Cambiándolo Todo [Seven x Mono]

XIII- Un poco más cerca

Six hacía lo posible para acercarse a Mono, no tenía otras intenciones aparte de amigos, Seven como el amable personaje que es, quería ayudar ya que ver asustado a su pequeño amigo no era algo que le guste.

Mono estaba detrás de una caja, estaba escondido o protegiéndose a si mismo mientras miraba como su amigo y aquella niña hablaban, ¿qué hacían?,¿qué decían?, pero al notar como ambos le miraron le causó algo de confusión y entro en pánico en ver como estos corrían hacia él.

Su instinto lo hizo salir corriendo tan rápido como podía pero Six era más rápida y lo atrapó tirándose encima de este.

Forcejeando por ser libre, sintió una mano en su mejilla, era frío aquel contacto esa pequeña mano en su mejilla era de Six, no entendía nada, tampoco quería hacerlo, solo necesitaba irse.

-- Mono no te asustes, Six solo quiere hablarte -- La chica afirmo con la cabeza, para salir de este, tan rápido como salió encima suyo.

-- ¡ella ni habla! -- acuso molesto, de alguna manera se sentía traicionado, no quería revivir ninguna pesadilla antigua.

-- Vamos, solo dale una oportunidad, ella no es tan mala como parece -- mencionó Seven acercándose a Mono para agarrarle del brazo, pero enojado sacudió su extremidad para soltarse del agarre y salir huyendo.

Six y Seven se miraron entre sí, no entendían bien ese comportamiento, más intriga le creaba a los dos, puesto que Six no lo conoce y Seven creyó conocerlo.

Al parecer le faltó contar cual era su pesadilla o su mayor miedo.

Mono logró esconderse en una de esas salas del caldero, tuvo que matar sanguijuelas para estar tranquilo en ese lugar, sentándose para agarrar un carbón y hacer garabatos en el suelo, dibujo un pequeño gnomo y luego a él, o más bien un intento de su persona.

Escucho el típico ruido de un gnomo para girarse allí estaba uno, sonrió tranquilo sabiendo que no eran ellos.

El pequeño ser se acercó y se sentó a lado de él para ver que es lo que hacía, notando esos garabatos lo imitó, pero solo eran líneas sin sentido pero era adorable ver eso.

No quería ver a nadie, en especial a esa niña, Seven no tenía la culpa, sabía que quería ayudarlo a superar lo que le molesta pero esa no era una manera.