𝑵𝒐 𝒑𝒆𝒏𝒔𝒆́ 𝒒𝒖𝒆 𝒇𝒖𝒆𝒓𝒂𝒔 𝒕𝒖́... [𝐃𝐫𝐚𝐫𝐫𝐲/𝐇𝐚𝐫𝐜𝐨]

𝐗𝐕𝐈𝐈𝐈

2021. Un nuevo año, lleno de ¿Sorpresas?. No.

Enero, pasó como un borrón. Los profesores creían que estaban más familiarizados con la educación virtual, por lo que enviaron tareas y trabajos todos los días y debían entregarla la semana siguiente son excepción.

Y los jodidos maestros tenían el descaro de finalizar el anuncio con un «Feliz inicio de año escolar».

No pudieron hablar mucho entre ellos, se despertaban muy temprano y se dormían tarde por las actividades. Molly estaba preocupada por las ojeras en el rostro de sus chicos por lo que trataba de ayudarlos.

Draco había hablado con sus padres, explicándoles sobre la situación su novio y pidiéndoles ayuda para encontrar ayudar a Harry.

Lucius al escuchar los detalles del abuso a su yerno, sintió enojo y asco, estaba impresionado por tales personas. Esas personas eran aquellas que no merecían ser perdonadas, no podía imaginar a el mismo maltratando o lastimando a alguien más, menos a un niño.

Narcissa sintió un dolor en su pecho, una presión en su corazón latente. Ella siempre fue una persona humilde y amorosa, nadie merecía ser maltratado y creía firmemente que los niños son ángeles inocentes. Los tíos de su yerno eran despreciables, no podía encontrar alguna razón por la cual hicieran tales actos y simplemente los odió.

Luego de hablar, encontraron una solución para ayudarlo.

Por lo que esa mañana, Draco y Harry estaban en el patio de la mansión caminando de la mano. Era fin de semana y decidieron tomarse un día para olvidar la escuela. Lucius los observó orgulloso, esperaba que el plan de su hijo funcionara.

"Harry"

"¿Si?" El moreno dejó de mirar las rosas que habían florecido para ver a Draco.

"Sabes que dije que te tenía una sorpresa" tomó sus manos y le sonrió "Podrías empezar tus terapias con el psicomago"

Aquella noticia tomó desprevenido a Harry, quién observaba a su novio. No se sentía preparado para hablar sobre ese tema.

"Puedes empezar y te ayudaría mucho, podrías dormir bien y no tener pesadillas. Te ayudará a ser feliz"

"Eh..." No supo que decir ante la mirada ilusionada de Draco y como le sonreía "Está bien"

"¡Bien! Ven, sígueme"

Harry fue arrastrado por el rubio hasta entrar a la mansión, lo escuchaba decir muchas cosas atropelladas, sin embargo, no lograba entender nada. Llegaron hasta quedar frente a una gran puerta color crema, cuando Draco tocó y abrió la puerta se reflejó una amplia oficina iluminada con una estantería de madera lleno de libros, tres sofás verdes distribuidos estratégicamente y un escritorio negro delante una gran ventana dejando ver los árboles.

En el escritorio se encontraba sentada Narcissa Malfoy leyendo un libro mientras alzaba la tetera con su mano y la inclinaba virtiendo el té en una taza, gracias a magia no verbal y sin varita.

La rubia al observarlos se quitó los lentes para leer y les sonrió dejando el libro y la tetera de lado.

"Hola chicos"

"Hola mamá"

"Hola Sra. Malfoy"

"Dime Cissy por favor" señaló las sillas frente a su escritorio "Siéntate Harry"

"Adiós cariño, nos vemos después" Draco tomó su rostro dejándole un beso en los labios.

Y salió del lugar dejándolo pasmado.