Prisionero

Capítulo 1: Prisionero en la celda

Miró hacia todas las direcciones y solo veía el humo del fuego que se consumía, las cenizas se esparcían por el aire llevándose consigo todo vestigio de los Wen. Habían ganado, al fin esta guerra había llegado a su fin, ya no tendría ver a los suyos morir, sangre inocente no volvería a ser derramada. Sin embargo, aún se sentía vacío, este vacío vino con el inicio de la guerra, creyó que al finalizarla el vacío se iría, pero no, seguía, y dolía.

-WangJi, por fin te encuentro- Su hermano le habló, era un alivio ver que solo tenía cara de cansancio por la guerra-Jiang WanYin está matando a los prisioneros de las celdas subterráneas, tienes que ir a calmarlo antes de que cause más destrozos, yo estoy tratando de controlar la furia de Mingjue junto a Yao, por favor WangJi hazte cargo de él-

Lan WangJi no necesitó escuchar más y emprendió su camino a las celdas de los Wen. En su recorrido sintió el olor de las celdas, era pestilente, si alguien no moría por las torturas sufridas ahí, tenía que morir por el horrible olor del lugar. Tal como Xichen le había dicho, había personas recién asesinadas esparcidas por el camino, guardias y prisioneros, Jiang WanYin estaba cegado por el odio y no comprendía que la guerra había terminado.

Podía escuchar a la distancia a Jiang WanYin gritando con furia improperios hacia los Wen, apresuró su paso en su dirección. Lo encontró a punto de matar a lo que parecía un guardia de celda y lo detuvo.

-Lan WangJi deberías de meterte en tus propios asuntos-Podía ver la furia en su mirada, pero esa mirada no lo iba a intimidar.

-La guerra terminó- se limitó a decir, aunque en su mente había muchas más palabras no podía decirlas, no era apropiado apenas se conocían. Jiang WanYin pateó al guardia de celda, pero este solo gimoteaba.

-Está ciego y sordo ¿Qué clase de carcelero es? Algo oculta, estoy desde hace un rato tratando de interrogarlo, pero si bien puede hablar no dice nada- respondía ante una pregunta no dicha pateando nuevamente al carcelero. Lan WangJi miró a su alrededor, Jiang WanYin tenía un punto, algo ocultaba, pero no tenían como sacarle la información y la tortura no era una opción. Lo observó detenidamente, efectivamente era sordo posiblemente de nacimiento, pero alguien lo volvió ciego, donde se supone que tenían que estar sus ojos había dos grotescas cicatrices.

Lan WangJi sacó su botella de agua dándosela al carcelero tal vez si mostraba un poco de compasión podría sacarle más información.

-Gracias mi señor, este pobre carcelero espero sus órdenes por días y ya se encontraba desahuciado, pero seguramente esa cosa este peor que yo, hace más de 5 días que no come bocado como usted ordenó- Lan WangJi se sentía confundido, las respuestas de ese carcelero fueron más desconcertantes. El asedio a Qishan Wen había comenzado hace 3 días, lo que significaba que ya con días de anticipación planearon matar de hambre a la persona que este guardia custodiaba, si tanto lo querían muerto ¿Por qué no lo asesinaron? ¿Por qué matarlo de hambre?

- ¿Mi señor esa cosa hoy comerá? - ¿Cómo se comunicaba este hombre con su señor? Si no hacia el movimiento correcto posiblemente se suicide antes de decir algo, pero antes de que se ocurriera algo Jiang WanYin lo golpeó de nuevo- Mi señor lo lamento, sé que primero quiere verlo, con gusto abriré primero la celda- Jiang WanYin tenía una sonrisa satisfecha, irónicamente su golpe funcionó, posiblemente estaba más que acostumbrado a ser apaleado por su señor por lo que ni se inmutó cuando Jiang WanYin lo comenzó a golpear de la nada.

El carcelero sacó un talismán y lo colocó en una de las paredes, dijo unas palabras a modo de susurro y una puerta con un umbral de palabras que brillaban comenzaron a aparecer. Jiang WanYin comenzó a leer lo escrito en el umbral.