Amor Real | Jenlisa MiniFic

CAPÍTULO 1

— D-disculpa por haberte traído hasta este punto, Lisa — tosío a la vez que aquel enfermo hombre recitaba sus palabras en aquella fría cama

El rey de Tailandia, Kunpimook Bhuwakul, estaba muriendo por pulmonía

Su esposa, la reina de Tailandia, Lalisa Manoban sostenía su mano al costado de la cama, la mano restante era sostenida por Sunoo, el príncipe de aquel castillo quién lloraba por estar a punto de perder a su padre

— No me agradezcas Bam, cuidaré de tu castillo, de tu población y de tu hijo, lo prometo... — Lisa dejó un beso en la mano fría de aquel hombre, su pecho dolía al saber que su gran amigo ya no existiría a partir de esa noche

— C-cuídate mucho, hijo... ojalá c-conquistes el corazón de aquel muchacho, el hijo de la cocinera... — tosío fuerte para regalarle una sonrisa al final

— P-papá... tú... — el jóven príncipe no sabía que su padre estaba atento a aquello

— E-estoy orgulloso de ti, Sunoo... — Kunpimook tomó las manos de las personas que tenía frente a él, llorando con sentimientos tristes — S-siempre... — tosío — S-siempre los amaré... — recitó en un último aliento antes de cerrar los ojos en profunda oscuridad, no sin antes de llevarse el recuerdo de los rostros de las dos personas que más ama

— ¡PAPÁ, NOOO! — Sunoo se aferró al cuerpo de su difunto padre, gritando toda la tristeza que sentía en ese momento

— Descansa en paz, Bam... — la reina se limpió una lágrima traviesa de su mejilla, dejó un beso en la frente fría y pálida del difunto

Salió dejando solo a Sunoo con su padre para ir a comunicar que su esposo, el rey había muerto.

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Lalisa era la princesa de un pequeño pueblo cerca de Tailandia, creció siendo arrogante y grosera, maltrataba a sus sirvientes porque así se lo habían enseñado sus padres

La princesa Lalisa, de edad de diez años, conoció a un joven príncipe de quince años en una fiesta real, nunca había tenido amigos porque se la pasaba encerrada en su castillo cumpliendo órdenes

Kunpimook en cambio era amable y sonriente, todo lo opuesto a Lalisa, la pequeña lo opodó "Bambam" porque era realmente fuerte, solo ella podía decirle así

Bam le enseñaba a Lalisa a comportarse mejor y ella disimulaba que aprendía pero al final del día, le daba igual la amabilidad

Lalisa estuvo apoyandolo en el entierro de los padres del príncipe Kunpimook, ese día el jóven de dieciocho años quedó destrozado, este día también supo que Lisa era su ángel guardián

La tristeza duró poco cuando Bam, para no sentirse solo en aquel gran castillo y con tantas responsabilidades, decidió adoptar un pequeño niño, Sunoo llegó a sus brazos a la edad de tres años, aquel pequeño le trajo grandes sonrisas

Lalisa y él lo cuidaban como si fuera su propio hijo, Sunoo empezó a decirle mamá a una Lalisa de catorce años

Lalisa amaba a Kunpimook como un hermano, el le enseñó muchas cosas que sus padres nunca le habían hablado, estuvo a su lado cuando sus padres se iban por días a otros lugares con sus mandatos reales

Cuándo creció, no le gustaba cuando tenía que asistir a reuniones con la corte real para tratar algunos asuntos, pero al final del día Kunpimook esperaba de la mano del pequeño Sunoo para divertirse en un gran arroyo rodeado de árboles lejos del castillo que habían encontrado una de las tantas veces que salieron de sus aburridas vidas hacia el bosque