¿Fue un error amarte?🥀 [INTENABO]

🌹I🌹

Gustabo y Horacio recién llegaron a la ciudad, conocieron a Segismundo, un chico agradable que les enseñó como iba el rollo en la ciudad... Y vaya que no era tan bonito como ellos dos pensaban.

-Ostia, Segismundo... ¿Esa es una pipa?-

Segismundo asintió emocionado y empuñó el arma.

-Hombre si, que me la a conseguido mi primo.-

-¿Nosotros cuando conseguimos una, Gusnabo?- Dijo un Horacio emocionado y con ganas de tener una pipa en la mano.

-Pues cuando consigamos a alguien que nos venda, por el momento no, que no tenemos ni casa.-

-Tienes razón, por el momento Segismundo nos resguarda.- Dijo pasando un brazo en los hombros del mencionado para darle un abrazo.

-Claro que si, yo los cuido.- Dijo nuestro querido Segismundo mostrando una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Vamos a trabajar o qué? ¿Dónde están los basureros, Segismundo?- Preguntó Gustabo.

-Vamos los llevo.- Dijo el menor acercándose a un auto y forzandolo para entrar y encenderlo.

-Pero que ese coche no es tuyo.- Mencionó un Horacio un poco nervioso.

-No importa, suban. ¿O quieren ir caminando? Esta lejos he.-

-¿Te fías, Gustabo?- Horacio volteó a ver al mencionado.

-Pues no quiero caminar, Horacio.-

-Hombre, suban entonces.- Dijo un apresurado Segismundo.

-Vamos, Horacio, no perdemos nada.-

Horacio accedió un tanto desconfiado, pero se tenía que acostumbrar a delinquir.

Llegaron a los basureros y vieron a mucha gente ahí, vaya que estaba lleno.

Fueron a ponerse la ropa de trabajo dispuestos a ir a trabajar, y así lo hicieron, haciendo bromas, riendo y hablando de sus vidas anteriores antes de llegar a la ciudad, quedaron muy cansados por tanto trabajo que habían hecho y se fueron a guardar el camión de basura.

Al llegar había una discusión entre dos chicos, empezaron a golpearse, y todos se involucraron. Menos Gustabo, Horacio y Segismundo, ellos se fueron corriendo de ahí para evitar problemas.

-Nos empapelan, nos empapelan.- Decía Segismundo corriendo desesperado.

Gustabo y Horacio rieron por la cara que tenía Segismundo.

-Hostia, pero tranquilo hombre, que ya estamos en una edad.- exclamó Gustabo ya un poco cansado.

-Vale vale, paremos ahí y de paso compramos comida y bebidas.- Señaló Segismundo a una pequeña tienda.

Se dirigieron ahí, compraron comida, agua y powerades.

Al salir Gustabo se tropezó con un chico, haciendo que ambos cayeran al suelo.

-Ohhh, hostia terrible.- dijo Gustabo quejándose en el suelo.

-Pero mira por donde vas, payaso.- Horacio ayudo a Gustabo a levantarse.

-Perdón pero me vienen persiguiendo.- Dijo el chico levantándose y sacudiendo sus pantalones.

-¿Y por qué te vienen siguiendo?-

Iba a responder cuando fue interrumpido por otro chaval de pelo largo que venía corriendo hacia ellos.

-¡TRUJILLO HIJO PUTA, PÁGAME LO QUE ME DEBES!.-

-Tranquilo, Jhonny, te pagaré hoy en la tarde.-

-Es que me tienes que pagar chaval.- Dijo Jhonny acercándose.