11.Y aun así... (Maratón)

16 0 0
                                    

POV NIALL

Las clases de educación física siempre han sido mi punto fuerte. Realmente lo han sido.

Y Dinna es preocisa. E inteligenge. Pero sobre todo preciosa.

Cerré mi taquilla silvando. Las chicas preciosas me ponen de mal humor.

Levanté la cabeza al tiempo de ver como otra chica preciosa se dirigía atropelladamente a las taquillas. Era Sally.

-Hey-dije apoyandome en la taquilla contigua.

Ella pegó una especie de gritillo de sorpresa.

-Niall, deja de intentar matarme-contestó a la vez que sacaba sus cosas de la taquilla.

Cogí con una mano todo lo que iba sacando, porque se esforzaba por ser rápida y eso solo la hacía más torpe.

-¿Estas bien?-le pregunté finalmente.

-Es solo que tengo prisa.

-Tranquila, solo tenemos igualdad ahora.  Ya sabes, no hay problema.

-Uh ya... es solo que... hoy probablemente no vaya. Bueno, probable no, directamente no voy a ir.

-¿Por que no?-pregunté arrugando la cara como un abuelo.

Evitó mi mirada mientras contestaba:

-Voy fuera con Cody.

-¿Vas fuera con Cody? ¿Qué es exactamente fuera, Sally?

-Fuera es el mundo, Niall-contestó clavandome la mirada-Y ahora si me disculpas, tengo prisa por ir al mundo, ¿o piensas seguir dando el coñazo como haría mi padre?

La dejé ir. No tenía caso seguir hablando con ella.

Salí del gimnasio a tiempo de verla  con Cody. Izzy también la vió y se apoyó en la pared, a mi lado, mientras comentaba:

-Uhhh, Cody Templeton-parecía enfadada-He oído que es todo un semental.

-¿Has oído o has experimentado?-Tenía entendido que se había acostado con él.

-He oído, no deberías creerte todo lo que cuentan, Niall.-Aclaró-Pero igual le puedes preguntar a Sarah después.

Sally acababa de desaparecer en el coche de Cody.

-No creo que Sally vaya a acostarse con él-dije, pero Izzy ya no estaba interesada en el tema y dejó de prestarme atención.-¿Qué te pasa?-le pregunté-parecía realmente enfadada.

-Tengo que destrozar a una puta.

-Espera, ¿te gusta Cody? ¿Es Sally la puta?

-¡Oh, despierta Niall! No me importa una mierda Cody, y mucho menos tú Sally.

-No es mi Sally.

Ignoró mi respuesta

-De Beck Sollan, hablo de Beck.

-¿Quien es esa?

Ni si quiera me sonaba.

Ella sonrió encantada.

-Me alegra que no lo sepas, eso demuestra que es una zorra sin identidad.

Izzy estaba cargadita.

-Acaba de tocar a mi carta de presentación, Niall, ella esta hablando con "mi chico de bienvenida".

-Bueno, ¿no teneis en las animadoras una norma que prohibe ver a algun chico que salga con alguna del equipo?

-Pero ella no es animadora. Sólo esta de prueba. La regla no se extiende a las de prueba. Eso les  daria importancia. Y no la tienen.

-¿Y  tu no eres la capitana, la que puede cambiar eso?- Dios mío, de verdad que no entiendo las mierdas que se montan las chicas.

Me miró con cara de fastidio.

-No quiero a eso en mi equipo.

-Oh por dios, izzy, llevas siendo una matona toda tu vida, ¿de verdad no puedes serlo un poco más?

Ella sonrió como toda respuesta. 

Izzy en acción.

POV SARAH

El caso es que acabé con Cody en el central corriendo. 

Pero antes tuve una "discusión" con Niall.

Cuando fui a recoger mi ropa de deporte a las taquillas del gimnasio me encontré con Niall, recien duchado y muy contento. Me preguntó si me iba con él ha igualdad, y no le hizo muchas gracias cuando me negué contandole mis planes con Cody.

Él realmente se comportó como un idiota.

Mientras corría no pude dejar de pensar en eso pero curiosamente hice mis mejores tiempos. Batí mi record de 100 metros lisos dos veces. Dos veces. Delante de Cody. Él se veía tan impresionado que me sentí muy orgullosa.

No querráis saber lo friki que es saltarse las clases para ir a correr. Pero la cosa cambia si vas con un chico guapo, no tengáis duda.

Mientras descansábamos, Cody empezó a contarme una historia sobre no sé que hombre raro del cine que había estado haciendo no sé que cosa y al que habían acabado echando del cine. La verdad es que solo le preste atención a medias, no había manera de concentrarme en lo que estaba diciendo, pero es que en mi opinión, estaba hablando demasiado. Los chicos se quejan de las chicas que no se callan ni para coger aire, pero ¿qué hay de los chicos? 

Os juro que durante la hora que tardó en besarme no se calló ni un momento, estuve a punto de meterle el reloj en la boca. Por suerte besa bien.


Ahora o nunca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora