Mi ídolo, mi novio. (Maluma)

~38~

*Narra Maluma*

*FlashBack*

Llegando al hotel recibi una llamada que logro captar toda mi atención.

-¿Bueno?

-Que tal Juan Luis.

-Suegra -Sonreí- Me sorprende su llamada, ¿A que se debe? ¿Pasa algo?

-No no no descuida, todo está bien. ¿Recuerdas la sorpresa que le teníamos planeada a mi hija?

-Como olvidarla.

-Es sobre eso, quería preguntarte si aún sigue en pie, con eso de su noviazgo...

-Todo sigue en pie; nada cambia. Y aunque seamos novios se que se sorprendera mucho.

-Faltan solo 3 meses -Se escuchaba nerviosismo en su voz-

-Lo sé, tengo ya todo planeado.

-Enserio no se como agradecerte que vayas hacer eso, tengo que compensar lo que le hice a mi hija aquella vez que rompí su boleto; fue un momento de ira y se que anhelaba mucho eso.. claro antes de que se hiciera novios.

-No tiene nada que agradecerme señora, aunque su hija sea mi novia fue mi fan y la quería igual que a todas, daría mi vida por todas ellas, que mejor regalo que el que estamos apunto de hacerle.

-Mi hija no se equivoco al elejirte de idolo -suspiro- ¿Vendrás pronto por acá? Necesitamos platicar en persona.

-De echo voy llegando a Guadalajara.

-Oh ¡Qué sopresa! Anndy no me dijo que vendrías.

-De echo ella tampoco sabe, es una sorpresa.

-Hoy es el baile del año.

-Por eso vine -Sonreí nuevamente-

*Fin del FlashBack*

Abrí los ojos; hoy era el día. Hoy la volveria a ver y hoy sería el final de nuestra historia.

-¿Ya Listo?

Entro Manu a mi habitación y acaricio mi mejilla. Nege con la cabeza.

-El vuelo sale en 1 hora, creo que deberias ducharte; Te vez fatal.

-Mi barba es linda -trate de sonreír-

Nego con la cabeza.

-Pareces cavernicola.

-Soy el más guapo que haz visto.

Río y beso mi frente, suspire.

-Gracias por estár aquí.

Se encogio de hombros.

-Nunca te dejare solo.

-Me da miedo -Se corto mi voz- Lastimarla más de lo que ya la lastime...

-Eso es inevitable, el daño ya esta echo.

-Manu, la quiero deverdad.

-Ya no puedes solucionar nada, serás papá.

-¡Y no me arrepiento de eso! Pero no era con ella con quién yo quería formar una familia.

-De nada sirve arrepentirse en estos momentos. Y ya arreglate que se te hace tarde.

-¿Y si no voy?

-Tienes un contrato que cumplir.

Salío de mi habitación y entre a la ducha. El solo echo de pensar que se vería tan hermoza me dolía, nuncá superaria el gran amor que sentía por ella. Nunca.