𝙰 𝚝𝚛𝚊𝚟𝚎́𝚜 𝚍𝚎

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T/N Whint:

De verdad que no estoy disfrutando nada, los recuerdos con Asher me hacen sentir más mal cada segundo, quiero irme.

- Vamos lindaa – dice Sadie – tu cara dice que no estas disfrutando nada – me jala hacia la pista.

- ¿Tomamos algo? –

- Claro vamos a la barra, allá están todos –

- Que aburridos aquí sentados – dice Sadie.

- ___ ¿Nos vamos? – se acerca Mills a mi costado.

- Si claro –

- ¿Cómo ya se van? – dice Noah.

- Si, ___ vive del otro lado de la ciudad y pues dormiremos allá – dice Milli.

- ¿Las llevo? – dice el chico.

- Oh no te preocupes, traje mi auto – dice ella regalándole una sonrisa.

- Con cuidado Milli –

Mills y yo nos despedimos de todos y subimos a su auto, se dirigía hacia mi casa y yo solo miraba por la ventana.

- ¿Segura que si estás bien? – dice voz baja.

- No lose – digo y empiezo a sollozar – Asher... -

- Otra vez ¿Cierto? – dice decepcionada.

- No estoy segura – le dedico una mirada y después sigo mirando por la ventana.

- Todo va estar bien –

- Espero – llegamos a mi casa después de un rato, subimos a ponernos una pijama y bajamos a la cocina.

- Viene mañana a Toronto – Murmure.

- Habla con el – sugiere.

- Yo, no se si las cosas funcionen, él vive lejos, me engaño estando yo cerca ahora, imagínate si yo estoy acá – empiezo a sollozar de nuevo – No lo merezco –

- Tienes razón ___, pero habla aunque sea para terminar – dice abrazándome – es más sano –

- Supongo –

- Vamos a la cama – dice Mills. Nos acostamos a ver una película hasta quedar dormidas.

En la mañana me levante Milli seguía dormida, decidí no despertarla, así que baje a la cocina y vi a mi nana con Lilia, esperen mi NANA.

- ¿Nana? – digo sin poder creerlo.

- Mi niña, ¿Cómo estás?, vine a quedarme con ustedes –

- ¿Enserio? - digo emocionada – estoy bien, muy bien ahora que estas aquí –

- No podía estar sin ustedes dos –

- Creí que te quedarías en L.A –

- Creíste mal – dice abrazándome.

- ¿Qué desayunaras? –

- Desayunaremos – corrijo – Mills esta aquí –

- ¿Milli? – Dice Lilia contenta.

- Esa soy yo – volteo y esta Milli recargada en el marco de la puerta.

- Te extrañe – dice Lilia.

- Yo a ti – dice Milli – Señora Bong, un gusto volver a verla – le dice a mi nana.

- El gusto es mío – dice Nana regalándole una cálida sonrisa.

Empezamos a desayunar y a platicar un rato, mi teléfono sonó era un mensaje de Asher diciendo que estaba ya en Toronto y confirmar hora y lugar, yo solo le dije que si, realmente mi mirada cambio en ese momento.

- ¿todo bien? – dice Lilia frunciendo el ceño.

- Si – me limito , Milli me mira sabiendo porque mi cara.

- Hoy saldré, ¿llegaron los autos? – pregunto.

- Si están ya aquí – dice Lilia.

- Perfecto –

Después del desayuno, subí a ducharme y alistarme para ver a Asher, mientras me arreglaba Mills me miraba con lastima desde el sofá de la recamara.

- Voy a estar bien – digo.

- Claro – dice sarcástica – de verdad me preocupa –

- Tranquila-

- ¿segura que quieres ir sola? – dice dudosa.

- Si Mills, solo lo terminare y me largare de ahí –

- Claro, me iré a casa, me llamas ___ –

- Si Mills – ella sale por la puerta, me acerco a mi balcón, no estaba segura si estaría bien, pero no quería preocupar a Milli con mis problemas.