20 reasons || Komaeda Nagito × Reader ©

♡ #21 ♡

Los chicos estaban espiando a su compañera ya cuál estaba sonrojada leyendo la razón número 20 de porque el chico de pelo blanco estaba enamorada de ella.

— ¿Qué escribiste específicamente que ni siquiera se puede mover? — Preguntó en un susurro Hinata mirando a su compañera.

— No mucho la verdad. — Respondió simple Nagito igual mirando a la chica.

Atrás de ellos llegaron Saionji y Koizumi ignorando a los chicos. — ¿Qué te pasa (...)-chan? — Preguntó Koizumi llegando junto con Saionji.

Pegó un pequeño salto de sorpresa, guardando el papel y cerrando su casillero repentinamente. — Nada en especial, solo me quedé pensando. — Se dio vuelta y les sonrió.

Saionji se acercó peligrosamente a ella y la señaló. — Tú nos escondes algo. — La señaló acusándola poniéndola nerviosa.

— Eso no es cierto, solamente estoy muy distraída. — Sonrió tratando de convencerla.

— ¿No deberíamos ayudarla? — Cuestionó Sōda mirando todo eso.

— No lo sé. — Respondió Fuyuhiko sin saber que pasaba.

Koizumi rió y las separó un poco. — Saionji-chan, seguro que no es nada grave o tal vez es algo privado. —

La menor bufó y luego asintió. — Si descubro que ocultas algo te las verás conmigo. — Amenazó volviendo a señalarla.

Se le quedó mirando alarmada y luego sonrió. — Gracias por preocuparte por mi Saionji-chan. — Le agradeció haciendo sonrojar a su amiga.

— ¡No estoy preocupada, es una advertencia! — Se negó avergonzada yéndose de allí.

Las otras dos chicas se miraron entre sí y luego sonrieron. — Está preocupada por ti, si hay algo en los que te podamos ayudar dinos. — Aconsejó la pelirroja poniendo una mano en el hombro de su amiga.

Sonrió asintiendo y pudo ver como su amiga iba por Saionji, suspiró y luego miró a dónde estaban los chicos. — Ya pueden salir. — Los chicos se congelaron y luego se resignaron a salir.

— ¿Hace cuanto lo sabías? — Preguntó Hinata suspirando.

Los miró y sonrió. — Es muy evidente ver a cuatro chicos espiar a una chica. —

Se rascaron la nuca avergonzados y luego Sōda tomó la palabra. — ¿No tienes nada que decirle a Komaeda? — Codeo a su amiga con un tono burlón.

Alzó la mirada chocando con la suya poniendo sus mejillas rojas casi al instante. — Bueno... tú me... — Empezó a hablar como pudo, sintiéndose avergonzada. Sintió la mirada de los chicos en ella y revolvió su cabello. — ¡No puedo decirlo es muy vergonzoso! — Se dio vuelta y se arrodilló ocultando su cara.

— Sōda no deberías ponerla nerviosa. — Regañó Hajime mirando con pena a la pobre chica que estaba agachada ocultando su cara, tratando de desparecer o algo así.

— No lo digas si no quieres (...)-san, es obvio que no puedes sentir lo mismo por alguien como yo. — Trató de tranquilizar Nagito.

Trató.

Se levantó repentinamente y lo miró enojada. — No deberías menospreciarte. — Lo regañó dando pequeños toques a su pecho empujándolo hacia atrás haciendo que choque con la pared.

— Esto va mejor de lo que pensé, vamos a ocultarnos. — Propuso Sōda susurrando mirando la escena.

La chica -que alcanzó a escuchar- los miró enojada, poniéndolos rígidos. — Y ustedes no deberían dejar que se diga ese tipo de cosas. — También los regañó haciendo lo mismo que con Nagito solo que sin los toques.