Sun Hee deseaba recuperar el primer lugar de la escuela, el cual, ha sido arrebatado durante 4 años consecutivo por Zhong Chenle su nuevo vecino.
Lo odia, sin embargo, al aceptar la apuesta de su mejor amiga su vida dará un giro de 180 grados.
"S...
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— ¿Sé conocen?
Aquellas palabras de la señora Zhong, hizo sobresaltar a Sun Hee y regresar a su realidad; quiso hablar, pero Chenle se le adelanto.
— No, pero creó que es la que siempre queda en segundo lugar, ¿verdad?
Si antes lo odiaba, ahora lo hace aún más, definitivamente es un idiota y lo que más le irrita es que tiene razón; las palabras que salieron de su boca se repite constantemente en su cabeza que no puede dejar de escucharlas.
— Sí— afirmó Sun Hee sonriendo forzosamente puesto que el chico de alado la hizo exasperar— Es verdad.
La señora Zhong es una mujer encantadora y amable, es más, La madre de Sun Hee fue la primera en darle la bienvenida y eso lo supo al ver a su mamá hablando con ella como amigas de toda la vida, aunque, en su interior agradece la llegada de su madre la cual, al cabo de unos minutos la hizo retractarse de lo dicho, ya que se llevo a la señora Zhong dejándola sola con Chenle.
Chenle comenzó a pasar las cajas, puesto que nadie había llegado a colocarlas en su sitio. Sun Hee pensó en dejarlo e irse, después de todo no era su responsabilidad, estaba a un poco de tocar el picaporte, sin embargo, retrocedió dejando a un lado su preciado sueño, tomo la caja más cercana y comenzó a introducirla hasta llegar al sitio predestinado; de todos modos, no estaba haciendo nada malo, sólo estaba ayudando.
La decoración del lugar es muy distinta a la que acostumbra ver, esta presenta colores fríos y aquellos colores apagados, da la sensación de serenidad, transparencia y comodidad. Aunque no se aprecia concretamente por las cajas amontonada por doquier, a pesar de ello, le gusto aquella combinación diferente a lo que estaba anteriormente.
Sun Hee pasó alrededor de algunos segundos observando el lugar; usualmente no es para nada observadora y puede ser despistada, pero no se había dado cuenta que su boca estaba entreabierta hasta que escucho un pequeño ruido, proveniente de la puerta, trato de disimular, pero sí existiera un premio del mejor disimulo, ella definitivamente no hubiera ganado ni el último, acomodo un mechón de su cabello y siguió con lo que estaba haciendo.
Aquella caja que tomo pesaba demasiado, adura penas pudo pasarla, ella odia el estereotipo en el cual, una chica no puede hacer lo que otros chicos hacen, sin embargo, apenas es la 4 caja que pasa y se siente una debilucha, en cambio el chico de a lado ya llevaba la mayoría de cajas pasadas. Sun Hee iba a regresar en busca de otra caja, no obstante, al oír la voz de Chenle se detuvo.
—Gracias, pero tranquila, ya vienen las personas que se encargarán del resto, además, ya falta poco y estarán aquí— habló mientras extendía una botella de agua—
¿Cuándo tomó las botellas? ¿Estuvo tan distraída? Ella miro la botella y asintió mientras la agarraba, después de todo el agua no tiene nada de culpa ¿ verdad? Además, si tenía sed.
