Amor Ruso

Capítulo 38

Han pasado varias semanas desde que Sevastien y yo estamos en Rusia, han sido días interesantes.

Sin contar el buen sexo, claro

He aprendido el negocio de pies a cabeza y memorizado todo, acerca de cómo funciona este mundo.

Hemos practicado defensa personal.

Me patearon el trasero

Literalmente

Me he dado cuenta, que lo aprendí de defensa personal, no es ni la cuarta parte de lo que él sabe. Su voz me saca de mis pensamientos.

-Concéntrate, muñeca-

Asiento. Miro el objetivo y jalo el gatillo, varias veces hasta que escucho el sonido característico del cartucho vacío. Serguei, se acerca hasta donde está el objetivo.

-Otra vez, dio en el centro- dice asombrado- es el quinto en el día, que da al centro todo el cartucho-

Mi novio me mira, con curiosidad.

-¿Dónde aprendiste a disparar?- me pregunta – muñeca, tienes puntería innata. Ya casi no se ven, punterías así de perfectas-

-¿La verdad?- asiente- nunca había disparado y nunca había practicado-

Ambos hombres me miran sorprendidos ante mis palabras, como si no creyeran lo que acabo de decir. Serguei, niega incrédulo.

-Espera, ¿quieres decir que nunca habías disparado ni practicado con un arma?-

Niego, Sevastien, me mira mientras inquiere.

-¿Cuándo disparaste por primera vez?-

-Cuando me secuestraron- admito- pensé que había sido por la adrenalina lo que me había hecho darles, mezclado a que vi muchas películas-

Asienten. Suspiro.

-Luego en la fiesta, también pensé había sido por la adrenalina, pero ahora comienzo a dudar- reconozco, miro el arma en mi mano- es extraño, ¿no?-

Serguei y Sevastien, se miran entre ellos, como si se comunicaran telepáticamente.

-Puede que haya una explicación, pero suele ser muy rara- dice Serguei- por no decir, casi imposible de comprobar-

-¿Cuál?-

Sev, me mira.

-Has oído, que algunos hijos de cirujanos excepcionales, ¿heredan el mismo pulso y habilidad para operar que sus padres? ¿O que los cantantes famosos, también heredaron sus voces?- asiento- bueno, podría aplicarse algunas veces para nosotros los mafiosos-

Ladeo mi cabeza, Serguei, continua.

-Algunos herederos de los mafiosos más grandes, han heredado algunas habilidades de sus padres, entre ellas la puntería que tú posees- señala el arma- esa clase de puntería, la mayoría de las veces suelen ser de asesinos experimentados-

Los miro a ambos-

-¿Estás diciendo...?-

-Que hay posibilidades, que tengas sangre asesina corriendo por tus venas- dice Serguei- sería la única explicación viable, a tu puntería innata- señala los objetivos- ni juntando mis esfuerzos y los del idiota, obtendríamos estos resultados en nuestra primera clase de puntería-

-Entonces...-

Antes de que pueda formular la pregunta, Sevastien niega con la cabeza.

-No es posible, ella nunca fue de buena puntería- responde- siempre se mantenía al margen con los negocios de mi padre-