Melting My Heart 💜

💫A N G E L 💕

JungKook abrió sus ojos y divisó la luz escapándose por un lado descubierto de la cortina de la ventana de su habitación, que le anunciaba que la mañana había llegado.

Desordenó un poco su cabello buscando despertarse por completo, se levantó de su cama y escogiendo ropa para lo que iba a ser un día largo de clases y ensayos, la tomó y la puso en su tan característico bolso negro, muy al estilo camarógrafo por cierto. Luego busco algunas prendas que usaría para ir hasta la agencia y las llevo consigo al baño para tomar una ducha y cambiarse en seguida.
Salió vistiendo un gorro negro muy bonito, unos jeans ajustados, una camiseta blanca y sus botas timberland. Se dirigió hasta la cocina para tomar su desayuno rápido, para luego dirigirse a la estación y encaminarse hacia el lugar donde para él había empezado un sueño, pero también ahora había encontrado algo más, tal vez la felicidad en esa persona que tanto ansiaba poder ver ese día.

Por su parte Taehyung acababa de despertar, algo somnoliento pero mucho mejor a diferencia de su estado el día anterior.
Se apresuró a levantarse para así vestirse, ya que sabía que no podría evitar el ir a trabajar ese día, suficiente retraso tuvo el día anterior y no iba a aguantar más los regaños por parte de ChanYeol.

Tomando las llaves de su auto, su abrigo y teléfono, salió de su apartamento.

El azabache se sentía algo nervioso, no lo iba a negar aunque tampoco tenía la certeza de porqué, estaba claro que aún no lograba asimilar o más bien aceptar que lo qué lo ponía nervioso eran sus sentimientos hacia el menor y el miedo que le causaba el pensar en lastimarlo con sus inseguridades y temores al igual que lo hicieron con él en el pasado.

Bajó de su auto en el estacionamiento del edificio de la agencia, y subió al ascensor.
Estando un piso más arriba las puertas del mismo se abrieron anunciando que mas gente subiría, como era normal a esa hora ya que todos ingresaban a sus trabajos diarios, pero lo que no esperaba era ver unos ojos emocionados y brillantes, que lo miraban alegre mientras entraba y se paraba junto a él, con la gente por delante suyo llenando el espacio. Solo hubo un cortes "Buenos días" y una sonrisa entre ambos al encontrarse, después al llegar al siguiente piso algunas de las personas bajaron y otras subieron llenando por completo el espacio, dejando así apretados al menor junto a un hombre que no se veía nada amable y lo miraba de una manera un tanto inapropiada, así que sin darse cuenta, Tae se posicionó entre aquel sujeto y Jungkook, pasando su brazo derecho a lado de su cuello y apoyando su mano en la pared, posicionando al castaño en una esquina del elevador, tratando de protegerlo y no aplastarlo.
Sus miradas y respiraciones aceleradas se cruzaron por un instante, se miraban de una manera inexplicable, ambos estaban un tanto sonrojados, sus mundos parecían detenidos hasta que de pronto las puertas se abrieron anunciando el piso en el que ambos bajarían.

—¿Estas bien? — preguntó Tae mientras caminaban juntos a su sala de ensayo.

—Si, gracias a ti, aquel tipo me dio escalofríos,  se veía como un total acosador— respondió JungKook algo apenado y sin alzar mucho su mirada. Quería preguntar qué había sucedido el día anterior, o por qué no había llegado, se preguntaba si habría sido debido a aquel beso que se dieron, pero no pudo, no sabía cómo hacerlo sin hacerlo sentir presionado, eso era lo que menos quería, ya que se había propuesto conquistarlo pero no así, lo haría, lo intentaría pero siendo el mismo y sin ninguna presión.

—No es nada, solo deberías tener más cuidado, tal vez suceda de nuevo y yo no esté allí, así que debes defenderte Kookie— abrió la puerta y se quitó su abrigo para luego ponerlo en el perchero junto a la puerta.

—Ahora prepárate y empecemos nuestra clase de hoy, Jimin debe estar por llegar junto con Min, hoy combinaremos nuestras clases— JungKook observo algo cabizbajo al mayor y se dirigió hacia el vestidor para cambiarse, le entristecía que al parecer ni si quiera recordaba o le importaba lo que había pasado entre ellos, pero también no le alegraba tanto compartir su clase ya que era el único momento en el que podía verlo a solas.

—Estoy listo, si quieres podemos empezar ya Tae— camino hacia el espejo para hacer sus calentamientos

—Parece que Jimin aún no llegará, así que termina de calentar y luego comenzaremos cantando la canción en la que estábamos trabajando mientras pones en práctica algunos pasos básicos que te enseñó Chim, mientras lo esperamos— el castaño asintió y obedeció con una sonrisa.

Tae observaba fascinado a aquel muchacho, su bien definida cintura moviéndose al ritmo de la melodía mientras cantaba con aquella voz tan parecida para el, a la de un ángel, tal ves un ángel que lo sacaría de su infierno y lo llevaría al mismo cielo, si tan solo se diera la oportunidad de empezar, de sentir, la oportunidad de amar.

No paraba de admirar aquella pasión, aquella entrega que se veía reflejada en cada paso que daba, en cada nota que cantaba. Sin duda, Jeon JungKook era más que talentoso.

De pronto, la música paró y JK se tiró al suelo algo sudoroso y cansando por aquella enérgica actuación. Tomando un respiro de 2 minutos volvió a ponerse de pie y observó al mayor frente a el, extendiéndole unas hojas con una canción escrita en ellas.

—¿Que es esto?— cuestionó algo confundido.

—Es la canción que estamos pensando lanzar para tu debut, ChanYeol me pidió que te la enseñara— los ojos del menor abrieron de par en par al escuchar las palabras de Tae, estaba emocionado ya que no se imaginaba que su debut llegaría tan pronto.

—Pero, ¿como? ¿No es muy pronto para hablar de eso? A penas cumpliré una semana en la agencia.— exclamó sorprendido.

—Así es, pero eres muy talentoso y la agencia quiere que lo hagas lo más rápido posible— su expresión era alegre y serena.

—¿Crees que podré hacerlo?— su mirada decayó un poco —Me siento algo inseguro, ¿y si no soy lo suficientemente bueno?— estaba emocionado pero asustado.

—Claro que si, no tienes porque temer, ¿crees que si yo o el resto del personal pensara que no puedes, te lo diríamos?— el mayor acarició la cabeza del menor tratando de alentarlo.—Ahora quítate todas esas inseguridades y empecemos a ensayar, tu debut está programado para dentro de un mes y tenemos que apresurarnos con todo—

JungKook tomó las hojas y cuando Tae puso la melodía este empezó a tararear de poco a poco la letra para así aprendérsela. De pronto estaban ensayando juntos, el menor recibiendo sugerencias por parte de su maestro, de cómo mejorar algunas partes.

Jk caminaba algo despistado y sin fijarse había tropezado con el espejo, dejando caer así las hojas. Tae fue hasta el, con la intención de ayudar a recoger aquellas partituras esparcidas en el suelo, sin darse cuenta sus manos habían tomado el mismo pedazo de papel haciendo contacto la una con la otra, ambos alzaron sus miradas, quedando frente a frente y con una distancia algo corta, esa distancia que ambos deseaban romper. Se iban acercando cada vez más, sin dejar de mirarse, hasta que fueron sacados de su transe por un Jimin agitado y sudoroso.

—Chicos, lo siento me quede dormido y Yoon Gi ya viene hacia acá, así que no se preocupen y... —se sorprendió en ver la posición de su amigo y aquel castaño, pero al mismo tiempo le alegró, significaba que aunque Tae aún no lo aceptase, sus sentimientos por Jk eran obvios.

—Les daré unos minutos, voy al baño y regreso, par de tórtolos— les dedico una sonrisa pícara y salió por la puerta.

Ambos chicos sonrojados se apresuraron a pararse terminando de recoger las hojas.

—Yo, lo siento no sé qué me pasó— JungKook bajo la mirada —Es que no puedo evitarlo— estaba a punto de decirlo, a punto de confesar lo que sentía.