Una imposible decisión

Capítulo VI

"Casarse por amor puede ser un poco arriesgado, pero es tan honesto que Dios no puede evitar sonreír." -Josh Billings.

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Jeremy la observó durante unos segundos y Scarlett intentó adivinar lo que estaba pensando, aunque le fue imposible.

Su hermano cerró los ojos y por unos instantes, la joven pensó que estaba dormido.

-Una pelea. - dijo finalmente.

Los ojos de Scarlett se abrieron llenos de sorpresa.

No consiguió formarse una imagen de Jeremy regalando puños a las mandíbulas de otros hombres.

«¡Y yo que pensaba que nunca le haría daño ni a una mosca!»

-¿Con quién? - exigió saber con tono demandante.

Jeremy volvió a cerrar los ojos y Scarlett supo que debía de sacarle toda la información posible o quizás a la mañana siguiente no abriría la boca ni para decir que taverna había visitado esta vez.

-Sé que puede parecer extraño - murmuró arrastrando las palabras -, pero Gregory Ashwood se encontraba allí.

-¡No me digas que...! - exclamó Scarlett creyendo que se desmayaría en cualquier momento.

-No. - se apresuró a responder Jeremy -. No he tocado a Gregory.

El alivio recorrió todo el cuerpo de Scarlett y aunque se reprendió a sí misma unos segundos más tarde, supuso que ahora todo carecía de importancia.

Si Gregory no había sido dañado por culpa de su hermano, entonces podría descansar en paz.

«¿Qué haría yo si Gregory nos exigiera cualquier precio por culpa de un cuerpo dolorido? Lo último que necesito ahora es ir haciendo enemigos... ¡Oh, espero que Jeremy piense lo mismo!»

-¿Y bien? ¿Qué ha ocurrido?

-Gregory parecía muy... triste y decidí acercarme a él para hacerle compañía. No recuerdo muy bien cómo, pero de un minuto a otro Gregory se batía a puños con otro hombre, aunque ninguno de los dos conseguía mantener muy bien el equilibrio. Entonces, los intenté separar y me llevé este ojo morado.

¡Aquello sí que era inesperado!

Scarlett jamás pensó que Gregory Ashwood fuera un hombre violento y mucho menos que empezara peleas...

Era simplemente un comportamiento inaceptable.

¡Y el pobre Jeremy se había llevado un golpe por intentar hacer que reinara la paz!

-¿Y dónde está Gregory? - preguntó Scarlett con renovados temores.

Jeremy se encogió de hombres y respondió con indiferencia:

-No lo se. Le dije que volviera a su casa ya que Penélope lo necesitaría... - permaneció en silencio durante unos segundos-. ¡Quiero otro trago!

-No. - contestó con demasiada firmeza -. Dejaré que duermas...

Cuando Scarlett volvió a su habitación, no supo cómo sentirse con todo lo ocurrido.

Sabía que era terrible que su hermano hubiera vuelto a casa con un ojo morado. ¿Qué diría su madre?

Scarlett ni siquiera se dio tiempo para pensarlo; decidió que todo se sabría a la mañana siguiente.

***

Cuando la señora Spencer entró en la habitación de Jeremy para despertarlo, Prissy y Scarlett la siguieron de cerca sabiendo la tormenta que se avecinaba. Su madre había estado de mal humor durante toda la mañana al ver que su hijo no les complacía con su presencia y finalmente, no pudo soportarlo más.