𝓐 𝓡𝓮𝓪𝓼𝓸𝓷 (mono x six) little nightmares

1.- ¿Lo recuerdas?

Afuera estaba lloviendo, eso podían saberlo debido todo el movimiento de la torre, pues el viento era tan fuerte que lograba zarandearlo solo un poco, además claro por las ventanas y los sonidos estridentes de los rayos y truenos.

Six, siendo la encargada de proteger a todos los habitantes de ese lugar después de haberse deshecho de "la dama", repartió trozos de tela como mantas, y le dijo a los gnomos restantes que buscaran todas las velas posibles por si la electricidad llegaba a fallar.

Fue difícil para ella volverse a ganar su confianza después de lo que habían visto la última vez, pero dejando en claro que solo así podría saber cómo detener a "la dama" fue un poco más sencillo.

Algo que siempre había detestado de ella, era esa sensación del hambre. A diferencia de los otros niños, si ella no comía segundos después de que su estómago rugiera, perdería el control y atacaría a alguien salvajemente... Lo odiaba. Ella era buena, en el fondo se preocupaba por los otros, después de todo, dos personas se habían preocupado por ella antes pero... Desgraciadamente, ambos están muertos. La chica cayó al mar junto con una loca, y el chico...

Six cerraba los ojos con fuerza cada vez que recordaba eso, detestó tener que dejarlo caer, pero era eso o vivir con el peso de haberlo comido, algo que desgraciadamente, no pudo evitar con runaway kid, e incluso si hubiera podido evitarlo, tendría que haberlo hecho para saber cómo derrotar a "la dama". Al menos eso la consolaba un poco.

Estaba caminando por los fríos y algo oscuros pasillos, buscando a cualquiera que se hubiera quedado atrás, todos estaban reunidos en las salas de comedor pues era ahí donde se tenía mejor iluminación y ventilación. Si algo llegaba a pasar, esa era la zona más segura, cosa que no podía decirse de el almacén, el sótano inundado o, la más peligrosa, la cocina, llena de cuchillos y máquinas para triturar carne.

-¡Six!

Escuchó su nombre detrás de ella, algo preocupada por lo que podría ser, volteó de inmediato con cara de preocupación genuina. Se encontró con abigail, la primera chica (además, claro, de six) en ser liberada de su jaula. Se había vuelto la segunda al mando rápidamente, pues tuvo una buena amistad con six desde el inicio, aunque ésta quiera negarlo.

Cabello largo y rubio recogido en dos trenzas, tez blanca y mejillas ligeramente sonrojadas, acostumbraba a usar vestidos que la cubrían hasta las pantorrillas de diversos colores y diseños. El día de hoy era uno de color turquesa con puntos y un listón blanco a la altura de la cadera, quedaba bien con sus grandes y expresivos ojos azul cielo. Six, al verla, recordaba cómo la encontró en el principio, vestida con harapos, cabello sucio y descuidado, piel que parecía gris por la mugre y suciedad, pero sus ojos jamás habían perdido la vida y esperanza. Es por eso que sus ojos parecían ser lo único que no cambió.

-Six, me alegra encontrarte a tiempo -Dijo entre jadeos y suspiros, estuvo corriendo hasta encontrarla, necesitaba un momento para recuperarse- ¿Tienes reservas? -Mencionó antes de enfocar la mirada en el rostro de la contraria, o al menos, en lo que se podía apreciar y que no estaba cubierto por la sombra de la capucha-.

Six asintió, con una sonrisa leve, le alegraba saber que se preocupaban por ella, pero en el fondo, también sentía algo de dolor. Las reservas a las que se refería abigail eran dos trozos de pan, uno en cada bolsillo de su impermeable. Siempre se aseguraba de llevarlas consigo por si acaso, y si tardaba mucho, enviaban a un explorador con más pan para ella. En esta ocasión abigail se ofreció como voluntaria, pues quería aprovechar para contarle algo más.

-Oh, bien, eso me alegra...-Con una sonrisa sincera, abigail se acercó lentamente a six- ¿Puedo mostrarte algo genial?

Six se quedó en silencio, pensando, no era de muchas palabras... Su mayor temor era dejar a alguien atrás por ir a explorar, y además, quería regresar pronto y ayudar con todo lo posible, desde hacía tiempo que trataban de hacer un plan para llegar hasta "the nest" para ayudar a otros, habría una junta, no quería perdérsela.