ELmO tieNE ᵃ lAs peRRaS haCieNDO filA

💜Malentendido 💚

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Narradora pendeja:

Elmo estaba asustado, ninguno de sus dos "pretendientes" lo había molestado por un mes, no sabia si eso era bueno o malo, porque estaba tranquilo pero al mismo tiempo no sabía si hiban a volver de una peor manera.

Hasta que ese día vio algo que nunca podría creer, tocaron su puerta con la esperanza de ser la comida que había  ordenado, pero en cambio vio a la rana y al dinosaurio con trajes formales y con una tranquilidad que asusto al de nariz amarilla.

-Buenos días amado Elmo- anunciaron al unísono

-Esta bien, me están asustando, que quieren?- dijo nervioso el rojo

-Yo y el dinosaurio hicimos un acuerdo-

-A ambos nos gustas y nos vemos como una amenaza para el otro, así que decidimos que aceptes una salida con ambos- explicó el morado

-Y así que tu tomes la decisión con quien quedarte para que el otro se vaya en paz- dijo la rana

-Pero yo no quiero a ninguno de los dos, además están pendejos y para eso ya tengo a las chicas que nos encontramos por arte de magia- dijo elmo con dolor de cabeza

-Solo inténtalo, no pierdes nada- dijo la rana desesperada

-PORFAVOOOOR- gritaron al mismo tiempo terminando con la poca paciencia del de nariz amarilla

-ESTA BIEN, pero una condición- dijo Elmo- yo elijo el lugar

Y con eso acordaron la cita para el día siguiente en el bar donde Barney vio al pelirrojo por primera vez.

En otro lugar:

-Si, tenemos al objetivo localizado vamos por el ahora mismo-

-Pero que no ese dinosaurio iría por el?-

-No confío en que lo haga, ustedes sigan lo que el jefe diga, además haciendo este favor ganamos mas-

Ya tenían el plan, solo quedaba ejecutarlo.

Al día siguiente:

Narradora pendeja:

Un grupo de chicas hiba sin un rumbo fijo, hoy fue un día aburrido y ya no sabían que hacer así que esperaban que algo interesante se les cruze en su camino.

-Y si jugamos algo?- propuso la de voz dulce

-Eso ya lo hicimos y no termino bien, que tal si vamos por comida?- dijo la chica con varios piercings

-YO YA NO PELEARE ESTA VEZ, la última vez arruinaron mi bello rostro- dramatizó la de estatura pequeña e hizo un puchero- Hoy no estoy de humor quiero irme a casa

- Vamos amiga, aun podemos hacer algo, ya verás- dijo con ánimo la sonriente morena

-Vayamos al parque- propuso otra de las chicas- así sacamos al Chimu antes de que saque su lado salvaje

-Oigan esa que no es la marioneta roja de la otra vez- dijo la más alta de todas

-Alfin algo bueno, veamos a donde va-

Y con eso las chicas siguieron al chico de peluche hasta que vieron que se dirigía al bar donde se toparon por primera vez.

Narradora pendeja:

Nuestro rojo favorito no quería ir a esa cita, pero si con eso aullentaba a esos dos tuvo los ánimos de ir.
Una vez dentro del establecimiento pudo ver en una mesa a ambos con los mismos trajes de ayer y se estaban peleando por la carta, con solo ver eso Elmo se quería ir pero debía ser fuerte.