capitulo - 7. Una Nueva Posición

1.1K 126 5
                                    

Narra Fluke

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Narra Fluke

Después de todas las compras, Ohm decidió que era suficiente por el día, y volvimos a la mansión. Bajamos del auto mientras algunas sirvientas y guardaespaldas recogían las bolsas con todo lo que habíamos comprado. Fue entonces cuando me detuve por un momento y observé la mansión desde afuera. No me había dado cuenta de lo imponente y hermosa que era.

Al entrar, Linda nos estaba esperando con una cálida sonrisa.

-¡Qué lindo y radiante estás! -exclamó emocionada.

-Gracias, Nana -respondí con alegría.

-Te dije que ese estilo te quedaría perfecto -comentó Ohm, abrazándome con cariño.

-Lo sé, y gracias por todo lo que me has dado.

-No tienes nada que agradecerme. Lo hago porque quiero que seas feliz, porque te quiero.

-Lo sé -le respondí, sintiendo un leve calor en mis mejillas.

Luego, ambos nos dirigimos al comedor para cenar. Mientras comíamos, Ohm me adelantó algunos planes.

-Fluke, mañana comenzará tu entrenamiento. También te presentaré a las personas que trabajan para mí.

-Está bien -respondí, un poco nervioso pero decidido.

Después de cenar, subimos a nuestras habitaciones para ducharnos y descansar.

Al día siguiente

Me desperté temprano y me arreglé rápidamente. Sentía la necesidad de moverme y ser útil, así que decidí bajar a la cocina para ayudar a Linda. Cuando llegué, la encontré junto con otras sirvientas preparando el desayuno. Al verme entrar, todas dejaron sus labores y se inclinaron para saludarme con respeto.

-Buenos días -respondí, inclinándome ligeramente en señal de cortesía.

Luego me acerqué a Linda, quien ahora era "Nana" para mí.

-¿Puedo ayudar?

-Yo puedo hacerlo sola, pero si quieres ayudarme, estaré encantada -respondió con una sonrisa.

Sin pensarlo, me puse a cocinar a su lado. La sensación de estar en una cocina, haciendo algo que me gustaba, era relajante.

Mientras tanto, Ohm estaba buscándome. No me encontró en mi habitación, así que preguntó a uno de los guardaespaldas.

-¿Has visto a Fluke?

-Sí, señor, está ayudando a la señora Linda en la cocina.

Ohm agradeció la información y se dirigió hacia allá. Cuando llegó, me encontró trayendo algunos platos al comedor.

-¿Qué haces? -preguntó con curiosidad.

-Estoy ayudando -respondí, acercándome a él con una sonrisa.

-No tienes que hacerlo. Para eso están las empleadas.

-Lo sé, pero me gusta cocinar. Quería hacer algo con mis propias manos.

Ohm suspiró, pero luego sonrió.

-Está bien. Si te hace feliz, puedes hacerlo. Ahora vamos a desayunar.

-Claro.

Un nuevo entorno

Después del desayuno, Ohm y yo nos dirigimos a una bodega que quedaba lejos de la ciudad. En cuanto entramos, todos los hombres presentes se pusieron de pie e hicieron una reverencia hacia Ohm.

-Señor -dijo uno de los hombres, acercándose-. ¿Qué lo trae aquí?

-Quiero presentarles a mi pareja -respondió Ohm, colocando una mano en mi hombro.

El silencio llenó la habitación. Las miradas de asombro eran evidentes.

-Él es Fluke, y a partir de ahora también será su jefe.

Todos hicieron una reverencia hacia mí. No sabía cómo responder, así que simplemente incliné la cabeza en señal de respeto.

Ohm caminó conmigo hacia una habitación donde estaban cinco personas que, a simple vista, parecían tener mayor rango que los demás.

-Buenos días, jefe -saludaron al unísono.

-Buenos días -respondió Ohm.

Una chica rubia, que parecía ser la más curiosa del grupo, fue la primera en hablar.

-Jefe, ¿quién es él?

-Les presento a Fluke, mi pareja -dijo Ohm con firmeza.

-¿Pareja? -repitió la chica, claramente sorprendida.

Ohm asintió.

-Sammy, él es Fluke. Es experta en sistemas y una de mis mejores trabajadoras.

-Es un gusto conocerte, Fluke -dijo Sammy, inclinándose con una sonrisa.

Ohm continuó presentándome al resto:

-Él es Kao, mi mano derecha.

Kao me saludó con una leve reverencia, pero su mirada de desagrado no pasó desapercibida.

-Él es Zee, uno de mis mejores sicarios.

Zee me saludó, pero había desconfianza en sus ojos.

-Él es Off, experto en armas de fuego.

Off fue más amigable y me dedicó una sonrisa al saludarme.

-Y por último, Boum, experto en combate cuerpo a cuerpo.

Boum fue cortés, pero mantuvo una postura seria.

-Es un gusto conocerlos a todos -les dije con una ligera sonrisa.

Aunque todos respondieron con educación, noté que Kao y Zee no estaban muy convencidos. Sus miradas de desconfianza eran evidentes. No los culpaba; era normal que no confiaran en alguien nuevo, y mucho menos en alguien que había entrado directamente a la cima.

Sabía que ganarme su confianza sería un proceso lento, pero estaba decidido a demostrarles que merecía estar a su lado. Después de todo, ahora era la pareja del jefe de la mafia Rosa Roja, y no podía permitirme mostrar debilidad.

Mientras Sammy hablaba animadamente conmigo, vi de reojo cómo Kao y Zee seguían observándome con cautela. Sin embargo, no dejé que eso me afectara. Mi prioridad era Ohm, y sabía que mientras él estuviera de mi lado, podría enfrentar cualquier cosa.

"Algún día, ganaré su confianza", pensé, decidido.



"Algún día, ganaré su confianza", pensé, decidido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



E buelto :D.

Recuerden botar y comentar 😎😁💓💓💓

















MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora