﹟₅ fantasy ; moguham

único

jungmo estaba a unos metros de distancia para entrar al instituto, miró melancólico aquel edificio y respiró hondo. entró tenso junto a un montón de chicos, algunos corrían para encontrarse con sus amigos, otros simplemente caminaban; no observó más al ver de reojo una silueta que segundos después se le lanzó encima. jungmo lo cargó, lo abrazó por la cintura mientras que él se recargaba en sus hombros y empezó a girar sobre su propio eje.

ambos se sonreían felices de verse el uno al otro después de mucho tiempo. el peli morado lo bajó delicadamente y miró su perfecto rostro, se acercó a sus labios y lo besó suavemente, sin prisa, un dulce beso que ambos necesitaban, aunque no se dieron cuenta en qué momento ese tierno beso se convirtió en uno feroz, sus lenguas jugaban entre sí, jungmo mordía el labio inferior de su menor sin pasión mientras que el chico de vez en cuando mordía el labio superior de él, se separaron en busca de aire y un milisegundo después estaban comiéndose la boca.

— ¡hyungs, no hagan eso! —chilló el menor de su grupo de amigos.

— ¡están en la entrada de la escuela y los miran raro! —el castaño los miró con asco— ni yo me comporto así con mi seongminie, que vergonzoso es ser su dongsaeng, ¿qué ejemplo nos dan? —dramatizó poniéndose la mano en la frente fingiendo que en cualquier momento se desmayaría. seongmin se acercó y lo besó en los labios.

jungmo gruñó sobre los labios de su chico.

— ¡dejen de joder!

— ay hyung, pero no se moleste —dijo seongmin sonriendo.

— ya, déjennos en paz par de idiotas —dijo mientras los fulminaba con la mirada—. mogu, hay que entrar —lo tomó de la mano y empezaron a vagar por los pasillos de la escuela.

algunos veían impactados a la pareja de chicos que ni siquiera miraban por dónde caminaban al dedicar a verse mutuamente.

— ¿en qué aula te tocó?

— adivina jinnie —levantó la hoja frente al rostro del peli rosa, él la tomó bruscamente y lo miró boquiabierto.

— por fin estamos en la misma aula —susurró.

— ¡lo sé!

ambos se dedicaron miradas satisfactorias y caminaron a su aula. al entrar las miradas no tardaron en posarse en ellos, jungmo caminó detrás de su chico y se sentaron juntos.

el peli morado le pinchaba las mejillas a wonjin con su dedo, mientras que el peli rosa miraba su celular, hasta que el estruendo en la puerta y la voz de uno de sus hyungs se hizo presente.

— ¡koo jungmo! —ambos chicos se miraron.

— ¿olvidaste contarle a hyung que volviste?

— era una sorpresa para ti —susurró encogiéndose en su asiento.

— te va a matar bebé —comentó divertido.

ambos dejaron de mirarse para ver a su hyung furioso.

— ¡¿por qué no me contaste que estabas aquí?!

— lo si-siento hy-hyung, lo olvidé.

— ya no olvidarás nada mocoso —levantó su mano listo para darle un buen golpe en la cabeza hasta que, a mitad de camino, alguien gritó.

— ¡allen no! —corrió hasta estar a su lado— cariño, ¿qué hacías? es tu mejor amigo.

— un muy mal mejor amigo —lo fulminó con la mirada para cambiar su semblante a uno meloso—. fuiste salvado por la campanita de mi corazón, serim —lo miró sonriéndole como tonto enamorado.