¿Cosa del destino? - MLB

Confesión

Estaba sentada en mi cama, mirando con atención la foto en mis manos, aún no lo podía creer, tenía un pequeño ser creciendo en mi interior, Tikki revoloteaba a mi alrededor mordisqueando una galleta. Finalmente se posó a mi lado

-Le dirás hoy Marinette?- pregunta por fin.

-No quisiera pero, la verdad saldrá a la luz tarde o temprano... comenzará a notarse más y más ...-suspire- también tengo que decirle a mis padres...Tikki...

-Si?

-En los últimos ataques de akumas me he cuidado bastante en qué mi bebé no sea perjudicado, hasta cuando tú magia podrá protegerlo, digo si me golpeó en el vientre... ¿Qué pasara?- pregunto asustada.

-Como ya te he dicho, muy pocas portadoras han estado embarazadas aún combatiendo... es muy peligroso que recibas golpes, la magia no te protege del todo y en poco tiempo será aún más peligroso, un paso en falso y puede terminar muy mal- dijo preocupada- lo mejor será buscar una sustituta...

-¿Una sustituta? Pero.... Cómo?- lleve mi manos a la cabeza con frustración.

¿Habría alguien en quien pudiera confiar para que me sustituya durante más de 6 meses? ¿Alya? Y en todo caso qué pasaría con Chat?

-Un problema a la vez Marinette- Tikki interrumpió mis frustrados pensamientos- Primero debes resolver tu problema con A... él portador del Miraculous de la destrucción.

-Tienes razón... es que todo se volvió un caos de la noche a la mañana- frustrada me tire de espaldas a la cama aún con la foto en mis manos.

Después de un rato, me levanté de la cama y fui a mi escritorio a envolver una de las pruebas de embarazo.

No sabía cómo decirle sobre esto a Chat, en cualquier caso siempre puedo darle esto, no decir nada y esperar su reacción.

-Bueno Tikki es hora... -la mire y ella me regresó una mirada de confianza.

Me transforme en Ladybug y me fui de mi casa no sin antes llevarme él pequeño "regalo".

***

Cada segundo que pasaba balanceándome entre las calles de Paris los sentía eternos y demasiado rápidos al mismo tiempo.

A lo lejos veo a Chat impulsando se con su bastón revisando que todo esté bien.

Ya imaginé todos los escenarios posibles de su reacción, en el peor de los casos es que me dé la espalda y niegue a su hijo.

Finalmente llegamos a nuestro punto medio, estoy muy nerviosa.

-Bueno My Lady, todo parece estar en orden -suspira- supongo que podemos irnos...

-¡Espera!- lo detengo a punto de irse, este se voltea hacia mí sorprendido.

No es de extrañar su actuar, generalmente soy yo la que está ansiosa por irse, supongo que ya esperaba una acción mía de ese tipo.

-¿Que pasa?

-Yo... bueno...- titubeo- hay algo que...- inhalo aire intentando calmarme y continúo- tengo algo que decirte.

-Claro! dime, soy todo oídos- me dedico una sonrisa calmada.

-La cosa es que... yo se que debí decírtelo desde hace tiempo... la razón por la que te evitaba es por que paso algo que no me esperaba y bueno... yo no sabia que hacer y no sabia que harías tu al saberlo.... te lo quería ocultar pero al final comprendí que no era lo mejor y bueno yo... - sin darme cuenta comencé a hablar rápido y por lo visto sin tanta coherencia pues la cara de Chat era de absoluta confusión.