Canadá estaba nublado

216 11 2
                                    

Ese dia mi madre me obligó a madrugar. Sintiendo aún las sábanas en mi piel, miré por la ventana. El cielo estaba nublado aquella mañana.

Me levante e hize mi rutina diaria: Asearme, vestirme, y acomodar mi habitación. Cuando termine de meter algunos objetos en las cajas restantes que estaban en el suelo de mi habitación, Cojí la enorme caja que se posaba en el suelo y la levanté en dirección al salón, allí pude observar a mi madre tomando café, como hacia habitualmente. 

-Buenos días mamá- saludé

-Hola cariño- dijo dejando de mirar la taza de café para centrar su mirada en mi. Pude observar las ojeras marcadas en su rostro- ¿Has guardado todo lo que quedaba en las cajas?- dijo señalando las cajas.

-Sí, acabo de terminar

-Genial ponlas junto a todas- exclamó señalando un rincón amontonado de cajas- el camión de la mudanza llegará en cualquier momento.

Me dirigí hacia el enorme rincón y dejé mi caja sobre las demás.

¿Estaba nerviosa por llegar a Canadá? Sí, lo estaba, me aterraba pensar en lo que podía suceder allá. En ese momento, un sonido invadió toda la sala. Saqué el movil de mi bolsillo trasero y lo desbloqueé para ver de qué o de quién se trataba. Pude observar un mensaje de Scott en la bandeja de notificaciones, sin dudarlo, lo abrí:

Imbécil :)

Hola estupidaaaaaaaa, pasaré por tu casa a despedirme, te parece?

                                                                                       Obv trozo de mierda :)

Estoy allá en 10 :D


10 minutos después, Scott ya estaba tocando el timbre de mi puerta, así que, me dirigí hacia esta.

Hey....- dijo a la vez que me abrazaba, notaba que lágrimas se deslizaban en sus mejillas- te echaré de menos- comentó. Me dolió verle así- pero prefiero que empieces de 0 allí, después de todo lo que has pasado...- dijo con tristeza.

-Si, empezaré de 0 allí y así podré olvidarme de todo esto...

Durante unos instantes, nos miramos sin saber qué decir, pero en realidad, yo sentía que ya estaba todo dicho.

Traté de memorizar ese instante, cada parte de su rostro, su olor, su mirada.

Le echaría de menos. Habíamos acordado escribirnos a diario y hacer videollamadas frecuentes, pero no sería los mismo. Oh, no. Notaba el berrinche acercandose, pero me había prometido no llorar. No quería que ese fuera el último recuerdo que Scott tuviera de mí. Y aún así, me ardían los ojos.

Sin necesidad de decir nada, el supo exactamente lo que necesitaba. Y me abrazó.

-Te voy a echar de menos enana....- susurró mientras me acariciaba el pelo.

-Y yo...- murmuré con la voz rota.

Mi madre me llamó justo a tiempo de evitar empaparle la sudadera con mis lágrimas 

-Adiós- dijimos a la vez, ambos con la voz rota.

Con muchas lágrimas en mis ojos, pude observar como se alejaba. Te echaré de menos Scott, mucho...

Minutos después, tuve que despedirme de el lugar donde basicamente, pase mi vida entera, la parte positiva es que, asi no volveré a revivir aquellos hirientes recuerdos, nunca más.

1 día después...

El vuelo fue largo, y algo aburrido, hablaba con Scott cada minuto y cada segundo, unas horas hacía cuando le estaba empapando su sudadera con mis lágrimas.

TODO DE TI: Finn Wolfhard y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora