Nuestro Secreto

capitulo 3

Una vez más las actividades laborales de los trabajadores de hazbin hotel han terminado. Los trabajadores de este lugar al terminar la jornada laboral se pueden decir que se toman un tiempo personal. Husk al mirar que no había nadie más, saca de su bolsillo una foto de lo que solía ser su antigua vida, el demonio gato la miraba detenidamente solo para recordar la vida que llego a desperdiciar con la bebida y el juego lo que provocó un resentimiento hacia el por a ver arruinado su vida, lo que provocó que sacara una botella de alcohol barato solo para poder olvidar esos recuerdos que venía así el impactando en lo más recóndito de su cerebro, solo podía ver la botella y en sus adentro se decía una vez más, -me voy a embriagar, maldita y dulce que es la bebida, dulce veneno que me hace olvidarlo todo por un momento-. Tan concentrado estaba en ahogar su sufrimiento que no se dio cuenta de que alguien más estaba ahí.

Una vida difícil no es así. Lo decía May Berry viendo a husk de lejos.

-disculpa lo que voy a decir querida, pero dudo mucho que en tu diccionario conozcas esa palabra-. Lo decía mientras preparaba su bebida. Y la demonio no pudo evitar sentirse ofendida y sin pensar solo dijo.

-Difícil, Que requiere habilidad, esfuerzo, mucho trabajo o inteligencia especiales, además se lo que quiso decir señor Husk-. Lo siento lindura si te ofendí, pero seamos sinceros tu vida humana, comparada con la vida de los que están aquí, tu querida te sacaste la lotería. Esas palabras eran como estacas para la demonio y no pudo evitar enojarse y con toda su rabia soltó todo. -si de verdad me saque la lotería entonces porque estoy aquí, solo porque vi a mi esposo revolcarse con esa ramera en nuestra cama, viendo como ese maldito lo disfrutaba, después de todo lo que hice por el... después de todo lo que vivimos juntos... y el... porque me hizo eso... porque... dios permitió eso... no me considero una mala perso... oye lindura deja llorar no me gusta que una hermosa dama como usted llore en frente de mi, siento mucho abrir viejas heridas, en serio lo lamento mucho, hay veces que no se cuándo estoy escupiendo mierda, discúlpeme señorita. Se lo decía ala demonio mientras este le entregaba una copa de vino tinto lo cual May Berry acepto. Si quieres olvidar el tema podemos hablar o si quieres puedes preguntarme lo que quieres. La demonio la pensó muy bien y acepto el trato del demonio gato.

-Bueno ya que insiste, no rechazare tal oferta. Pero no te preocupes no te preguntare un asunto personal solo quiero saber algo que me ha intrigado desde que llegue aquí-. el demonio gato por las palabras de May Berry sabía que se iba arrepentir. -¿Cómo fue que tú y Alastor se conocieron?-. Al principio Husk suspiro de frustración ya que el siempre a intentado olvidar el día que conoció al demonio radio, y la demonio viendo su actitud le reprocho que ella podía hacerle cualquier pregunta, lo cual este inmediatamente accedió, se dijo entre sus pensamientos, <<sirve que de una buena vez eche todo el veneno acumulado>>.

-Bueno está bien te lo diré, pero pon atención ya que no me gustaría repetirlo otra vez-. May Berry solo asintió con la cabeza y se dispuso a escuchar.

Bueno todo comenzó el primer día que llegue al infierno. Lo primero que se me vino a la cabeza el primer día que llegue aquí fue que este lugar no se parecía a nada lo que habían narrado los cristianos lo que pude notar que este lugar que no tenía muchas diferencias de la vida que había dejado atrás, ya que se podía presenciar la incalculable corrupción que había en el lugar, los más ricos y poderosos abusando de los más indeseados, el fuerte abusando del débil, en pocas palabras, aunque el infierno estuviera civilizado había una realidad inaudita, aquí se seguía la ley de selva solo sobrevivían los más fuerte y los más audaces y como ya había sobrevivido una vida así antes decidí seguir el mismo reglamento que me impartí en la otra vida.

1. Mantén un perfil bajo y no llames la atención.

2. Mantente en tus propios asuntos y no busques problemas innecesarios.