Amor explosivo💥 (T/N y Bakugo)

UN OSCURO PASADO

T/N: Tu Nombre
T/A: Tu Apellido
S/N: Su Nombre

Este capítulo contiene una narración diferente

.........................................................................

-Buenos días creo que ustedes tienen algo que nos pertenece.- Dice un científico con un parche en un ojo y la otra mitad de la cara quemada. ¡Es el señor Grendor!

Estoy muy asustada, demasiado, solo puedo temblar. Mi pasado me persiguió hasta mi presente.

-Perdonen, pero aquí no hay nada vuestro.- Defiende Aizawa.

-013, ven con nosotros, te llevaremos a casa.- Vuelve a hablar, haciéndome perder los nervios.

-¡¿Casa?! ¡Que vas a saber tu de casa!-

-013, no te conviene ponerte así, vendrás con nosotros.- Da una orden haciendo que los soldados avancen hacia mi, pero Bakugo se pone delante mía y toda la clase le imita para defenderme, a pesar de la confusión están dispuestos a luchar.

-¡Matasteis a mis padres, me secuestrasteis, tratasteis de usarme y experimentar conmigo! ¡Sois unos monstruos!- Grito llena de ira y tristeza, mientras Grendor pierde los supuestos nervios de acero.

-¡Se acabó! ¡ Tú, niñata, me arrancaste un ojo y me quemaste para escapar! ¡¿Y me llamas a mi monstruo?!-

-¡Nadie le habla así a mi prima!- Izuku se lanza hacia los soldados  al igual que Bakugo y Shoto.

-¡¡MUERE DESGRACIADO!!- Grita Bakugo.

Todos nos enzarzamos en una pelea contra los soldados que no paran de entrar. Evacuamos a todo el edificio y huimos hasta la entrada principal, en campo abierto les venceremos.

Tres soldados consiguen agarrarme. Este es el fin. Estoy desesperada, ¡no puedo volver!

Una especie de fuego azul abrasador me los quita de encima, y alguien me abraza. ¡Dabi!

Me protege durante toda la batalla todos los soldados caen y los científicos desaparecen.

-¿Estais todos bien?- Pregunto alterada.

-Creo que nos debes explicaciones señorita T/A.- Dice el profesor Aizawa.

-S-Si.-

-Además, ¿quién es él?- Dice Aizawa agarrando con una de sus cintas a Dabi.

-He venido a ayudar a mi novia, estaba paseando cuando escuché el caos.- Aizawa desconfiado le suelta, nos llevan a una sala de conferencias, Aizawa me pone al frente.

-Adelante, explícate.- Dice con la seriedad de siempre.

Con mi móvil busco toda la información.

-Al escaparme de ese horrible lugar, conseguí la contraseña de uno de los científicos. - Conecto el móvil a la gran pantalla y apago las luces. Proyecto las fotos del asesinato de mis padres, mutilados, fríos, sangrantes, bañados en su propia sangre.

-Os presento a mis padres, S/N (madre), S/N (padre). Fueron asesinados el dieciséis de agosto de hace dos años, casi tres. Después de asesinarlos me raptaron y me metieron en este laboratorio y experimentaron. Querían mi don, o dones, lo que sea.- Pongo las imágenes del laboratorio y un video, uno de los muchos que muestran las torturas. Todos me miraban horrorizados, le doy al play.

[EL VÍDEO]

Me muestra tirada en el suelo, en una esquina, temerosa, cuando abren la puerta. El doctor Grendor pasa junto a sus compañeros. Me agarran y me atan en una camilla, la cámara cambia a la de los pasillos por los que pasamos. Peleo por soltarme.
Llegamos a una sala con unas piscinas.  Me ponen un traje con pesos y me tiran a una de las piscinas mientras grito desgarrando mi garganta y caigo a la profundidad . Trato de romper el cristal en vano. Lucho por liberarme.

Tras estar dos días bajo el agua, vienen a liberarme al verme desmayada. Cuando me sacarán de la piscina y me quitan los pesos, abro los ojos y peleo contra los científicos,  pero uno le da a la alarma de emergencia.

Prendo fuego a la sala y los veo arder, me gusta y eso me asusta. Grendor viene a por mi, apagando las llamas que me cubren la mitad de la cara. Mis  instintos asesinos me mueven, me lanzo hacia él y con mis propias manos  le arranco un ojo. Grendor se retuerce de dolor yo huyo del laboratorio. Las cámaras  del exterior graban como estoy rodeada. El instinto me puede y exploto en una honda. Me desmayo y el  video se corta.

[FIN DEL VÍDEO]

Todos miran horrorizados, algunos lloran, otros están en shock.

-Uno de los científicos que se opuso a mi maltrato me recogió y me cuidó. Luego huí aquí para comenzar de cero. No sé cómo  lograron encontrarme. Pasé años en ese infierno.- Digo tratando de mantenerme firme.

-P-Pero, el otro día, t-tu también explotaste.- Dice Izuku desconsoladamente.

-El científico que me salvó dijo que desde aquella explosión solo sobreviviría a dos más. Y con la del otro día, ya solo me queda una. Si me vuelve a pasar, moriré.- Me miran aún más horrorizados.

Bakugo se levanta y se va. Su intervención me duele profundamente. ¿Por qué es tan idiota? ¡Maldito bipolar!

Me hacen preguntas sin cesar tratando de comprender mejor mi situación. Dabi por otro lado no parece impresionado. Es extraño, pero supongo que cada uno reacciona a su manera.

Suspenden el resto de clases, asi que vuelvo con mi preocupado e impresionado primo, ya que Dabi se tiene que ir a su casa.
Mi primo, solo mira al suelo en silencio, su silencio me incomoda.

-Por favor Izuku,  háblame.- Le suplico.

-¡Lo siento! Siento mucho no haber estado para ti.- Lágrimas empiezan a caer por sus mejillas. Le abrazo.

-No te culpes, no es tu culpa, por favor no lo hagas.- Estamos abrazados un largo rato, luego continuamos caminando hacia casa. Izuku me convence de que lo más justo es decírselo a mi tía.

Cuando llegamos a casa, siento a mi tía y le cuento todo.
Mi tía intercambia expresiones, de confusión a tristeza, de tristeza  a impresionar y de impresión a horror.

Me abraza llorando desconsoladamente.

-¡Lo siento!- Chilla entre sollozos. ¡De tal palo tal astilla!
La consuelo y le digo lo mismo que a Izuku.

Pasamos el resto del día en familia, supongo que es más una forma de que yo les haga sentirse mejor a ellos, que que ellos me hagan sentir mejor a mi.

(...)

Tras la cena, trato de llamar a Dabi, pero no me contesta, así que me acuesto entre las suaves y cálidas sábanas, quedándome plácidamente dormida.