capítulo 8

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En el mansión Magne Lucifer estaba exhausto en su habitación por el día que había tenido, de tán solo pensar en el día que tuvo le hervía la sangre de tener que lidiar con los seis príncipes del infierno y los overlords además de que tuvo que cobra las almas de los mortales que habían echo contrató con el, solo dió un fuerte suspiro y se dijo así mismos.
-no es fácil ser yo-.
-en efecto querido no es fácil ser el diablo-. Lilith lo decía con ternura a su esposo mientras ella se dirijia a consolarlo pero Lucifer no parecía estar contento al ver a su mujer, y con fastidio le dijo ala succubos.
-Lilith en dónde te habías metido. Tienes idea de lo que tuve que lidiar en tu ausencia, que fue lo que te pasó tú no eres así-. La súcubos al ver a su marido no pudo evitar sentirse culpable y decirle con ternura mientras ella lo ponía en en su regazo.
-cariño lo siento tanto pero ví a nuestra hija y no pude evitar saludarla... La verdad no tengo excusa siertamente puedo decir que pase tiempo con mi bebé-.
Lucifer al escuchar eso no pudo evitar sentir curiosidad en saber más sobré su hija quería preguntarle a su esposa sobre ella y saber cómo estaba pero su orgullo pesaba más y solo hizo una pequeña mueca. Pero Lilith conocía bien a su esposo y con una sonrisa le dijo:
-ella está bien. Y aunque no lo creas ella pregunto por ti-. Al escuchar eso no pudo evitar preguntarle.
-Ella aún sigue molesta conmigo-.
-No. Tu sabés mejor que nadie que nuestra pequeña nunca estaría molesta con su padre-. Lilith lo decía con ternura acariciando la cabeza de su esposo pero aún así el rey sentía que algo no estaba bien.
-eso ya losé, yo sé que Charlotte no guarda reconcor en su corazón, su corazón es puro como el agua ella no guarda odió por nadie y por nada y eso me preocupa... Algún día ella tomara el trono y no quiero que ninguno de esos malditos la vean débil y quieran...- antes de que pudiera proseguir Lilith lo besa con pasión y le dice lo siguiente.
-yo se que te preocupas por nuestra hija y que quieres lo mejor para ella pero debes de entender que nunca podrás cambiar la y nunca podrás lograr que se parezca a ti... Tu sabés mejor que nadie que cada ser de la creación es diferente y lamentablemente nuestra pequeña es muy diferente pero eso no significa que el fruto haiga caído lejos del árbol ella es tu hija y aunque no lo parezca ella se parece mucho a ti cuándo eras joven-. Lilith al decir eso, lucifer no pudo evitar sentir algo de vergüenza en recordar su antiguo yo el cual era un ser bondadoso y un ser el cual no conocía la maldad y al recordar eso sintió algo de ira y le dijo a su mujer:
-el ser que alguna vez fui dejó de existir ese ser era débil e ingenuo-.
-pero también recuerdo que en ese entonces eras un ser muy cariñoso y amoroso conmigo y jamás voy ha olvidar que desafiantes a tu padre por mí, recuerdo que le dijiste que no querías que nada y nadie me poseyera que solo era tuya y que matarías a cualquiera que se atreviera ha decir lo contrario-. Lucifer con una leve sonrisa le dijo a Lilith.
-tambien recuerdo a una dama muy llorona la cuál no dejaba de gritarme y decirme que fuy un...-.
-Completo tonto-. Lo dijo Lilith recordando el día que lucifer fue expulsado de los cielos y jamás pudo olvidar sentirse culpable de quebLucifer fue expulsado del reino celestial por haber luchado por ella-. Y Lucifer al sentír eso en su corazón le dijo lo siguiente.
-Recuerdas lo que me dijiste cuándo fuí expulsado del reino de mi padre-. lucifer esperaba una respuesta de Lilith, la matriarca de las succubus no podía olvidarlo, ella jamás olvidaría esas palabras y con lágrimas en sus ojos le dijo a su marido.
-recuerdo que estaba furiosa contigo y que a la vez estaba aterrada, por qué pensé que te iba a perder, incluso aún recuerdo que te dije con la lágrimas en mi ojo por qué lo habías echo, que por mi culpa te habían expulsado del paraíso y tú con una sonrisa en tu rostron me respondiste que...-.
-sin ti el paraíso no existía para mí-. Lucifer ya iba ha besar a su mujer pero está lo detuvo y con una sonrisa le dijo algo que le parecía una apuñalada en su corazón.
Me gustaría seguir con esto cariño, pero no vine aquí hacerte compañía, vine a despedirme-.
-¿Despedirte?. Me están dejando-.
Lo decía el gobernante sintiendo un fuerte dolor en su corazón y Lilith con ternura le dijo a su esposo.
-lucy no te voy a dejar, pero por un tiempo no estaré en la mansión-.
-y cuánto tiempo sería eso Lilith y porque te vas-.
La Reina del infierno no podía evitar sentir ternura al ver qué su esposo actuaba de esa manera tan infantil y con una voz Dulce le dijo lo siguiente.
-oh mi dulces ángel caído me encanta que te pongas así, yo también te voy a extrañar, pero el deber cómo madre me llama, y Charlotte necesita todo mi apoyo-.
Lucifer al escuchar eso no pudo evitar contradecir a su mujer y con una voz autoritaria dijo lo siguiente: -Lilith yo también amó a Charlotte pero no puedes malcriarla de esa manera además si esto se trata del hotel te recuerdo que tú y yo acordamos que no ayudarías a Charlotte-.
-Esto no tiene que ver nada con el hotel pero si te diré que Charlie me nesesita-.
Lucifer suspiró y con una voz enojada le respondió: -lilith tanto tu como yo hemos malcriado a esa niña desde el primer día que llegó a esté mundo ella a recibido todo en charola de plata-.
-Y es por eso que has dejado de ser cariñoso con ella por eso razón has actuado tan indiferente con nuestra hija, déjame recordarte lo difícil que fue para nosotros concebir a Charlotte... y no quiero recordarte a los que hemos perdido-. Lucifer no pudo evitar sentirse mal por lo que dijo su mujer y si eso no fue suficiente ella con lágrimas en sus ojos le dijo a lucifer: -charlotte creé que la hás abandonado y que ya no la amas. Solo reflexióna eso y acepta que cometiste un error en alejar a Charlotte de nosotros-. Lilith no pudo seguir más y con un chasquido desaparecío dejando a Lucifer solo en la mansión.

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