bambi [larry stylinson]

( 03 )

! tw: violencia doméstica.

•••

Harry exhaló aire con nerviosismo, Jack lo observaba con cierto desespero y clara impaciencia.

—Bebé ¿podrías apurarte? Tengo que ir a entrenar en un rato.

El trago saliva y dejo salir un último suspiro.

—Besé a alguien.

(Sentía el pulgar de Louis en su labio inferior, luego la palma de su mano acariciar su mejilla y descansar con delicadeza ahí. Lo observó acercarse, con la intención de probarlo nuevamente, de sentir aquella electricidad una vez más.

Y Harry lo dejó.

Louis unió sus bocas con suavidad, casi con miedo a lastimarlo, Harry casi podía sentir el latido de su corazón en sus oídos. Es lento, como si el tiempo se detuviera y solo existieran ellos dos, la punta de la lengua del futbolista roza la suya y se separan.

Labios hinchados y ojos brillosos. )

El pelinegro frunce el ceño, luego descruza los brazos y comienza a caminar hacia el más joven.

—¿Qué?—el aliento caliente a la pasta que acaban de comer choca con Harry. Jack comienza a respirar con pesadez y Harry puede ver una vena sobresalir en el cuello del hombre.— ¿Me engañaste? ¿A mí?

Entonces retrocede, Jack da un golpe en la pared a la altura del rostro de Harry.

—¿Con quién fue?—pregunta apenas conteniéndose

—No lo sé, estaba borracho y- no lo sé, lo siento, perdóname, por favor, Jack. Amor, perdóname, yo-

Lo toma del cuello con fuerza, presionando la palma en la garganta, cortándole el paso del aire.

—Te di meses de mi vida... ¿y así me pagas? Eres un imbécil.

Entonces lo suelta, Harry inhala con desesperación e intenta llenar sus pulmones lo más rápido posible. Comienza a llorar mientras se acerca al pelinegro.

—Por favor, perdóname.

—¿Cómo pudiste?—cuando sus ojos se conectan, el ojiverde puede ver que están vidriosos. —Yo te amo, Harry... ¿por qué... por qué me harías esto?

—No estaba pensando, por favor, perdóname, no volverá a pasar, te lo prometo. Por favor, Jack—pide en un hilo de voz.

El pelinegro se frota la cara con las manos y observa fijamente a Harry.

—Lo siento...—dice refiriéndose al cuello del más joven.— Es solo que... te quiero demasiado y- y pensar que puedas estar con alguien más... perdí el control, lo siento. Te amo, Harry.

Y así es como terminan desnudos en el sillón de Jack, sudor en la frente y jadeos ahogados. El pelinegro usa más fuerza de la necesaria, pero Harry sabe que lo merece.

Porque lo merece ¿verdad?

Engañó a Jack, con nada más y nada menos que su compañero de equipo y su mejor amigo. Dios, era una basura.

—Podría terminar contigo...—dice en voz baja mientras juega con sus rizos.— Pero te amo demasiado.

Harry lo abraza a modo de respuesta.

—Lo siento, Jack—contesta suprimiendo las lágrimas.

[...]

Harry llega al ensayo con un cuello de tortuga, Zayn levanta una ceja y se acerca a él.