LAS APARIENCIAS ENGAÑAN

Prólogo

En cuanto el primer rayo de sol inunda mi habitación salgo disparada.

 Se supone que después de haber participado en mil torneos debería de estar familiarizada con esta sensación, un hormigueo en la barriga constante, esa emoción y  nerviosismo que te come, pero no es así , es el Campeonato de España y llevo esperándolo toda mi vida.

Desde que era pequeña he renunciado a muchas cosas, nunca tuve una infancia normal. Cuando todos mis compañeros se iban de cumpleaños yo me iba a las pistas a entrenar, cuando llovía y no se podía hacer nada intentaba hacer ejercicio donde se pudiera, las chocolatinas nunca han estado presentes en mi dieta, tengo un cuerpo más musculado de lo normal, a penas he conocido a gente, y hay que compaginar todo con el colegio.

Os puedo asegurar que he escuchado unas mil veces estas preguntas -¿Te vale la pena tanto esfuerzo?-¿Enserio crees que llegarás a algo?-¿No te da pena perderte la infancia?

Podría decirte que si, que siempre tienes claro que vales para eso, que nunca dudas o te arrepientes, sufres, lloras, te decepcionas, pero te estaría mintiendo. 

Es algo muy duro tanto psicológicamente como físicamente.

En parte creo que gracias a ello he desarrollado características que poca gente a tan temprana edad posee, como la perseverancia, la tolerancia, o el esfuerzo. Pero he de decir que carezco de otras como el socializar, empatizar y trabajar en equipo.

Aquí entra lo más importante, lo que la gente no sabe, y es que a pesar de ser algo muy solitario y difícil tiene situaciones que no podrías vivir en otras circunstancias, viajar por todo el mundo descubriendo cantidad de clubes, noches tras noches en hoteles diferentes, ir de pizzería en pizzería para pedirnos pasta, pasarnos el día en chándal, conocer a jugadores de todos lados, esos nervios que se convierten en excitación, el vínculo que creas con todos tus compañeros y tus entrenadores son detalles que hacen que sea un deporte fascinante.

Como os decía hay un vínculo muy fuerte con tu equipo.

Ahí coge protagonismo mi mejor amiga Estela.

Tiene mi misma edad rubia con ojos azules, los rasgos muy marcados, es muy delgadita, y tiene una sonrisa impecable, es de esas personas que emana una felicidad increíble. Ella lleva jugando menos tiempo que yo al tenis pero alcanzó mi nivel enseguida, siempre fue muy talentosa pero en mi opinión sería mejor si se dejara paverías. Como os podéis imaginar siempre ha destacado entre los chicos y aun teniendo solo 16 años ha estado con algunos. 

Muchas veces me dice que me relaje y disfrute de todo eso que me debería de gustar, el alcohol, chicos, fiesta... Y aunque he hecho todo esto nunca me ha llamado la atención, quiza por eso no me adapto bien a la sociedad, y a veces creo que siendo así nunca encontraré ese amor idealizado que vemos en los libros y películas.

Como decía somos muy diferentes pero asi lo dice el dicho:

"Los polos opuestos se atraen"

Hemos tenido peleas, pero siempre hemos estado la una para la otra, nunca nadie me había demostrado que estaba bien ser yo misma  y no son pocas las veces que me he preguntado que he hecho para que alguien me quiera así como soy, es decir, ella es perfecta y todo el mundo la adora, pero yo, no lo se dicen que los adolescentes somos muy inseguros supongo que será eso.

Ella también se ha clasificado en el Campeonato.

No son ni las 7:30 y ya estoy lista, me miro una ultima vez en el espejo, llevo puesto mi mejor conjunto con la coleta alta y una visera que me caracteriza mucho, detrás de mis ojos cansados puedo ver ese brillo de ansía, estoy lista.

-ESTELAAAAAAA

-MARINAAAAAAA

No puedo evitar correr hacia ella de la emoción, la he echado mucho de menos. 

Nos quedamos segundos abrazadas con esa sensación de paz, pero inmediatamente la separo al ver a nuestro entrenador por encima del hombro. Nunca me ha gustado dar muestras de cariño en público así que miro a Estela y me tranquiliza ver que no le ha molestado.

Tras una hora intentando encajar todas las maletas y mochilas en el pequeño maletero, nos colocamos los cinturones, ponemos nuestra canción favorita a todo volumen, Jesús arranca la furgo y nuestro viaje empieza.

QUE ILUSIOOOOOON

Ojala tener todos una Estela en nuetra vida ehh

Pronto veremos que ocurre en ese viaje tan esperado.