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Capítulo 9. ¿Harry?

Jade.

El sonido de mi celular hizo que me levantara. Mire a este con los ojos entre abiertos, a causa del sueño. Era un mensaje de Ali.

“¿Me pasas a buscar mañana?”- Alice.

“¿Enserio Ali? ¿A las cuatro de la mañana? En fin, si claro paso por ti”- Jade. Le respondí.

“Gracias bebe, perdón por despertarte L sueña conmigo”- Alice .Contesto luego dos minutos. Y reí ante su contestación.

Guarde el móvil debajo de la almohada y me volví a dormir.

(***)

Los pequeños rayos de sol provocaron que despertara. Me levante con pesadez de la cama, continuado por un bostezo e hice la misma rutina de todo los días. Tome mi carpeta de estudios que estaba sobre mi mesa de noche.

Baje las escaleras y me dirigí hacia la cocina. Me encontré con una grata sorpresa. Cameron estaba en la barra, bebiendo de su café y  con su vista fijada en el diario. No sabía que los idiotas también se informaban. Pero también se encontraba Marta. Siempre esta cuando una más la necesita.

-Buenos días Jadey –me saludo.

-Buenos días para ti –le devolví el saludo.  

-Te prepare jugo de naranja recién exprimido y unas galletas, tus favoritas –sonrió ampliamente.

-Gracias –la abrazar. Adoro las galletas y más si más las suyas.

-Toma –dejo el vaso de jugo sobre la barra y un plato con galletas –Ya vuelvo, debo ordenar el cuarto de tu madre –se despidió. Tenía ganas de decirle que se quedara y no me dejara con este acosador.

Tome una galleta y la mordí, luego bebí de mi jugo. Me sentía algo incomoda, Cameron no dejaba de mirarme.

-Qué bonita que estas esta mañana Jade –me alago. No le respondí, tal vez si lo ignoraba dejaría de molestarme - ¿Estas enojada? –pregunto en un tono burlesco.

-No me jodas ¿sí? –me digne a mirarlo pero con odio, era lo que sentía hacia él.

- Amas que te moleste –guiño un ojo, volví su vista a lo que hacía.

-¿Por qué Cameron? –le pregunte.

-Ya te lo dije Jade –contesto sin mirarme aun.

-Eso no tiene sentido, tu no conoces nada de mí –me defendí.

-Tienes razón –dejo de hacer lo suyo – Pero me quitaste todo lo que amaba –hablo con seriedad.

-No entiendo –respondí confundida. Y el rio sin gracia.

-Mi padre se divorció con mi madre y cuando estaban a punto de resolver sus conflictos, apareció la zorra de tu madre –escupió con odio.

-¡No tienes derecho! –le grite levantándome de la silla.

- Y como no puedo interponerme en su relación, te hare la vida miserable Jade…-comenzó a acercarse a mí y aleje rápidamente de él.

-Te odio –le dije para luego marcharme.

(***)

-¿Cariño estas bien? –pregunto preocupada Ali al entrar al auto.

-No…-negué con un nudo en la garganta.