v e i n t i c i n c o

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-¡Hola, Jungkook! -Taehyung saludó con una sonrisa.

-Hola.

Joder, que tenso era el ambiente. Taehyung no sabía porqué Jungkook lo había saludado de una manera tan seca. El mayor sentía algo dentro de su ser, se sentía nervioso, asustado.

¿Por qué? ¿Por intentar follar con Namjoon?

No. No puede ser eso.

Jungkook entró e hizo la tipica rutina, saludar a la familia del castaño y subir a la habitación del más bajo.

Taehyung cerró la puerta principal y antes de que pusiera su pie en el primer escalón su madre lo llamó.

-Oye, ¿le pasó algo? -Pregunta su madre en tono bajo.

-¿No?

-Está soltando muchas feromonas, como si quisiera dejar toda la casa con su olor.

Oh vaya.

-Oye, ¿te pasa algo? -Preguntó Taehyung una vez subió a su habitación al ver al pelinegro.

Jungkook había tirado su mochila al suelo y se encontraba recostado en la cama mirando el techo. No respondió y tampoco miró a Taehyung.

-Mira, si viniste simplemente para follar, ok. ¡Pero no dejes tu puto olor en mi casa! Mi habitación apesta a ti.

El olor cada vez era más fuerte, quizás suene estúpido pero Taehyung estaba mintiendo, en estos días había extrañado sentir el olor de Jungkook cerca, en su ropa, en él mismo, etc.

-Taehyung, ¡¿qué mierda hiciste ayer!? -Exclamó el pelinegro con seriedad.

-¿Ah? -El rostro del castaño se tornó en mera confusión.

Jungkook se sentó rápidamente sobre la cama, en su mirada no reflejaba alegría.

-¡Apestas!

-¡Me bañé! -Taehyung estuvo a punto de olerse cuando la voz gruesa de JungKook le volvió a gritar.

-¡No! Taehyung... ¡apestas a otro alfa!

Taehyung quedó estatico, ¿cómo? Se supone que se había bañado y echado perfume hasta en las axilas. JungKook no debería de estar captando ese olor.

-¿Y-Y? No es tu puto problema si me acosté con otr...

«¡Mierda Taehyung, tu bocota!» Pensó.

Con ambas manos en su boca solo podía ver el enojo y desagrado en la cara de Jungkook, Taehyung se sentía sucio, no sabía el por qué. Ellos no eran novios, no eran nada.

Jungkook se levantó de la cama y camino hacía donde el castaño, acorralándolo contra la pared.

El mayor se sentía excitado, su pene palpitaba al igual que su entrada. Quería sentir al más alto dentro de él, no es como con Namjoon.

A Taehyung le gustaba Jungkook. Solo no quería aceptarlo.

-¿Y te gustó? -Preguntó el más alto. Ya no había ninguna expresión en su rostro, su mano fue deslizandose del lado de la cabeza del castaño hacía abajo, para finalmente alejarse y posarla dentro del pantalón de Taehyung. Posando su dedo medio en la entrada del moreno sintió el liquido de su auto lubricación.

-No... no me gustó -El más bajo quitó sus manos de su boca y rodeó el torso de Jungkook en un abrazo, quería su olor en él, en su cama, en todos lados.

No quería que Jungkook se alejara de su lado, eso de sólo pensarlo lo hacía sentir inseguro.

Para Jungkook le estaba costando respirar, el dulce olor que estaba soltando Taehyung lo estaba excitando.

Las feromonas del más bajo eran más fuertes. Jungkook quería tocar todo el cuerpo de Tae, tocar aquellos lugares que ensució el otro.

El abrazo había sido roto cuando Taehyung llevó su mano derecha al semi-erecto pene de Jungkook y acariciarlo por sobre la tela.

-Alfa... quiero ser la madre de tus cachorros -Dijo sin pensar.

«¿Qué?» Pensó el más alto.

Jungkook dejó de acariciar la ya dilatada entrada de Taehyung para tomarlo por los hombros y alejarlo.

El más bajo estaba sonrojado, sonriente y sus pupilas dilatas; había entrado en celo.

-¿Ah, sí? ¿Eso quieres?

-Sí, sí quiero -Taehyung tomó la mano derecha de Jungkook que posaba en su hombro para lamer el dedo índice.








oigan, muchas gracias por las casi 15k d leídas, no había tenido tiempo de agradecer ya que la escuela me está consumiendo;(

cuidado ─ kooktae au Donde viven las historias. Descúbrelo ahora