𝘣𝘦𝘳𝘵𝘩𝘰𝘭𝘥𝘵 𝘩𝘰𝘰𝘷𝘦𝘳 , 𝘰𝘯𝘦 𝘴𝘩𝘰𝘵𝘴

3

imagina: estás jugando ajedrez con reiner, y bertholdt te está observando demasiado. es algo que te pone nerviosa y terminas perdiendo.

...

La muchacha movió su caballo hacia la torre blanca de Reiner, provocando un jaque mate, acabando con el cuarto juego contra el rubio.

—Un momento, un momento... —Dijo, analizando todo lo que pasó hace poco. —Pido revancha.

(n) rió entre dientes, moviendo su cabeza de forma negativa—, Vamos, es la cuarta vez que pierdes, Reiner, ¿No estás cansado de qué te gane? —Apoyó su mejilla en la palma de su mano.

—Sonaste tan engreída. —Suspiró. —Vamos, una última vez.

—Bien, pero luego de ésta partida no quiero más revanchas, ¿Está claro?

—Sí, sí.

—Y también quiero el pan que me prometiste en la segunda ronda.

—Bien, sí, yo te lo consigo. Juguemos ya.

Ella puso los ojos en blanco y volvió a ordenar sus piezas, algo que Reiner también hizo. Cuando su lado estuvo listo, espero a que el rubio acabara con el suyo. Giró su cabeza al chico alto de su lado, quien la veía seriamente pero con sus mejillas calientes y de color carmín.

—¿Qué pasa, por qué me ves así? —Se colocó nerviosa, evitando la mirada de Bertholdt. —¿Tengo algo en el rostro?

—No es nada, a él sólo le gusta mirarte. —Respondió Reiner por su amigo. —Empecemos.

—Cielo, ¿Po-podrías dejar se mirarme así? Es que m-me pone nerviosa y entonces perderé.

—¡Oh, Bertholdt sigue con eso! No dejes de mirarla.

—¡Oye! Eso es trampa.

—Lo siento, y-yo dejaré de hacerlo. —Unió sus manos, mirando avergonzado, ahora, la mesa.

—Gracias. —Sonrió, colocando su mano sobre las de él, provocando estragos en Bertholdt. —Bien, continuemos, idiota.

..

—Cariño, eso de mirarme, ¿En serio te gusta hacerlo o te burlas internamente de mí? —Cuestionó divertida.

—¡¿A-ah?! ¡N-no! —se alarmó—, ¡Ja-jamás me burlaría de ti, y-yo—

—Estoy jugando contigo, bertholdt. —Rió suave y bajo.

—Oh, e-entiendo... —Soltó una leve risa nerviosa—, A mí me gusta mirarte porque eres muy bonita, (n), y más cuando sonríes o ríes por cualquier cosa. —Su sonrojo se extendió por todo su rostro.

—Ouh, eres adorable, cariño. —Se colocó de puntilla y sus manos se posaron en las mejillas de él, acariciando éstas con los pulgares. —¿Y es sólo por eso o también hay más motivos?

—Bueno... Hay ciertos motivos, pero aún no puedo decirte sobre ellos. —Frunció su entrecejo apenado. Esos otros motivos de los cuales no quería hablar tenían que ver un poco con Marley.

—¿Son ultra secretos? —Preguntó de manera divertida, casi soltando una risita.

—Así es.

—¡Ah! Lo entiendo, lo entiendo. —Besó rápidamente su mejilla. —Cuando estés listo para contarme, sólo hazlo, sin dudarlo, juro no reírme. —Volvió a besarlo, pero esta vez sus labios. —¿Bien?

El colosal no estaba seguro de afirmar lo que ella dijo, pero debía hacerlo, así que asintió con la cabeza, inseguro. Su único problema y malestar es que ella nunca se enteraría, porque en cualquier momento él tenía que dejar la isla y desaparecer de su vida para siempre.

...

bertholdt es un regalo <3