PODER OCULTO ( Camren )

DESTINO INCIERTO

Cuatro meses después....
 
-120 días habían transcurrido desde aquel enfrentamiento que la hermosa Evangeline  había tenido con su padre Alexander, tiempo en el cual ella decidió marcharse y esconderse porque él se había encargado de buscarle para hacerla desistir de su decisión de traer a la luz a un ser que a su vez consideraba una amenaza, por no saber qué tipo de individuo sería,  queriendo así erradicar de una vez por todas el "problema"
Por otra parte, en el segundo cielo que a su vez es  unas de las 3 extensiones en las que se dividía la creación celestial de acuerdo a las facciones a la cual pertenecían los diferentes seres de luz. Se  encontraba  una pequeña casa adentrada en una parte boscosa rodeada de la combinación de rosas más maravillosas existentes, como si se observase  los colores de una aurora boreal; se escuchaba el llanto de un bebé acabando de nacer y que yacía en los brazos de su padre  envuelto en unas órbitas de color azul profundo y un blanco brillo que iluminaba toda la casa.
Todavía sin entender bien lo que estaba pasando por que era la primera vez que Conrad y Evangeline  presenciaban el nacimiento de un niño de esta manera natural como se decía que lo experimentaban los humanos mortales de la tierra, a diferencia se cómo lo era entre sus razas aunque  tampoco es que los hubiesen visto también de primera mano .
 
_E.. es ... es -tartamudeó Conrad._ una niña, una hermosa niñaaa!-dijo conmovido y al mismo tiempo emocionado por la infinita cantidad de sensaciones que se galopaban en su ser.
 
-con la felicidad que invadía su pecho Evangeline tomó a su hija en sus brazos para transmitirle su calor y su bendición de Ángel.
 
__Bendecida eres tu hija mía, que viniste a este mundo a llenarlo de amor sabiduría y luz..-besó la frente sita de la recién nacida niña.
 
__Es tan preciosa como tú cariño! –dijo Conrad._ pero mira tiene mi nariz.
 
-ella lo miro y le acaricio la mejilla con ternura y le dijo dulcemente._ Aún es muy pequeña para que digas eso, pero en lo que es hermosa si no hay dudas amor mío.-el intimo momento entre los recientemente estrenados padres, fue interrumpido por un fuerte portazo que mostraba a un agitado Devon.
 
_¡Ya nació!.. Oh pero ¿qué? - se quedó un poco aturdido con los ojos entre cerrados. _ Cuanta luz irradia esa criaturita. - y con una risilla diabólica le dirigió la mirada a Conrad. _ afortunadamente no tiene esas orbitas negras que tú tienes amigo mío.
 
_Cállate! – le reprendió el padre de la niña, indignado por su burla.
 
-Sin poder evitar de reírse por molestar a su amigo, Devon se inclinó para observar más de cerca a la bebe. Y que es?....¡no puede ser!, es una¡ angelita!!! Oh vaya, otra contrincante más a la que tendré que tenerle compasión...
_Claro. - dijo sarcásticamente La madre de la pequeña
 
_Bueno y como la llamarán?
 
-Preguntó expectante un Devon emocionado. Evangeline observo con devoción el adormilado rostro del pequeño milagro de vida que tenía en sus brazos, cuando parsimoniosamente unos pequeños parpados comenzarón abrirse para acostumbrarse a la luz en su alrededor dando paso a unos profundos y brillantes ojos verdes tan hermosos como aquellas lindas joyas que reposaban en el brazalete que conservaba en su mano derecha como el más anhelado recuerdo por la persona más especial en su vida cuando tan solo era una  querubín.- “¿que son madre? _ son una especie de rocas preciosas que los humanos llaman esmeraldas, hija mía”.
-y fue en ese momento que lo supo, sin duda…
_Michelle, su nombre será Michelle, como el de  mi madre.- Conrad la miro con admiración. _Es precioso mi amor, igual que tú y ella.
 
-Mientras los tres estaban maravillados con la espléndida bebé, olvidaron algo muy importante en lo que habían estado trabajando todo aquel tiempo mientras que el embarazo de Evangeline duró; siendo estos seres Divinos su crecimiento era diferente y nuevo, pudiendo ser esta la razón por la cual la gestación fue acelerada en comparación con las de los mortales, tanto que 4 meses fueron suficientes para un desarrollo sano.
Pero en lo que se habían enfocado era en crear un poderoso sello que mantuviera la casa oculta e invisible junto con sus presencias al cualquier vista y sentido de otros seres sobre naturales. Usando al máximo el poder de los 3, Pero en el momento que el trabajo de parto empezó no notaron con precisión que el sello empezó a debilitarse y entonces pasó lo inesperado...
_ ¡No puede ser! ¿Sentiste eso? -preguntó preocupada Evangeline.
- Conrad no se había percatado de nada, hasta ver la cara de aterrorizada de la madre de su hija.
_ ¡Maldición, el sello!
- Pero antes de que pudieran llegar a la parte delantera de la casa, un fuerte azote de poder se impactó contra sus cuerpos derribándolos de forma instantánea.
 
_ ¿Creíste que un mediocre sello sin el poder de mi hija completo en él, podría haberte ocultado por más tiempo de mí? - Se escuchó la estruendosa voz de un muy enfadado Alexander Vel, que descendía de forma omnipotente frente a ellos.
 
_ ¿Crees que te temo? – repuso Conrad, aun aturdido por el inesperado ataque._ Voy a protegerlas con mí  vidaaa si es posible, No voy a dejar que las toques a ningunas de las dos.