCEL", Pfff si claro. No eres el puto rey del mundo.—

—¿Por qué no te vas de mi puta casa?— Tensó su quijada, se estaba tragando todo lo que quería decirle, no quería herirlo.

—Awww, ¿te quedó el saco?.— Con una cara de arrogancia lo miraba a los ojos, retándolo.

—A ti te va a quedar la puta porra bien marcadita en toda tu cara de mierda.— Susurró.

—¿Lo ves? Te crees el puto amo, y no lo eres... Fue un error amarte. Nos vemos, gilipollas.— El rubio se dio la media vuelta y empezó a caminar a la salida

—¿Cómo que fue un error amarme? ¿Estás terminando conmigo?.— Preguntó claramente enojado, ofendido, herido, muchas emociones a la vez.

—Te crees el puto amo y no sabes analizar unas simples palabras... Menudo gilipollas.— Dijo para salir por la puerta he irse, dejando al gran Jack Conway, por primera vez, sin palabras.

...

—¿D-dónde estoy?— Preguntó despertándose, estaba en un lugar oscuro, le recordaba a esa terrible vez... Quería luz, la necesitaba.

Se sentó en el lugar donde estaba, y buscó rápidamente su celular, tenía miedo, estaba desesperado y angustiado, hasta que finalmente lo encontró. Le marcó a Horacio para que fuera por el, le mandó ubicación... Ya más aliviado, sintió un hedor terrible, dio unas arcadas, se tapó la nariz y la boca con la esperanza de ya no sentir ese olor, tomó su celular para investigar de donde provenía ese olor.

—¡AHHHHH! ¿¡QUÉ COJONES!?— Dio un grito de terror al ver varios cuerpos a su lado, en clara descomposición, estaba en una mina abandonada y aprecia la casa del terror.

Se acurrucó y comenzó a llorar, tenía miedo, necesitaba a Jack, a Horacio, a Segismundo, a Andre, necesitaba a sus amigos... Se sentía nuevamente solo y desprotegido, solo quería enterarse que no había sido él.

—¡Gustabo!— se escuchó una voz a lo lejos, voz que poco a poco se acercaba. El solo imploraba que fuera su hermano.

—¡Gustabo! ¡Mi niño! ¿dónde habías estado? Estaba tan preocupado.— Decía Horacio con algunas lágrimas, abrazando al menor.

Gustabo correspondió el abrazo gustoso, y también con lágrimas escondió su carita en el cuello de Horacio, el cual olía a la reciente colonia de flores que se había echado... Calmandolo por completo, hasta que escuchó la voz horrorizada de Horacio.

—G-gustabo... Tú...—

—No lo digas, no lo digas, por favor...—

—Vamonos de aquí, ven...— Lo tomó de la mano y salieron corriendo de ese lugar.

Se subieron al coche de Horacio, Gustabo tenía una ropa muy extraña.

—¿Desde cuando desaparecí?— Preguntó García, rompiendo el silencio.

—Hace cinco días, estábamos preocupados. La ultima vez que supimos de ti, fue por Conway... Dime ¿en serio terminaste con él?—

—¿Qué? N-no lo sé...— Preguntó agitando su cabeza, con la esperanza de que algún recuerdo regresara.

—Gustabo, no me digas que otra vez...—

🥀

Holis, el final está cerca amigxs.♡

Espero les haya gustado y perdón por la demora, pero los que me siguen saben el por qué.

Me despido, nnis.

.°BLUE°.