Spicy One Shot.
Contenido +18.Besos, lamidas, mordidas, roces, comentarios subidos de tono, placer.
A las cosas que se pueden llegar con tan solo pasarse de copas, y esto, fue claramente lo que le pasó a nuestra querida pareja.Luca y Edgar habían sido invitados a una fiesta que daría Demi en la noche, la fémina estaba de cumpleaños y se había decidido a celebrarlo junto a todos sus amigos.
La fiesta se daría en la casa de la cumpleañera, una casa realmente espaciosa.Finalmente llegó la noche y la pareja se encontraba camino al lugar, su transporte era una motocicleta que Luca había comprado hace poco, sentía que era algo necesario ya que la galería de arte de su novio estaba considerablemente lejos del domicilio de ambos y no permitiría que su querido Eddie caminara tanto.
Al llegar fueron recibidos por la fuerte música proveniente de la casa, Demi les abrió y les dio la bienvenida, les dio paso libre a servirse lo que quisieran, pues según ella, hoy la casa invita.
Luca estaba decidido a no beber, puesto que tenía que llevar a su novio a casa y claramente no podía manejar si había bebido, en ese aspecto era alguien muy responsable, nunca se perdonaría si algo le pasaba a su novio. Le dijo a Edgar que podía beber si así lo quería, que el no beberia para llevarlos a casa, cosa que el ojiazul agradeció.El de menor estatura asintió con la cabeza y besó con suavidad los labios de su novio, acto seguido se adentró en la fiesta para ir a buscar a Victor y a Galatea, ya que tenía entendido que ellos también iban a estar en la fiesta y se llevaba muy bien con ambos.
Luca por su parte se dedicó a buscar a Tracy, su mejor amiga, que a todo esto, estaba en el jardín arriba de un toro mecánico, se notaba que ya había empezado a beber. El castaño solo se acercó riendo mientras saludaba a su querida amiga.
El tiempo transcurrió con normalidad, hasta que llegó la hora de los bailes, la mayoría estaba ebrio, Luca aún no, el mantenía su postura acerca de no beber.
Entre el grupo que salió a bailar en el jardín se encontraba Edgar, completamente borracho, pero se le notaba bastante contento. Luca sólo sonrió y se quedó a ver como bailaba su novio, hasta que pasó algo que lo hizo enojar de verdad.
Cabe recalcar que Luca no es alguien celoso, pero si se llegan a pasar con su novio, se vuelve un poco agresivo.
Y este era el caso, Kevin se había acercado peligrosamente a bailar con su novio y bueno, Edgar no estaba en sus cinco sentidos por lo qué sólo sonrió y le siguió el baile a Kevin.
En un movimiento, Kevin bajó su mano hasta la cadera del más bajo, eso hizo que Luca estallara. Tomó uno de los vasos que habían a su lado y lo bebió de un trago, sin saber que este contenía tequila cargado. Se acercó a Edgar y empujó a Kevin, lo miró con desagrado y se llevó a su novio escaleras arriba. Se metieron a uno de los muchos cuartos que habían en la casa y solo apoyó su espalda contra la puerta, cerrandola con seguro tras de si, cerró los ojos por un momento y al abrirlos, el de menor estatura estaba frente a él, mirandolo con una sonrisa burlona.
– ¿Estás celoso, Luca tontito~?
– ¿Que quieres que te diga, Eddie? Solo yo puedo tocarte y ese bastado se atrevió a hacerlo.
– Entonces, demuestrame que solo tu puedes hacerlo, Luca Balsa.~
Solo esas palabras bastaron para que el de mayor estatura lo acorralara contra la puerta, uniendo sus labios en un profundo y apasionado beso, que poco a poco se fue volviendo más necesitado y salvaje.
A Balsa le estorbaba la ropa del ojiazul, por lo que se la quitó con rapidez, deleitandose la vista con el hermoso y pálido cuerpo de su novio, por el cual empezó a depositar besos y lamidas, además de una que otra mordida, cosa que le sacaba leves gemidos al más bajo. Sentó al ojiazul en la cama y descendió hasta su regazo, acarició el miembro del más bajo por sobre su ropa interior y se mordió con suavidad el labio inferior al notar las maravillosas expresiones de placer que hacia su novio.– L-Luca.. Demuestrame que s-soy tuyo.
– Te lo demostraré y se lo demostraré a todo aquel que esté en esta casa.
Sin más, tomó el miembro de su pareja y comenzó a masturbarlo, el ojiazul sólo gemia y se aferraba a las mantas, su espalda estaba ligeramente arqueada y sus rojizos labios, estaban levemente separados, dándole paso a esos gemidos que Luca encontraba tan maravillosos.
No pasó mucho hasta que el más bajo llegó al orgasmo, acompañado de pequeñas maldiciones y uno que otro gemido.
Balsa, dio una lenta lamida a su mano, quitando todo rastro de semen que había quedado en esta, el castaño claro, solo lo miró con un notable sonrojo, mientras jadeaba con suavidad, aún recuperándose del reciente orgasmo.
Tras ordenes del más alto, Edgar se puso en cuatro, mientras Luca se encargaba de dilatar la entrada de su novio, lamiendo esta, para luego meter un dedo, y pasado unos segundos, otro dedo más, los movía dentro del chico, haciendo movimientos variados, que solo hacían que Edgar se sintiera cada vez más cerca del cielo.
– ¡L-Luca~! Es d-demasiado..~
– Lo haces realmente bien, Eddie, tu solo disfruta.~
El castaño oscuro solo bajó sus pantalones junto a su ropa interior y se preparó para entrar en el castaño claro, pero justo antes de hacerlo, tocaron la puerta.
– ¿Edgar, estás aquí? Te estaba buscando desde hace un rato.
Luca supo inmediatamente a quien pertenecía esa voz, nadie más que Kevin Alonso, esto solo lo hizo molestarse más y embistió con algo de rudeza a Edgar, había entrado de golpe, por lo que le sacó un fuerte gemido al más bajo.
– ¡A-ah! M-mierda, Luca.
El castaño oscuro solo siguió penetrando con rudeza al ojiazul, sacandole fuertes gemidos, Kevin se fue inmediatamente por lo que Luca siguió sin problemas.
El fuerte ritmo era algo que a la pareja le gustaba, les gustaba tener sexo de esa manera, en especial al más bajo, que por más inocente que pareciera, no lo era para nada.
Siguieron así dos rondas, hasta que cayeron rendidos en la cama, el pintor tenía apoyada su cabeza en el pecho del inventor, este acariciaba sus cabellos con suma delicadeza, apreciando la suave textura en sus pequeños rizos. Edgar miró a su novio y solo habló.
– Eres un celoso, Luca Balsa.
– Pero aún así me amas, Eddie.
– Por desgracia, tienes razón.
ESTÁS LEYENDO
𝑃𝑎𝑖𝑛𝑡𝑒𝑟 𝑎𝑛𝑑 𝑃𝑟𝑖𝑠𝑜𝑛𝑒𝑟. -𝑰𝒅𝒆𝒏𝒕𝒊𝒕𝒚 𝑽.
Fanfikce.- 𝑯𝒆𝒂𝒅𝒄𝒂𝒏𝒐𝒏𝒔. .- 𝑶𝒏𝒆 𝒔𝒉𝒐𝒕𝒔. .- 𝑫𝒓𝒂𝒃𝒃𝒍𝒆𝒔. .- 𝑺𝒑𝒊𝒄𝒚 𝑻𝒉𝒊𝒏𝒈𝒔. 𝑇𝑜𝑑𝑜 𝑒𝑠𝑡𝑜 𝑎𝑐𝑒𝑟𝑐𝑎 𝑑𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑡𝑎𝑛 𝑐𝑢𝑟𝑖𝑜𝑠𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑒𝑗𝑎, 𝐸𝑑𝑔𝑎𝑟 𝑉𝑎𝑙𝑑𝑒𝑛 𝑦 𝐿𝑢𝑐𝑎 𝐵𝑎𝑙𝑠𝑎. .- 𝐋𝐨𝐬 𝐩𝐞𝐝𝐢𝐝�...