𝒀𝒖𝒔𝒉𝒊𝒏 𝑰𝒏𝒔𝒕𝒊𝒕𝒖𝒕𝒆. [SEVENTEEN ♡ JiHan]

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Solamente habían tres chicos en aquel salón, el 3-24B , el salón del club Yushin Social Media que podía ser ubicado más fácil con sus siglas YSM. Ese era el club del periódico escolar, básicamente, solo que este no era un periódico físico sino se desarrollaba en las cuentas de las distintas redes sociales que habían creado.

Era un club genial dependiendo de cómo lo vieras, pero estaban colgando de un hilo debido a que ya llevaban dos ciclos escolares sin tener nuevos ingresos. Su líder, Boo Seungkwan, estaba a nada de arrancarse el cabello porque no sabía que podían hacer para lograr tener más miembros.

La dirección del instituto les había dado un ultimátum, debido a que el año pasado no tuvieron nuevos miembros y en el año escolar que acababa de iniciar tampoco tuvieron nuevos ingresos, por lo tanto si no lograban un mínimo de 4 miembros más, cerrarían el club.

Sinceramente Seungkwan no sentía que necesitaran nuevas personas porque ellos tres hacían un trabajo en equipo excelente.

Boo Seungkwan llevaba el periodismo en sus genes, pues su padres eran los fundadores de la revista Hey! Una de las revistas más vendidas al nivel mundial, tenía sus ediciones para adolescentes, ediciones para adultos y demás. Entonces él siendo el líder del club, se encargaba de buscar las noticias que fuesen primicia.

Mientras Chan hacía el trabajo del fotógrafo y camarógrafo. Algunas veces lo hacía de manera encubierta en el instituto o asistía a los juegos deportivos, festivales escolares y demás actividades para lograr fotografiar algo digno del reportaje que harían.

Por ultimo estaba Lee Seokmin, el encargado de redactar las noticias. El hijo único del Primer Ministro de Corea del Sur y de la doctora Lee Jinyoon quién era la fundadora de uno de los hospitales más prestigiosos del país.

Pero para ser honestos, el club hacía mucho que no tenía una buena noticia y debido a la falta de interés, terminaron publicando tips de belleza, salud y otras cosas poco relevantes en las redes sociales del periódico. Todo con el fin de no dejar que aquello muriera, era por eso que los demás chicos del instituto consideraban que el club de YSM era una pérdida de tiempo y a veces veían a sus miembros como perdedores.

Se salvaban, porque estaban inscritos en otros clubes que sí tenían más renombre.

─Creo que ─habló Seokmin jugando con el lápiz entre sus dedos─, deberíamos darnos por vencidos.

─¿¡Qué!? ¡No! ─gritó Seungkwan negando frenéticamente con la cabeza─. ¿Acaso estás loco? No nos daremos por vencidos, hyung.

─Pero Seungkwan, acéptalo ─Chan lo miró desde su lugar en el sillón azul─. Somos unos perdedores, nadie quiere unirse a nosotros.

Seungkwan rodó los ojos, molesto por la poca fe que tenían sus amigos.

Además, él tenía un plan infalible para lograr reclutar más miembros en su club. Chasqueó los dedos para inmediatamente señalar a Seokmin y lo miró fijamente.

El mayor a veces sentía miedo de las ideas de su amigo, pero lo dejaría hablar para escuchar que era la locura que se le había ocurrido esta vez.

─Debemos conseguir una noticia que sea tan buena, que todos quieran ser parte del club ─Seungkwan se cruzó de brazos asintiendo.

─Amigo, estás en Yushin, donde la gente es tan perfecta que no pasa nada ─Chan rodó los ojos─. ¿Qué se supone que haremos? ¿Espiarlos en sus casas?

─Eso es ilegal ─habló Seokmin antes de que Seungkwan tuviera otra idea─. Digo que por el momento, hagamos noticias pequeñas y poco a poco conseguiremos material. Vienen la temporada deportiva y también el festival escolar, lo lograremos.