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– Itachi, gracias por defenderme ese día –

– Itachi, eres un gran hermano mayor y por eso Sasuke te quiere tanto –

– Itachi, te quiero... –

– Itachi... ¡Itachi ayúdame! –

– Perdón __ –

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¿Quien soy? Esa era la pregunta que se paseaba por la mente de la hija del cuarto Hokage, ___  era una pequeña de 7 años con las habilidades de su padre Minato Namikaze y con el temperamento de su madre Kushina Uzumaki , la pequeña crecio siendo una prodigio; a su corta edad ya se había graduado de la academia junto a otro prodigio pero este del Clan Uchiha, Itachi fue una buena influencia para la niña desde que se conocieron aunque él azabache al inicio fue un poco grosero con la pequeña pelirroja, ella logro acercarse a él mucho más que cualquier otra hasta el punto en que él la consideraba su amiga.

Pero nos estamos adelantando un poco, vamos a rebobinar hasta el día que se hablaron por primera vez, aquel día dónde todo cambio para ambos jóvenes.
En la academia no pasaba desapercibida, su cabello rojo atraía burlas constantes y según los relatos de su mamá a ella le pasó lo mismo pero no dejaba que eso le afectará ya que el motivo de ir a la academia era para ser una gran Kunoichi en el futuro.

Cuando llego al establecimiento la recibieron de la misma manera que todos los días "Tomate, tomate" la niña paso de ellos completamente siguiendo con su camino dirigiéndose a su asiento junto a Itachi Uchiha, lugar que el sensei le había indicado el primer día, las niñas comenzaron a mirarla de mala manera por el hecho de ser ella quien se sentara con Uchiha, no lo entendía no es como que Itachi era el ser más agradable siempre estaba con su rostro serio, "el hacer amigos no es mi motivo para venir a la academia __" suspiro recordando aquellas palabras, el azabache ni siquiera la miraba solo se concentraba en las clases, comenzó a jugar con sus dedos mirando el techo pero un jalón de cabello la hizo bajar la mirada.

– No me toques – se quejo empujando al niño –

» A mí tampoco me gusta pero es lo único que me queda para recordar a mamá «

Pensó ella mientras arreglaba su cabello con expresión seria mirando al niño, nadie notó a la persona que estaba mirando la situación con mucha atención, el pequeño Itachi estaba parado a un lado del niño con los puños apretados.

– Te dijo que no la tocaras –

¿Quien...? Quien se atrevía a defenderla, Itachi se paró delate de la pequeña para evitar que ella recibiera otro golpe haciendo que aquellos niños se marcharán murmurando bajo, el azabache volteo ayudando a la pelirroja a levantarse.

– Y-yo... – él la interrumpió

– Tu cabello es bonito – dijo comenzando a alejarse

La pelirroja jamás le había gustado su cabello y desde el ataque del Kyubi lo miraba con nostalgia, recordando cuando Kushina lo peinada con suavidad contando historias de su juventud junto a Minato, al oírlo decir eso no pudo evitar sonrojarse, desde la muerte de sus padres nadie le elogiaba su intenso cabello.

– Uchiha Itachi, Uzumaki __ – llegó el sensei – El Hokage está aquí para hablar con ustedes –

Ambos niños caminaron en un incómodo silencio mientras la niña recordaba las palabras de Itachi, él solo pensaba en el motivo por el que Hiruzen los buscaba, ambos destacaban de cierto modo y no sé metían en problemas, cuando llegaron fueron recibidos por la seria mirada del Hokage eso no dejo muy tranquila a la pelirroja "su sensei me dijo que eran muy buenos"  sus labios se movían de una manera lenta o así lo veían ellos por el estrés que les causaba aunque no lo dejaban ver "Serán los primeros en graduarse" ambos se sorprendieron al oír esas palabras pero se alegraron, ___ pensó en que si seguía así en un futuro podría cumplir el sueño de su mamá "Seré la primera mujer Hokage, Dattebane" con sus ojos cristalizados se alejo de la academia, corría lo más rápido que podía para llegar a casa donde Naruto esperaba la llegada de la pelirroja.

– Naruto – entro siendo recibida por un grito del pequeño – Lo se, lamento dejarte aquí pero ya no lo haré, bueno... No por tanto tiempo – lo cargo en brazos.

Los Uzumaki solo se tenían a ellos por qué aunque Hiruzen le prometió a su madre cuidarlos él nunca lo hizo solo les dió un pequeño lugar para vivir, ella tuvo que mendigar para tener algo para darle al pequeño, ___ no podía creer como la aldea le había dado la espalda luego de que su padre se había sacrificado para salvarlos, no pasaba una noche en la cual ella no llorara pensando en sus padres, en como haría con Naruto, ella apenas tenía 7 años.

– Mamá, Papá – miro por la ventana con Naruto en sus brazos – me gradué, me meterán a un equipo y algún día, seré Hokage. – sonrió llorando.

Roses •Itachi Uchiha x tú• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora