No puede ser; no otra vez
Ya van cuatro veces este mes, y ni siquiera ha terminado
Ya decía yo que mi anhelada y hermosa independencia tenía que tener un precio, todo tiene un precio; aunque honestamente poco me tuvo que haber importado para llegar a esto
–Qué voy a hacer ahora?– solté inconscientemente esa pregunta al aire. Como si hablar sola fuera a ayudarme mística y milagrosamente a ganar más dinero y que la vida no sea tan cruel conmigo, nuevamente
–A ver... Me debe alcanzar para agua y un triste pan al menos– murmuré mientras contaba los escasos billetes verdes en mis manos
Me frustraba mucho. Tenía medio año de haberme ido de la casa de mis padres para caer de cara directamente en la Gran Ciudad, y me encuentro en esta decepcionante situación. Sin trabajo y sobreviviendo de mis ahorros. Sabía que no iba a ser fácil y siempre lo tuve claro, pero creo que nunca me preparé mentalmente para quedarme sin comida cuatro días en un mes. Joder.
–Está bien, está bien– suspiré frustrada por trillonésima vez hoy. Me voy a quedar sin aire también, eso se puede?
Rápidamente me recordé de alguien que podía ayudar. Espero que pueda hacerlo
...
–David! – grité al mismo tiempo que parecía romper su puerta de tanto golpearla. Qué puedo decir? Estaba desesperada –David!–
No me digan que está dormido
–David!– sentí que mi voz se rompió de lo fuerte que grité
De repente escuché el sonido de una puerta abrirse. Volteé mi cabeza debido a que no era la de David
–Señorita, está haciendo mucho escándalo– me dijo suavemente una mujer mayor de cabellos plateados y enrulados, vestida con una bata de seda amarrada y pantuflas a unas dos puertas de donde me encontraba con cara de querer pegarme cinta adhesiva en los labios. Ganas no deben faltarle
–Disculpe, no era mi intención señora. Estoy buscando a David Collins, por casualidad usted sabe donde puede estar?–
–No– respondió tajante y con el ceño fruncido
Si claro, y yo no estoy al borde de la quiebra. Seguro está en su trabajo
–Podría avisarle que estuve aquí buscándolo?–
La señora hizo un pequeño sonido afirmativo sin quitar su ceño fruncido
–Gracias, y disculpe el alboroto– dije dándole la espalda y empezando a caminar escaleras abajo
Vendré más tarde
...
Okay, qué hago ahora?
Estoy afuera del edificio donde vive David esperando como una acosadora a que llegue a su casa, estoy segura de que su vecina debe creer que lo soy. Lo que hago no debe ser algo normal, pero repito estoy desesperada
Empiezo a caminar hasta llegar a una banca del otro lado de la calle doble vía que está frente del edificio. Me siento y mato un poco el tiempo viendo a las personas caminar frente a mí, también a las que van del otro lado de la calle frente al edificio donde me encontraba hace un par de minutos.
Tal vez si soy una acosadora
Muchos hombres y mujeres que van vestidos de forma pulcra y debo decir elegante. Algunos van de blazer, corbata, lentes oscuros, vestidos, guantes? Y otro tipo de ropa elegante de gente elegante que no puedo identificar debido al poco conocimiento e interés que tengo por eso. También hay estilos más informales e igualmente elegantes que traen chaquetas de cuero que espero sea sintético ya que no está demás cuidar un poco el medio ambiente, cierto? Relojes que de seguro son mucho más caros que toda la ropa que llevo puesta e incluido mi maquillaje, joyas de perlas, oro, plata, diamante, cobre, qué se yo?
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|| C H A N G E S ||
Adventure•La vida siempre da vueltas• Un día puedes estar en tu casa llevando una vida normal, y al otro tal vez estés en donde menos lo esperes. °°° TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS 26/02/21