Mike y Ela estaban siempre juntos, excepto para ir a hacer sus necesidades. Siempre se apoyaban, más que nada Ela ya que Mike no podía mucho.
Por las tardes regresabamos a su casa, ya teníamos confianza y por eso me invitaban, a veces no iba pero cuando si realmente me la pasaba muy bien. No quedaba muy lejos pero el hecho de que Mike me agarrara el brazo como en una boda me hacía sentir muy bien, aunque llegaba a sudarme la mano por los nervios. Me estaba enamorando de Mike y la verdad es que ni siquiera yo se como le hizo porque desde que lo conocí llamo mi atención y me a defendido como si to fuera un niño chiquito, llego a notar nerviosismo cuando me habla y sinceramente me parece algo lindo y tierno, no se incluso llegó a pensar que realmente siente algo por mi.
_.¿Cómo eres?
_.Pues soy un poco más alta que tu y tengo cabello no muy largo pero tampoco tan corto, es un café entre claro y oscuro como el chocolate y mi compleccion es algo delgada
_.¿Cómo soy yo?
_.eres muy lindo si te soy sincera, tu cabello es muy suave, es un color casi como el mio pero mucho más claro y eres un poco más pequeño que yo además de que tienes una compleccion delgada
_.¿Y Javier, cómo es el?
_.Tiene cabello negro, ojos muy oscuros y un poco más alto que tu
_.¿Es lindo?
_.Ehh si, eso creo, ¿porqué preguntas?
_.No lo se
Me alegraba pasar tiempo con ellos dos, Mike me emitía una felicidad inmensa porque a pesar de no tener unos "ojos bonitos" la sonrisa de bonita le sobraba y Ela era demasiado linda conmigo como para no quererla.
Debo confesar que me comencé a enamorar de Mike, se me hacia lindo cada vez que lo veía y no evitaba sonreír cuando lo miraba. El único problema era que al parecer a Ela también le gustaba Mike, no quería lastimarla así que decidí no parecer un acosador mirando a Mike a cada rato como un enamorado.
_.¿Quieres que te mostremos nuestro juego?._ dijo Ela, creí que todo lo que hacían juntos me lo habían contado puesto que en los descansos siempre platicábamos sobre lo que más nos gustaba hacer.
_.Bien, ¿de que va?
_.Debemos escondernos en la habitación de Mike sin hacer ruido, técnicamente es para mejorar su sentido del oído
_.Vale, supongo que ayudaré
Sinceramente me gustaba mucho su habitación. Las paredes color amarillo pastel con sus sábanas negras y la gran puerta negra hacían un contraste muy lindo, además de que todo estaba muy ordenado, su escritorio y sus cosas estaban muy bien acomodadas.
Se hacia de noche y me estaba cansando, el colegio y los juegos más la tarea que había hecho siempre me dejaban cansado. En mi celular ya marcaban las nueve treinta y siete así que decidí avisarle a mi mamá que me quedaría con Mike no sin antes preguntarle a el si me podía quedar porque además de ser tarde para ir a mi casa estaba lloviendo, no muy fuerte pero si lo suficientemente para agarrar un resfriado y no pensaba enfermarme.
_.¿Quieres dormir en mi cama? Yo ire al sofá
_.No, tu duerme aquí, yo dormiré aquí en el piso a tu lado
_.¿Estas seguro?
_.Si, no te preocupes solamente necesito cobijas
_.¿te parece si te presto un saco de dormir? Solamente lo uso cuando voy a acampar con mi papá
_.¿Es cómodo?
_.Pff obviamente
_.Bien entonces lo usaré._ Esa sonrisa no paraba de gustarme, cuando reía parecía un niño pequeño.
Ela se había ido, nos dijo que tenía asuntos familiares, aunque yo la vi muy preocupada ella nos dijo que estaba bien y en lo que yo me quede platicando y jugando con Mike llegó la lluvia y la noche, fue por eso que me quedé. Incluso me mostró lenguaje de señas, dijo el que no lo necesitaba pero le gustaba aprenderlo. Su papá le iba diciendo que dedos levantar y como ppner la mano y así era como lo practicaba por lo que me enseñó y al fin pude sentir la calidez de su mano.
Su padre estaba trabajando y me dijo que los únicos días que se quedaba con el eran los fines de semana.
_.¿y tu mamá?
_.Se fue, no le gusto que yo hubiera nacido con esta discapacidad y nos dejo a mi y a mi papá
_.Que cobarde
_.Ya me da igual, con todo lo que eh logrado me doy cuenta de que no la necesito. Mi papá siempre me apoyo y me dio todo.
_.Me impresionas._ Siempre de hecho, era alguien al que no le importaba que opinarán los demás.
_.¿podrías voltearte o salir un momento si prefieres? Me voy a cambiar
_.Esta bien, me avisas cuando ya estés listo._ Me quedé recargado en la puerta de su habitación por fuera y no podía evitar sonrojarme, en tan poco tiempo me había dado tanta confianza que incluso ya podía decirme con toda normalidad que quería que saliera para poder cambiarse, en mi caso no hubiera invitado así de rápido a alguien a mi casa para empezar.
Creí que ya estaría listo, ya se había tardado pero lo único que escuche fue un golpe.
_.¡Mierda!
_.¿Pasa algo?._No me contesto y comenzó a reírse, abrí la puerta y lo vi tirado en el piso frente a la puerta riéndose, ahora si que tenía unas inmensas ganas de besarlo _.¿Qué te paso?
_.Por no ver donde piso me caí._ No entendía, acaso esos chistes de humor negro no le molestaban o es que tampoco le importaba el hecho de que estuviera tirado _.¿Javi? Sigues aquí verdad._
_.No te molesta que hagan bromas así._ A veces no quería parecer un estúpido con su inmensa compasión sobre personas "Más debiles" pero podía notar cuando la risa era fingida y la suya lo era.
_.¿Porque lo dices?._ Seguía tirado en el piso por lo que le tome la mano y lo ayude a pararse.

ESTÁS LEYENDO
Un Amor A Ciegas | Mikellino
FanfictionAU ; Miguel no podía ver y gracias a eso se volvió la decepción de su madre, Siempre fue esa oscuridad la que me mantenía en calma, la que me permitía escuchar y sentir la vida, la alegría y el amor. [ 𝘊𝘳é𝘥𝘪𝘵𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘭𝘰𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘴𝘰𝘯𝘢𝘫...