Estrella | haobin

Único

Un joven caminaba a pasos lentos por aquellos pasillos de aquel cementerio, entre su mano derecha llevaba unas hermosas flores de lirios azules, las favoritas de su gran amor, en su otra mano llevaba la pequeña mano de su hija Minyeon, quien llevaba unos tulipanes blancos en su manito.

Ambos se detuvieron frente a la lápida blanca, Hanbin ayudó a su hija a sentarse sobre el pasto verdoso que envolvía la tumba de su gran amor, Hao, quitó las antiguas flores que ya estaban un poco marchitas, para luego colocar las nuevas que había comprado él, desde que habían entrado, nadie dijo palabra alguna, se mantuvieron en silencio mirando la foto de su esposo, sintió sus ojos picar, anunciando que pronto no aguantaría las ganas de llorar.

- Hola mi amor, ¿Cómo haz estado?, espero que bien

Se detuvo unos segundos mientras secaba las pequeñas lagrimas que habían salido de sus ojos.

- Sabes, en estas ultimas semanas he trabajado mucho para que no le falte nada a nuestra hija, ya en unos meses cumple 6 años, ya está bastante grande.

Sonríe mirando a la pequeña que se encontraba a su lado, acercó su mano a la cabellera de la menor y dejó suaves caricias allí, soltó un largo suspiro para luego continuar.

- Quisiera que estuvieras aquí con nosotros, ella te extraña... yo te extraño 

Secó sus lágrimas nuevamente y carraspeó un poco.

- los chicos no pudieron venir, tuvieron un par de problemas en el trabajo, pero me prometieron que vendrían la próxima vez, dijeron que te traerían unas hermosas flores, tan hermosas como lo eras tú.

Sonrió levemente.

- Aún recuerdo cuando nos conocimos, algo tan cliché, pero fue el mejor cliché que viví en mi vida, corrías por la calle para no llegar tarde tu primer día de trabajo, me tiraste tu café encima, aún así te disculpaste y seguiste tu camino, ese mismo día nos volvimos a encontrar, esa vez yo como tu jefe, me causo mucha gracia como te ponías rojo de la vergüenza.

Dijo aquello mientras soltaba una risa

- todo comenzó desde ese momento, ¿Quién lo creería, no?

Se mantuvo mirando la foto.

- También recuerdo cuando fuimos al karaoke junto a los chicos, aquel día cantamos "Serendipity" y se volvió nuestra canción favorita

Agachó la mirada al sentir nuevamente sus ojos picar al recordar aquellos bellos momentos.

- O la vez que fuimos de vacaciones a París, te emocionaste tanto que me agradeciste por todo un año, aún tengo guardado ese vlog, cada vez que te extraño, lo vuelvo a mirar..., ahora, ya 1 año que no estás aquí y no me acostumbro a dejarte ir, porque yo prometí quedarme a tu lado por y para siempre.

 Sonrió suavemente, una sonrisa de melancolía, de dolor.

- ¿Quieres hablar con papi, cariño?

Preguntó mirando a la nena, la cual asintió suavemente, miró la foto de su papá Hao y sonrió.

- Papi Hao, hola. ¿Cómo estás hoy?, papá dice que estás en lugar bonito, ¿Eso es verdad?

Preguntó sonriendo suavemente y bajó sus manos mirando las flores que tenía entre ellas.

- Quería traerte estas flores bonitas, las escogí porque son como las que plantábamos juntos en el jardín.

Dijo y se inclinó para colocar las flores al lado de las que había puesto Hanbin, volvió a su lugar para seguir hablando.

- ¿Te acuerdas de cuando jugábamos a las escondidas?, ¡Eras el mejor en esconderte!, casi nunca te encontraba.

Soltó una pequeña risa junto a su padre