𝙏𝙝𝙚 𝙎𝙤𝙣 𝙊𝙛 𝙀𝙫𝙞𝙡 // 𝙎𝙠𝙯

ᴜɴᴏ

- E-eso no es posible príncipe Lee - Dijo uno de los sirvientes con voz temblorosa.

- ¡¿Como que no?! ¡Yo soy el príncipe y yo decido que es posible y que no! - Yo solo miré de reojo a Lix para después suspirar, no fue un gran día...

- No, lo siento, eso podría dejar una mala imagen sobre el rei- -fue interrumpido por mi hermano.

- Y eso a ti no te debería de importar, yo soy el príncipe y tu solo un sirviente que sigue vivo de pura suerte - dijo mientras remarcaba cada palabra - Minho lo va a conseguir ¿verdad hermanito? - puso sus manos delicadamente sobre mis hombros, el era el único parado en la sala.

-Claro -simplemente asentí

-Bien -dió un pequeño saltito con una tierna sonrisa- todos vayanse, excepto Min -Su voz cambió al instante, ya era normal para mí. Todos se fueron al instante dejandonos solos- Lee ¿acaso estás mal por no tener la corona? - me miró con una sonrisa algo burlona.

-No, esto lo eligieron nuestros padres, confío plenamente en ellos - sonreí algo triste, ahora extrañaba a nuestros padres.

- ash que aburrido, nuestros padres ya murieron, olvidalos.

- ¿Disculpa? -lo miré confundido.

- Superalo, murieron y me dejaron el trono a mí y a tí te dejaron como mi sirviente más leal, deberías olvidarlos, dejaron en claro que no te querían -dijo burlón mientras caminaba por la habitación.

-Esos papeles no son reales Lee, deja de vivir en tu mundo y asume tu lugar como príncipe hasta que yo muera -Solté sin miedo a lo que dijera ya que el no me puede hacer nada.

- YA! esos papeles son reales para los demás, es tu palabra contra más de la mitad de nuestra familia

-¿Seguro? más de la mitad del reino no quiere tu coronación

Un fuerte ruido se escuchó en la habitación, fue Felix quién había golpeado la mesa y después se retiró del lugar, cuando el ya estaba afuera suspiré y me quedé sentado por un tiempo ahí.

No quería dejar a Felix solo, aunque nisiquiera podía, prácticamente debo estar con el todo el tiempo. Mientras caminaba por los pasillos de la mansión, me cruzaba con otros sirvientes los cuales me preguntaban si yo y Lix estabamos bien ya que escucharon el ruido proveniente del golpe que le dió lix a la mesa.

Había parado para ver un jarrón con unas hermosas flores rojas con las puntas blancas, esas flores le encantaban a Lix, una pequeña sonrisa se asomó por mis labios, se perfectamente la persona que es mi hermano pero siempre estaré de su lado, sirviendo como su fiel hermano y sirviente, apesar de que las cosas no deberían ser así originalmente.

"Tu sirviente fiel yo soy, hermanos de corazón...."