Las niñas no se lastiman.
Las niñas son buenas.
Las niñas mantienen sus vestidos y moños arreglados.
Maquillan sus graciosos rostros y juegan, juegan, juegan.
No se encierran en cuartos, cementando el silencio.
No temen la luminosidad de un nuevo día.
Las niñas sonríen y son complacientes, graciosas, simpáticas.
Las niñas asienten y callan. Abren sus boquitas pequeñas y pintadas cuando el permiso es dado.
Las niñas son buenas, buenas, buenas.
Yo no soy una niña.
Soy una sombra, el desgaste de un cadáver al que la muerte no le llega.
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Los fragmentos olvidados de Ava Dare (Instantes perdidos #1)
Short StoryLuego de años sin rumbo ni futuro asegurados, Jonah por fin ha logrado establecerse en su nuevo hogar. Sin embargo, es en ese mismo lugar en el que una voz susurra historias de espanto. Historias que se entrelazan con la suya, con aquella que intent...