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Capitulo V

"Jamás desesperes en medio de las sombrías aflicciones de la vida, pues de las nubes más negras cae agua limpia"
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Cuando al fin termine de dejar a todos los alcohólicos de mis pretendientes, en sus respectivas habitaciones baje a despedirme de mis padres para yo subir a mi habitación, pensar en el hecho de que mañana será la ultima vez que veré a mis padres en 7 meses. Después de pensar por mucho tiempo decidí dormir.

Al día siguiente como de costumbre la sirvienta de los buenos días más amargos que el limón me fue a despertar, aunque desearía que no hubiera hecho, mis maletas ya estaban hechas y podía apreciar desde mi ventana como subían mis maletas al auto, opte por comenzar cambiarme para bajar a desayunar, pero... al llegar a mi armario no quedaba nada, empacaron toda mi ropa.

-Y ahora ¿que hago?-*No podía parar de dar vueltas por todo mi cuarto, cuando de repente vi que el conductor del auto que llevaba mis maletas se subió a este con la intención de arrancar lo que me saco de contexto por un segundo, hasta que pude reaccionar y darme cuenta que primero estaban llevando nuestras cosas pues también llevaban las maletas de los siete chicos que tuvieron llegada el día de ayer.

-¡ Esperen!-*gritaba mientras corría bajando saliendo de mi habitación para correr a las escaleras, causando que todos me observaran desconcertados, deteste esta casa por primera vez, no puedo llegar a la puerta.*

-¡Ada, pero que rayos haces vístete ahora mismo!-* grito mi madre furiosa.*

-¡Eso intento, se llevaron toda mi ropa!-* Le respondí gritando sin dejar de correr pues estaba muy cerca de la entrada principal, pero que le pasa a mi madre, ni siquiera me encuentro desnuda traigo puesta mi pijama de monja*

Cuando al fin llegue el auto se encontraba saliendo ya de la propiedad, todos estaban asomados a las ventanas y mis padres en la puerta, pude notar como esos siete alcohólicos se reían de mi desde la ventana, realmente había hecho el ridículo.

-Madre yo lo...-

-Calla, ya has hecho y dicho suficiente, entra a casa iremos a desayunar y después se marcharan como era el plan, aunque no estaba en el plan que te marcharas en pijama-*dijo mi madre dándose la vuelta para entrar a casa por lo que la seguí *

El desayuno transcurrió en absoluto silencio pues mi madre se encontraba molesta conmigo y los alcohólicos no salvaban de su coraje, pues todos hicimos el ridículo ante sus ojos. Terminamos todos de desayunar por lo que todos salimos de la casa y cada uno de mis pretendientes se dirigió a su respectivo auto pues todos nos iríamos separados, mientras ellos se subían a sus autos yo me despedía de mis padres quienes solo me sermoneaban de como debo de comportarme hasta que al fin se despidieron de mi con cariño, cuando al fin me despedí de mis padres intentaba hacer tiempo para no tener que irme, pero tenia que irme por lo que subí al auto que me esperaba.

Llevo 5 horas en este auto y 10 paradas en gasolineras pues los alcohólicos de mis pretendientes padecen de una cruda, suerte que no son ellos quien conducen los autos. Pasaron las 6 horas y aun faltaba una hora pues perdimos mucho tiempo con las paradas imprevistas. Llegamos al fin a la mansión Saratov, es gigante y muy hermosa, desde aquí puedo apreciar el jardín y es enorme y hermoso, lo recordaba todo mas pequeño. Los autos que habían traído aquí nuestras pertenencias ya comenzaban a irse lo que significa que nuestras ya están dentro.

Cuando todos bajamos al fin de los auto pude notar que mis pretendientes se encontraban muy mal, por lo que deduje que nunca antes habían tomado tanto en su vida, entramos a casa y nos percatamos que  nuestras maletas estaban en el recibidor y por mas que llamamos y buscamos nos dimos cuenta que en esta casa sólo estaríamos los 8, estábamos completamente solos lo que significa que la limpieza de esta casa dependerá de nosotros. 

-Hay que asignar habitaciones-*Dijo Michael mirándonos a todos*

-Ustedes asignen se sus habitaciones, porque yo ya tengo mi habitación-* Dije tomando mis maletas para comenzar a caminar*-Con permiso...-*dijo de una manera burlona*

Llegue a las escaleras de donde no pude pasar, por más que jale de mis maletas no pude subirlas más que tres escalones, cuando de repente vi como todos mis pretendientes comenzaban a subir las escaleras junto con sus maletas.

-Disculpen... alguno de ustedes podría ayudarme-*Dije formando una tierna sonrisa, pero ninguno me hizo caso*- A quien me ayude le dire cual es la habitación mas grande después de la mía.-

Cuando vi como Barnet bajo corriendo las escaleras y agarro mis maletas con mucha rapidez para que nadie más las tomara y comenzó a subir las escaleras con mis maletas en sus manos.

-Gracias por ayudarme Barnet, pensé que nunca podría podría pasar de las escaleras-*Dije sonriéndole de una manera dulce y nerviosa*

-No es nada, por cierto, quiero tu cuarto, dijiste que era el más grande así que quiero tu cuarto-*Dijo cuando terminamos de subir las escaleras*

-Barnet, pero...-

-Sin peros Ada, un trato es un trato-

-Esta bien Barnet-*Dije siguiéndole el paso a la habitación, pero que no fuera yo una de las obras de la fiesta porque a esas si las escucha *

Cuando llegamos a la habitación Barnet tiro mis maletas al piso y comenzó a recorrer el cuarto.

-¡Rosa! Toda esta habitación es rosa porque, no pudiste elegir un mejor color, no se un color neutro.-*Dijo Barnet con un pequeño tono de molestia en su voz pero cambió a uno de tristeza*-Me estafaste, me siento usado-*Dijo haciendo mas notorio su tono de tristeza*

-Barnet, que esperaba esta habitación se encuentra así desde que yo tenia 4 años, yo crecí en Moscú no aquí Barnet-*Dije excusando me de sus reclamos*

-Disculpen, alguien tiene una cinta métrica.-*Dijo Abdel asomándose desde el marco de la puerta*- Es para poder saber que habitación es más grande-*Dijo esto ultimo con una sonrisa que dejaba ver completamente sus dientes mientras cerraba los ojos*