¿ 𝘺 𝘘𝘶𝘦́? [ Dr. Flug | Villainous ]

"C I N C O"

PoV. Narrador

—___________________— te llamó tu consejero, al no haber respuesta por tu parte habló de nuevo —Eres la única que no ha terminado el trabajo.

Y sí, el aula estaba en total silencio, y los únicos que estaban ahí eran tú y él.

—¿Tan difícil está?— preguntó —Hasta Nora lo terminó.

Sin respuesta.

El mayor suspiro y se paró de su silla de escritorio, sin prisa se acercó hasta tu pupitre, tomo una silla de por ahí y la dejo delante de tu mesa tomando asiento en la recién dejada silla.

—Es de mala educación no responder cuando tu superior te hace una pregunta.

Comento serio.

Miro hacia tu mesa y solo tenías hecho el título del trabajo.

No te habías podido concentrar en estos últimos días, mirarlo te hacia sentir nerviosa y vulnerable, con mariposas en el estómago.

Podías superar un sueño, pero que comenzaran a ser diarios, no podías con eso.

Odiabas admitirlo pero verlo te daban ganas de abrazarlo, quitarle la bolsa y llenarle de besos la cara, repitiendo una y otra vez que lo querías.

No querías verlo a la cara, porque sabías que no era el Flug de tus sueños, era el real y él no tenía ningún tipo de interés por ti.

O eso crees tú.

—Sabes, mire en tu ficha que próximamente cumples años... ¿es eso? ¿Te abruma tu cumpleaños?

Levantaste tu mirada al fin.

—Entonces si es eso— dio por hecho que esa era tu preocupación —Cumples dieciocho ¿No es así?

Asentiste.

—Bueno, creo que te sientes así porqué prácticamente ya serán un adulto a ojos de la sociedad... aún que de adulta no tienes nada— murmuró para si mismo.

—No creo que eso me haga sentir mejor— decidiste seguirle el juego, era mucho mejor a que se enterara de tus verdaderos pensamientos.

Flug sonrió inconscientemente por debajo de la bolsa, al fin te había hecho hablar.

—A lo que me refiero, a todos nos puede aterrar la idea de seguir creciendo ¿Sabes? A veces me preocupa pensar que este año ya voy cumplir veintisiete.

—¿Veintisiete?— el mayor asintió.

—Sí, así que disfruta tu etapa, tus compañeros ya tienen dieciocho, eres la más joven de ellos, así que celebralo cómo si no hubiera un mañana— puso una mano en tu hombro que te erizo la piel.

—Sí...— asentiste y sonreíste, te hizo sentir bien pasar algo de tiempo con él.

—Ahora vete a comer, estoy seguro que no has desayunado nada, el trabajo queda pendiente.

Asentiste y saliste de ahí en dirección a la cafetería con una pequeña sonrisa, hasta que carburaste todo.

Te estaba dando confort.

—[¿Puedo ver?
Pues ya que]

—¡El correo!— llegó Nora a la cabaña con una pequeña caja de cartón que tenía algunos sobres y un paquete.

—Estupendo— mencionó Sara, Nora le pasó el paquete a la de lentes y ella con un brillo en sus ojos abrió la misteriosa caja —¡Sí!