Eighth 1.1

2.1K 227 78
                                    

1.1



El mundo de Mark había caído por completo al enterarse de que Donghyuck estaba dentro de un quirófano, y mas aún sentía la culpa de haber participado en la pelea que llevó tanto a JaeMin como a HaeChan a estar hospitalizados.

JaeNo no decía una sola palabra, pero los músculos de su mandíbula estaban totalmente tensos y a pesar de las vendas, apretaba fuertemente su puño mientras tenía la mirada perdida.

—Aún no quiero saber que desencadenó la pelea porque sé que no querrán hablar de ello— continuó TaeYong suspirando —Y sé, créanme que sé que no quisieron poner a ellos dos en cama, pero... Chicos vamos, hemos hablado de esto mil veces, JaeNo, te lo advertí la primera vez que terminamos en ER por tu pelea con JaeMin— el nombrado asintió bajando la vista —¿Recuerdas quién pasó la noche entera cambiando tus vendajes? ¿Y los de Nana? ¿Quién los llevaba una y otra vez, escondiendolos de SooMan y guardando el secreto?

—TaeYong-Hyung— respondió JaeNo con los ojos rojos.

—Exacto, fuí yo, yo y tus mayores— la voz de TaeYong denotaba furia pero estaba entrecortada debido al nerviosismo y a la tristeza que sentía —No sientas que esto es un reclamo, pero necesito que se pongan en mi lugar. No solo he ayudado a esconder tu relación o la de Mark, sino también he estado guardando todas estas clases de cosas que podrían llevarnos a grandes problemas. No es justo para ninguno que por culpa de no controlar sus emociones terminemos en algo como ésto. No es justo para mí tampoco.

—Hyung, yo de enserio, juro que en ningún momento, ni mi intención ni la de JaeNo fue que esto pasara. Y de enserio, entendemos perfectamente tu queja, de enserio.

TaeYong suspiró tocando el hombro de Mark y la pierna de JaeNo, que se encontraba en la cama de en frente —Nunca voy a abandonarlos, y por más enojo que tenga, no quiero que estén mal— su mirada era cálida, cómo la de un hermano mayor o un padre que le hablaba a sus hijos con el amor que estos poseen —Son mi familia, somos una familia pero tienen que aprender a controlarse. No pueden golpearse cada vez que se sientan enojados, y mucho menos lastimar a las personas que aman, más aún si esas personas son de su interés romántico.

JaeNo y Mark compartieron miradas. Ambos sabían que fue una catarsis de la furia y palabras no dichas de las últimas semanas, de los celos de JaeNo, los problemas de Mark, los rechazos, las traiciones y los cabos sueltos.

La realidad es que ninguno de los dos quería llegar a eso, JaeNo había recaído en aquellos ataques de ira de los que tanto había luchado para salir y Mark había seguido el juego de la pelea siendo que va en contra de todo lo que sus ideales decían.

Una lágrima resbaló por el rostro de JaeNo —Mierda— susurró limpiándose furiosamente.

Mark también había derramado un par de lágrimas mientras TaeYong los miraba con tristeza invadiendo su cuerpo, sentía todas las responsabilidades en su espalda a punto de caer y como si de una bomba se tratase, todos los problemas a punto de explotar.

Suspiró mirando hacia otro lado, ninguno de los miembros en el hospital estaba totalmente capacitado para encargarse del resto. Tanto Johnny como Ten, DoYoung y TaeYong estaban aún con alcohol en sangre y de igual manera pudo divisar a Johnny haciendo papeleos y a DoYoung hablando con los doctores.

—Solo necesito saber ¿Quién fue el que dió el golpe que hizo caer a Donghyuck?

°•°•°•°

JaeMin se encontraba recostado en la cama de su habitación mirando hacia el blanco techo del lugar. Podía escuchar los sonidos de los aparatos que estaban monitoreandolo y en el pasillo el bullicio de los médicos y las camillas que pasaban.

Hormone game! ;; MarkHyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora